Capítulo 6

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Holly

Con cada paso que daba más me adentraba en aquel bosque, iba lentamente pues no iba a ningun lugar por lo tanto no había prisas en llegar.

Admiraba cada detalle desde el suelo cuebierto por hojas y ramas caídas de aquellos grandes arboles hasta la impresión que causaba que cada lugar fuera igual a el anterior.

Llegó la tarde y por mi mente cruzó la idea de que tenía que volver a casa sino mamá se enfadaría y no me dejaría volver.

Asi que solo di media vuelta y comencé a caminar con destino a la casa.

Cada vez todo se ponía más confuso y era más dificil distinguir el camino lo cual comenzó a inquietarme, auque me gustaran este tipo de lugares quedarse sola en un bosque enorme, en pleno invierno y casi en la noche no era buena idea para nadie.

Aún no ha caido la noche, el cielo toma un color que es una combinación de tonos rosados, el frio comienza a hacerse presente por lo cual introduzco mis manos en los bolsillos de mi saco en un intento de bucar calor.
Camino mirando tanto a el suelo como hacia el frente, para cuidar por donde piso como también para saber a donde voy.

Me sorprende ver que en esta parte los arboles no estan tan juntos aunque igualmente se siente desolado y oscuro.

Seguramente soy la única persona varios kilómetros a la redonda que se ha decidido por adentrase aqui pero debo de admitir que no ha sido una mala idea.

De un momento a otro calló la noche, no sabía donde estaba pues ya debería de haber llegado a casa, el miedo comenzaba a hacerse presente y mis manos temblaban pues había tenido que sacarlas de mis bolsillos para restregarme los antebrazos y darme calor.

Miraba hacia todos lados pero no podía distinguir nada conocido, los arboles que estaban a más de tres metros de mi habian quedado camuflados por la noche y el sentimiento de pánico comenzaba a crecer dentro de mi.

-Tranquila Holly es solo un estupido bosque- susurré audible solo para mi aunque fue en vano eso no me tranquilizó en absoluto.

Las hojas se movieron, el sonido de una carrera tras los arboles se escuchó, me quedé completamente inmovil y di por sentado que era mi imaginación jugandome una mala pasada.

Pero de todas formas imaginación o no comencé a caminar más rápido.

El sonido era más fuerte, los pasos eran claros pero no eran los mios de eso estaba segura, era evidente que no estaba sola.

- ¿Quién está ahí?- dije frenando de golpe y voltendo para enfrentar a quien fuera el dueño de los pasos y lo que más me atemorizaba era que nadie me conocía aqui... nadie podía estar jugandome una maldita broma pesada.

-¡Conteste!-Grité ya nerviosa y con más miedo del que había sentido jamás, si aquella persona quería hacerme daño podía hacerlo sin problemas, nadie lo sabría, nadie me escucharía ni me encontraría.

Por un momento todo se mantuvo en silencio y lo único que se escuchaba era la brisa y alguna que otra rama rompiéndose.

Hasta que todo comenzó, quien fuera que estaba persiguiendome comenzo a correr y no presisamente para alejarse, corría en mi dirección...

Di media vuelta y comencé a correr tan rápido como podía, ramas y hojas golpeaban mi rostro pero no les daba importancia pues si paraba ahora me atraparía.

La persecusión acabo en cuanto noté que me acercaba a una casa pero igualmente segui corriendo y no paré hasta chocar contra una persona que estaba justo al inicio del bosque.

-¿Estas loca?- dijo el chico rubio de ojos azules como el oceano y rostro palido como el papel.

- Yo... lo-lo siento- dije apenada.

- Como te vas a el bosque sola cuando está atardeciendo, ¿Tu eres suicida amiga?- dijo el chico claramente alterado por mi comportamiento.

-Que dices es solo un bosque...- dije un tanto insegura pues lo que acababa de pasar no pasa en bosques comunes y corrientes.

- ¿Deveras no sabes porque te estoy diciendo esto verdad?- dijo el entrecerrando los ojos y comprendiendo que en verdad yo ignoraba la situación.

- No la verdad es que no- contesté insegura.

- Pues no te dejaré sola aqui afuera con este frio y las cosas que estan pasando- dijo mirando los alrededores- pasa- indicó señlando su casa la cual era parecida a la mia, espaciosa y muy grande.

Little SecretsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora