Lost in London

Capitulo 32. Invitandote.

La mañana siguiente de mi cumpleaños amanecio lloviendo, las primeras lluvias asomaban entre las nubes determinando la inminente llegada del otoño.

Fui la primera en despertarme, la odiosa tormenta y los truenos me despertaron haciendo que me quedase petrificada de miedo entre mis sabanas.

La cabeza me daba vueltas, no era ningún síntoma del poco alcohol que había tomado la noche anterior, sino el recuerdo del beso que Harry y yo habíamos compartido en la terraza del hotel.

"Amigos" Adoraba esa palabra, eso era lo que éramos ahora. Amigos que se querían y que intentaban reconquistarse ya que sus corazones latían por el otro y no habían dejado de hacerlo en ese tiempo.

Había sido algo estúpida al haberle pedido ser solo amigos, a vista de la gente y de todo el mundo era así, pero estaba en mi naturaleza ser cauta.

Después de salir de la cama y vestirme con la ropa que me habían regalado las chicas el día anterior, ponerme la pulsera de colgantes de los chicos y comprobar por millonésima vez que el colgante del avioncito de papel que Harry me había dado seguía en mi cuello, me deslice por la casa sin hacer ruido, escuche risas en la habitación de Destiny e inmediatamente salí corriendo por el pasillo riendo yo también. El día anterior al volver de la fiesta había vuelto sola, con Harry que se había empeñado en acompañarme y dejarme sana y salva en casa, que no sabía quién de las chicas había dormido en casa y quien con los chicos, pero al escuchar esas risas tontas que salían de la habitación de mi hermana pude darme cuenta de que teníamos un invitado masculino con nosotras; Niall.

La siguiente habitación que visite fue la que compartían las chicas, me asome un poco y las contemple durmiendo plácidamente en sus camas, excepto Danielle que su cama estaba completamente hecha, Lo cual me extraño ya que ella era la que menos excusa tenia para desaparecer.

Seguí paseándome por la casa mientras tarareaba una canción que surcaba por mi mente en esos momentos.

-Valerie despierta-escuche gritar a mi hermana desde el piso de arriba

–Vamos a ir a comer por ahí con los chicos, levántate-siguió gritando. Me reí en bajo y la escuche aporrear la puerta.

-Valerie Doyle que te levantes, ¿tan destrozada te dejo ayer Harry que no puedes ni con tu cuerpo?-dijo de manera malintencionada. Abrí la boca de par en par mientras escuchaba las risas de las chicas que parecían haberse despertado con los gritos y los golpes de mi hermana.

-Ya estoy levantada Destiny, deja de pegar voces-le grite para que se callase. -Y pregúntale a Niall que quiere para desayunar-volví a gritar para que ambos me escuchasen mientras me reía y escuchaba a las demás reírse también.

Abrí el balcón que había en la cocina y salí a respirar un poco de aire cuando me encontré con una enternecedora imagen en el porche del jardín.

Sentados en el sillón acolchado que teníamos pegando a la puerta se encontraban Liam y Dani. Él estaba recostado sobre el respaldo del sillón con los ojos cerrados y ella se apoyaba tiernamente en su pecho también con los ojos cerrados mientras ambos se sujetaban de las manos y el la protegía del frio con el brazo que tenía libre. Cogí una manta de cuadros que había guardada en los cajones de la cocina, se la eche por encima y me volví a meter dentro para preparar el desayuno.

Al rato bajaron los demás y como cotillas todos se asomaron a ver la escena que yo misma les había detallado, hasta que no pudieron más y los despertaron. El desayuno fue largo, intenso y muy divertido, mientras Niall picaba a Perrie, que le metía prisas para que desayunase más rápido para poder ir a ver a Zayn

-¿Entonces estáis juntos?-pregunto Niall mientras esperábamos a que Destiny y Eleanor bajasen para irnos a comer con los demás. Liam y Danielle sonrieron y esta última se sonrojo mientras nuestro amigo levantaba sus manos entrelazadas a la vista de todos en señal afirmativa justo para que las dos personas que faltaban se diesen cuenta de lo que había.