veinte

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Después de  aquélla discusión con Ariana, Mía se  sintió muy mal, realmente no  entendía  qué  había pasado.
Escuchó a su madre llamarla desde el primer piso y se  dió cuenta de que habia estado pensando mucho.

Mariana: ¡Mía!

Mía: ¡Ya voy!

Se levantó de  la cama y  salió del cuarto,  bajó las  escaleras con rapidez y  diviso a Mariana hablando con Micaela.

Mariana: Tienes visitas.

  Mariana salió de la sala  dejándolas solas.

Mía: ¿Qué pasa?

Micaela: Yo  también estoy bien Mía.

Mía: Ya..

Micaela: Vale, no sabes lo que  tengo  aquí.

Mía: ¿Qué tienes?

Micaela le  entregó a  Mía un sobre.

Mía: ¿Mh..?

Micaela: ¡Abrelo!

Mía abrió el sobre y se  encontró con dos boletos de ida hacia New York.

  Mía: ¡¿Mañana?!

Micaela: ¡Lo sé!, ¡¿no es genial?!

Micaela  abrazó con entusiasmo a  Mía, esta  última con cara de pocos amigos,  contestó.

Mía: Sí... supongo.

Micaela: Ok ahora debo irme, mañana a las siete.

Le  guiño un ojo a  Mía antes de salir por la puerta.
Justo antes de subir las escaleras, su madre la  llamó nuevamente.
Le  había  pedido que la  ayudara en algo.

Mientras tanto, Ariana iba caminando, a una manzana de llegar a su casa. En medio de la discusión con  Mía su celular se había quedado sin batería y necesitaba llegar para remediar todo.
Iba tan ocupada y concentrada en sus  pensamientos que no se  dió cuenta, su iPhone había caído en la acera, ya que no lo llevaba con atención.
Entró en su casa y dejó las bolsas sobre la mesa, quiso agarrar su iPhone del bolsillo de su campera y se alteró al notar que faltaba,   corrió a la puerta y  abrió, encontrándose con una chica de  aproximadamente 20 años. Una castaña con el cabello suelto y ojos marrones.

Ariana: ¿En  qué puedo ayudarte?

Xx: Tengo tu  móvil..

Ariana: ¿En serio?

La castaña  sacó el iPhone de su bolsillo y se lo  entregó.

Ariana: ¿Pero  cómo..?

Xx: Se  cayó de tu abrigo y lo vi.

Ariana: Vale gracias, soy Ariana, por cierto.

Xx: Es un gusto, yo soy Camila.

Ariana: ¿Quieres pasar a tomar algo?

Camila: No gracias, no quiero ser  molestia.

Ariana: No lo eres, anda.

Ariana se hizo a un lado y Camila pudo pasar al lugar, por detrás entró ella y  cerró la  puerta.

Ariana:  Siéntate, ya  regreso. ¿Quieres agua,  jugo. .?

Camila: Agua  está bien.

Camila se  sentó en el  sofá y a los  segundos entró Ariana con dos  vasos de  agua, se  sentó a su lado y le  dió uno de ellos.

Camila: Gracias, Ari.

Ariana  asintió y  sonrió.
Después de varios minutos en silencio, Camila  habló.

Camila: Mh,  debería irme.

Ariana: No,  háblame de ti. ¿Vale?

Camila: Vale.

Después de varias horas hablando, Ariana le había contado su historia con Mía.
Escuchó sonar su celular  y  recordó haberlo dejado cargando hace horas.
Se levantó y fue por  él,  regresó y  contestó los mensajes pendientes, vió que  tenía uno de  Mía y  abrió el chat.
Se  sentó, una vez  más, junto a Camila y  leyó.

Camila: ¿Qué pasa..?

Ariana: Se  irá.

Ariana  bloqueó su celular y  continuó hablando con Camila, ignorando el tema.

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Nota

Perdón por la tardanza, mi celular  está roto y odio actualizar desde la netbook, ahora estoy desde el celular de Camila, (sí, la amiga de Ari).
Espero poder actualizar  más seguido y  perdón x2.
Se quedan con la intriga jojo. 7u7

WhatsApp; unknown (lesbian)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora