Capítulo 44

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Pov. Callie.

Ayer que hablábamos con mi padre, me quede pensando en el cumple de Arizona, aun no se realmente que hacer para ella o que regalo darle, se un poco sus gustos, pero quiero sea algo significativo para ella, serán nuestros primeros cumpleaños juntas, por una parte, quizás pida consejo a Barbara y un poco de ayuda a Mark, quizás no será algo impresionante pero realmente quiero hacer de ese día algo bueno para ella.

Me levante a darme una ducha y comenzar alistarme para nuestra última semana de clases, un poco triste ya que me estaba acercando a los chicos de nuevo y yo sé en vacaciones cada quien hace lo suyo, esta vez no la pasare tan sola tengo a mi hija y Arizona conmigo, sus padres son personas agradables, ahora todo es tan diferente.

Lista de mi baño busco que ponerme y la verdad fue lo primero que encontré, un top blanco con rayas y mangas un poco largas, se muestra un poco de mi abdomen, jeans rasgados, Adidas negros de la línea "Kanye West", me hice una coleta alta y sin maquillaje. Un momento me quede frente al espejo, siento he subido un poco de peso, cuando estaba embarazada subí mucho de peso y soy un poco de contextura gruesa, cada vez que miro el cuerpo fino de Arizona me gustaría estar un poco así, pero es mucho pedir sé que no estaré así, siempre he sido insegura y pensado que no soy muy atractiva para la vista de alguien, fui sacada de mis pensamientos cuando escuche que alguien me hablaba.

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Arizona: ¿Porque te ves tanto en el espejo?

Callie: Me has asustado, pensé aun dormías.

Arizona: Eso no contesta mi pregunta.

Callie: Solo miraba si llevar esta camisa o cambiármela.

Arizona: Yo le veo muy bien, no te la cambies, claro si quieres igual está bien.

Callie: Creo me la dejare, iré a ver a nuestra hija para su baño y tú te alistas.

Arizona: Calliope, aun no me das los buenos días.

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Sonríe con picardía y me acerco a ella, me inclino a besarle, es un beso tierno, de esos lentos que disfrutas de tener los labios de tu pareja, sentirlo como que es la primera vez que le tocas, me alejo de ella y le extiendo la mano, le llevo a la entrada del baño le doy un beso y se gira para quitarse la ropa y entrar a la ducha, aprovecho y le doy una palmada en el glúteo le sonrió y hago mi camino a la salida de la habitación.

Cuando entro en la habitación de Carol, ella ya está despierta y sentada jugando con su mono que jamás se despega, algunos peluches que tiene dentro también. Le hablo suave y se levanta, me tiende los brazos y la agarro, la llevo al baño y comienzo a llenar un poco la tina y a probar el agua esta tibia para ella, hoy su baño fue tranquilo cosa que en ella es raro, se dejó bañar sin tirar agua o los juguetes que mantiene. Al salir la coloco en la cama le ayudo a secarse porque ahora ella agarra la toalla y se la pasa, pero claro no se seca bien menos su cabello, pero me gusta que ya aprende hacer sus cosas, para la corta edad que tiene ella es muy inteligente y viva.

Le escogí una camisa blanca rayas rojas, un short jeans y unas botitas cafés que Barbara le compro, le peiné y le puse sus lazos, al salir me fui a nuestra habitación y encontré Arizona ya vestida y terminando de peinarse. Llevaba una camisa celeste de botones manga larga, encima un suéter negro, jeans negros, vans negros, dejo su cabello en hondas sueltas y sin gota de maquillaje.

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Arizona: ¡He! Ahí están mis chicas favoritas, hola cariño.

Un Nuevo ComienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora