La Hermana De Remus Lupin

Capítulo 1

Miraba las manillas del reloj moverse lentamente, ocasionando un sonido sordo tic-tac tic-tac. Quedaban sólo cinco minutos para que acabase la clase de Biología, y con ella este curso. 

Tras insufribles meses haciendo trabajos, estudiando de madrugada, por fin comenzaba el verano, y con ello tres meses de descanso. Lo más importante era que mi hermano volvía de Hogwarts, colegio de magia, en el cual estás todo el año. Los nervios me invadían y decidí guardar todas mis cosas

-Señorita Lupin, quedan tres minutos -la amargada y chillona voz de nuestro profesor me asqueó. Nunca me había caído tan mal alguien. Lo miré retándole, y antes de que pudiera decir algo, la campana sonó. Me levanté a toda prisa sin importar la mirada de mis compañeros o los regaños del profesor, simplemente salí.

-¡EH SHARON! -me paré y giré, corriendo hacia mi se encontraba Ryan, mi mejor amigo. Cuando afatigado llegó por fin donde me encotraba me alzó lal mano, señal de que estaba cansado. Tras eternos 5 segundos volvió a retomar su compostura y me sonrió- ¿Vas a por tu hermano no?

-Sí -le sonreí, ya sabía donde quería llegar-. Y no Ryan, no puedes venir. Ya sabes que os lleváis mal, por mucho que lo intentes. Si me disculpas debo irme -pasé a su lado, y sin querer choqué contra su hombro. Remus y Ryan nunca habían llegado a conectar del todo, mi hermano me decía que algo en él no cuadraba.

Llegué al aparcamiento repleto de coches carísimos, y no tardé mucho en reconocer el de mi madre, pero me llevé una sorpresa. Corrí a más no poder hacia allí y salté a los brazos de mi hermano, el cual se reía de mi reacción. 

-¿Qué haces aquí? Pensé que teníamos que ir a buscarte -le dije todavía con mis piernas enredadas a él y abrazándolo fuerte, le había echado muchísimo de menos.

-Se supone que sí, pero alguien se ha levantado en clases y se ha ido sin más -me miró reprochandome, le guiñé un ojo-. alguien está muy enfadada -dijo mientras contenía la risa.

-SHARON AMY LUPIN -un grito sonó por todo el aparcamiento, atrayendo la atención tanto de alumnos como de padres. Mi madre venía desde la puerta principal del instituto roja de rabia. Por acto de reflejo me escondí detrás de Remus, apegándome al coche. El duro sonido de los tacones de mamá resonaban en el silencio abrumador. Cuando estaba frente a nosotros me apuntó acusadoramente con el dedo cerrando un ojo-. ¿Cómo se te ocurre salir de clase sin más y faltarle el respeto a un profesor? ¡Se supone que deberías ser un modelo a seguir, no todo lo contrario! -las risas de mi hermano no tardaron en salir. Mi madre y yo le miramos confusas pero al poco tiempo también reímos. Soy la mayor de los dos, y debo admitir que Remus es mucho más maduro que yo.

Nos subimos al coche, yo adelante y Remus atrás, ya que me mareaba mucho, y necesitaba mirar la carretera.

-Oh Shar se me olvidaba algo -intenté girarme hacia mi hermano pero me entraron las nauseas, así que sólo asentí esperando lo que me iba a decir- unos amigos se quedarán con nosotros en verano

-¿Qué? -miré por el retrovisor y vi que mi hermano estaba bastante feliz por ello- ¿dormiréis todos en una habitación? -él se rió. Me contó sobre ellos, se llamaban Sirius, James y Peter. Según él Sirius y James eran los "engreídos" del grupo, Peter el tímido y él el tranquilo.

Una vez llegados a casa, al entrar, lo primero que vi fueron los amigos de mi hermano charlar en el sofá. Los tres se me quedaron mirando con la boca abierta. Uno tenía el pelo negro y bastante largo, atractivo pero no era mi tipo. El segundo era más bajo y un poco más grande, tenía el pelo castaño claro y me miraba asombrado. Y el tercero, debo admitir que me impactó. Era alto, con un pelo castaño muy desordenado. Unas gafas posicionadas enfrente de unos preciosos ojos marrones. No podía descifrar como me miraba. Remus entró sonriente, pasó su brazo por mis hombros y dijo

-Chicos, ella es mi hermana. Sharon Lupin