Pasaron dos dias y la joven castaña se negaba rotundamente a ir, a ella le parecia ridículo estar en una escuela donde no la dejarian salir y en donde no estaría comoda.
Lissie tenia un carácter muy fuerte y sabia como darse a entender cuando algo o alguien le incomodaba. La joven era algo baja de estatura, con un hermoso cabello castaño oscuro y muy largo, tenia un rostro que solo demostraba dulzura y amabilidad pero en realidad esa pequeña de apenas 15 años era el demonio en persona.
__ Mama! - Grito la chica desde la cocina
__ Dime cariño - Su madre era muy dulce y tierna no tenia el mismo caracter que su pequeña hija. Mirabell era bajita al igual que su hija y tenia el cabello negro con risos impecables.
__ Ma tus galletitas - Dijo Lissie en un tono mas bien de tristeza.
__ Haber... - La madre miro las galletas en el horno y puso cara de desaprobación, en definitiva se habian quemado por completo.
__ Cuando regreses del internado haremos mas galletas cariño.
__ Mamá no ire al internado
__ Cielito piensalo bien si? Tienes muchas oportunidades estudiando en ese colegio para señoritas.
__ Mamá, pero yo quiero estar aquí con mis amigos, mi familia, el centro comercial... La pista! Mamá quiero libertad, esta que solo ustedes me dan por favor no me envies ahi.
__ Mi niña tienes saber algo... - La madre de Lissie susurro muy bajo aquello -. Hace mucho tiempo debimos decirte este secreto tu padre y yo pero no era hora y nuestra flor ya casi florece.
__ Al grano mamá! .
__ Si! Hemmm¡! Por donde empezar? Cariño recuerdas cuando tu hermano fue a a casa de tus abuelos durante el verano cuando tenía 16?
__ Si mamá que pasa con eso?
__ Para ti existe ese colegio y para tu hermano fue la granja de tus abuelos.
__ Mamá no te entiendo
__ Te vas a convertir .- La señora tapo su boca con ambas manos y abrio sus ojos al decir aquel secreto.
__ En que mamá? En dinosaurio? En adolescente? En vampiro? En hada? En que mamá!? -. La castaña estaba enojada en sus ojos podia reflejarse. - Mama ya no soy una niñita esos cuentos para converserme ya no funcionan...
__ Mama ya se lo dijiste!? -. El hermano de la joven irrumpió en la cocina de golpe mirando a su pequeña he inocente hermana.
Lissie era ignorante sobre ese tema, ella no creía en la mitología ni en la fantasia, en su infancia tal vez si, pero la pequeña ya habia crecido y su mente madurado aunque era ciega de algunas cosas. Sus padres llevaban sangre de algo sobrenatural, algo que nunca imagino. Sangre de lobos y sangre de brujas corrian por las venas de los jovenes. Jhonny el hermano de Lissie era mitad licantropo, Lissie por igual pero ella tenia un don unico, y no era de esos dones comunes ella poseía... Magia negra.
__ Hija Mia, eres la creación más hermosa, tu padre es un brujo, su familia unas de las 5 mas antiguas manejan la magia blanca, son héroes, y yo pues cariño...existen los licantropos y yo pertenezco a esa rama .- su madre se encogio de hombros esperando la reaccion de la adolescente.
Ya habian pasado horas, nadie habia dicho ni una sola palabra sentados en la mesa de la cocina se miraban en silencio absoluto. La madre tenia el corazon en las manos con miedo.
__ Cariño llegue a casa -. Se anuncio Gilbert en la puerta aun sin entrar a la residencia.
__ ¡Papá! -. La pequeña corrio tan rapido a abrirle la puerta a su adorado padre. -. Papa mi mama esta diciendo cosas raras.
__ No hagas caso princesita
__ Ven Papá. - la niña tomo el brazo de su padre y a rastras lo llevo a la cocina donde yacían todos en silencio. - Mamá dile a mi papá lo que dijeron esta tarde tu y mi hermano.
__ Se lo dijiste y no me esperaste? .-Acuso el padre mirando con tristeza y enojo a su esposa.
__ Entonces es verdad eso... - La castaña retrocedio unos pasos con lagrimas en sus ojos. - Yo no puedo ser eso papá y ustedes tampoco.
Lissie corrio fuera de su casa, con los ojos aguados y sumida en una tristeza profunda corrió al bosque sin siquiera darse cuenta. Su naturaleza la estaba llamando y ella acudia a su reclamo, escucho voces y sin duda la castaña las siguio despacio. En cierto punto quien sabe donde exactamente la niña se sento en el suelo frio y húmedo detras de un troco, sollozaba y maldecia, lloraba y al mismo tiempo balbuceaba palabras extrañas. Cuando en un momento se quedo dormida.
El sol bañaba sus rizos y los insectos jugaban en su piel, Lissie habia dormido plácidamente aunque en un lugar frío y humedo desde un punto de vista humano, si un licantropo vivia esa experiencia diría que fue reconfortante ya que su naturaleza estaba adaptada para aquello.
__ Dormi en el bosque, genial -. Exclamó Lissie. Despacio se levanto de lo que habia sido su cama, toco la tierra y sonrio, miro al cielo, detalló cada rama de los arboles, la castaña estaba facinada con cada mota de polvo que pasaba ante sus ojos, sus sentidos se estaban desarrollando su transformación de aproximaba ya casi era su cumpleaños.
Pronto se encaminó a su casa, asustada la joven planeaba una excusa ya que paso fuera de su casa toda la noche. Distraida por unas ardillas Lissie tomó otro camino.
__ Rayos! Creo que me perdí. - la niña estaba perdida, pero no asustada. Lissie camino de regreso por donde había entrado a esa parte del tan temido bosque, encontró un sendero y se guió de que por ahí era por donde debia regresar.
La niña era intrépida sin duda, capaz y audaz. Elizabeth a sus 15 años estaba experimentado un frenesí de adrenalina pura que corria por sus venas sin notarlo, sin poner atencion, ella corria por el sendero libremente mientras que la brisa jugueteaba con su cabello. La castaña se acercaba cada vez mas a su casa, hasta que algo o mejor dicho alguien se entrometio en su camino.
__ Oh no¡! Rayos! -. Lissie corrio a cualquier otra dirección sin saber, el punto era huir del lobo. Corrio y corrio sin parar, la castaña no sabia en donde estaba metiendo. Ella empezo a llorar por el miedo, tropezo con un viejo tronco y sus sollozos se hicieron mas fuertes. El lobo la alcanzo. Estaba entre el tronco y el lobo, entre sollozos y mocos, miedo he histeria. El lobo se acerco a ella y lamio su cabeza, y hay fue cuando ella dejo de llorar.
__No me haras daño? .- la joven estiro su brazo hasta alcanzar el hocico del canino y acaricio lentamente, esté solto un aullido y froto su nariz humeda en el cuello de la niña. Lissie se levanto y jugueteo con el pelaje rojizo del enorme lobo que se encontraba frente a ella.
