Segunda parte de Falling in Love
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Ya habían pasado cinco años desde que Anissa había leído aquel mensaje devastador.
La chica, ya convertida en toda una mujer de veintitrés años, había terminado sus estudios y a pesar de tene...
Abrí los ojos incorporandome rápidamente en la cama. ¿En la cama? ¿Cómo había llegado hasta aquí?
Parpadeé unas cuantas veces para acostumbrarme a la luz que entraba por la ventana y darme cuenta de que estaba en mi habitación. Recordé la noche anterior y una imagen de Wes totalmente cambiado apareció en mi cabeza.
-¿Donnie? ¡Donnie! -Me levanté de la cama lo más rápido posible para dirigirme al cuarto de mi hijo pero allí no estaba. -¡¿Donnie?!
-¿Qué pasa, Ann? -Preguntó Lexy con Donn detrás. Enseguida me acerqué para abrazarlo fuertemente.
-¿Estás bien? No has visto a nadie ¿verdad? -Agarré sus mejillas para que me mirara a la cara mientras que él fruncia el ceño. -Te amo mucho, pequeño. -Volví a abrazarlo fuertemente.
-Vé a la habitación a jugar, Donnie. Enseguida voy yo. -Mi hijo asintió y lo solté para verlo irse a su cuarto. -¿Qué es todo esto, Anissa? -Anoche lo vi.
-¿Eh? ¿A quién?
-Ah Wes... Estaba allí. A mi lado y yo...
-Eso no pasó, Anni. Te emborrachaste y Jenna te trajo. -Negué con la cabeza.
-Te estoy diciendo que...
-Y yo te estoy diciendo lo que Zach me dijo. -La miré fijamente a los ojos. -Al parecer te encontraron en el jardín del local.
-Pero yo lo vi, Lex...
-Quizás fueron tus imaginaciones, Ann... -Me condujo al sillón para sentarnos. - Zack dijo que habías bebido más de la cuenta y quizás por eso lo imaginaste. Si no recuerdo mal, a él lo conociste en una fiesta...
-Si... -Murmuré para taparme la cara y comenzar a llorar. -¿Por qué la vida es así de injusta conmigo? Primero me había premiado con una buena persona para después ¿quitármela? ¡Esto no tiene ningún sentido!
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-Pero, Anni. Tienes a Donnie...
-¡No es lo mismo! -Grité para ponerme de pie. -Wes era mi único amor. ¡Lo quería más que a nadie de mi familia! Soñábamos... soñábamos con un futuro juntos ¡incluso con hijos! Y cuando por fin le voy a dar uno... ¿Se va sin decir nada? ¿Sin dejarme contactar con él y poder decirle que tiene un hijo? ¿Por qué? ¿Por qué hizo eso? ¿Por qué me abandonó sin más?
-Ya está, Anni. No te mortifiques más con eso.
-Tienes razón, pero no puedo dejar de hacerme esas preguntas. -Lex volvió a abrazarme y yo seguí llorando por mucho tiempo más.
•••
El fin de semana había pasado rápido. Como le había prometido a mi madre, fui a su casa a visitarlos y a pesar de nuestras diferencias, pudimos pasar una tarde agradable.
-Oye, Anni...
-¿Si?
-¿Te enteraste de la última noticia?
-¿Qué última noticia? -Pregunté frunciendo el ceño. Sarah rodó los ojos para acercar su silla a mi mesa.
-Pues que hay un nuevo inversionista. Las malas lenguas dicen que es un mujeriego al que no le importa tirar el dinero.
-¿Y las buenas lenguas? -Dije divertida.
-Pues esas dicen que es una persona encantadora que le gusta ayudar a la gente.
-¿Algo más?
-Si. Que está soltero y dispuesto al amor. -Levanté una ceja y ella rió. -Son bromas, pero si estará soltero. Porque de haber sido al contrario, me hubiera enterado.
-Claro. Había olvidado que tu eras la cotilla de la empresa...
-¡Oye! -Me miró ofendida para golpearme el brazo.
-Lo siento. -Reí aun más. -Sabes que eres mi amiga igual, Sarah.
-¡Si, claro! -Me fulminó con la mirada para volver a colocarse en su mesa. -Ya no te diré más nada.
-Venga, Sarah. Sabes que son bromas. -Me hizo regañizas y yo volví a reír para seguir con mi trabajo.
-¿Qué le hace tanta gracia, señorita Sullivan? -Bff... y ahora esta.
-Nada, señorita Clark.
-Entonces no se a que espera para seguir con su trabajo. -Asentí y la vi adentrarse al despacho de Drew sin ni siquiera tocar.
-Como la odio...
-Tú sola no... -Murmuró Sarah levantando la cabeza. -También están haciendo apuestas...
-¿Apuestas para qué?
-Para ver cuanto tarda esa y el nuevo en estar juntos. -Hice una mueca de asco.
-Pues espero que ese hombre sea lo suficientemente inteligente para darse cuenta de la víbora que es Isabella...
-Opino igual. -Asentí y ahora sí, seguí trabajando en todo los papeles y facturas que tenia que revisar.
•••
-Tengo que decirte algo, Anissa...
-¿Qué pasa? -Pregunté mirando a Lexy preocupada.
-Verás... Antes cuando fui al supermercado a comprar con Donnie... Nos encontramos con...
-¿Con quién?
-Con Lukas... -Mis ojos se abrieron como platos y juro que noté como mi respiración se cortaba.
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