Oí gritos.
Tus gritos.
Me levanté como alma que lleva al diablo y corrí hacia tu habitación.
Discutías con Keegan.
Te gritaba.
Te veías tan indefensa. Llorando y rogándole que se marchara.
No se iba.
Te sacudió e insultó.
Lo golpeé y lo saqué de casa rápidamente.
Dormí contigo toda la noche, consolándote.
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Dulce Maddie
Short StoryDulce Madie... Yo profundamente enamorado de tí. Y tú profundamente enamorada de mi primo, o eso suponías. Tú parecías tan bien. Pero estabas muriendo. Tú escondías tan bien los secretos... Tú eras única.