Enamorado en silencio

Capítulo 2

En el  capítulo anterior

-Se llama Hanabi su hija –mencionó mi padre- son Hyuga

-Ese el nombre de la bebé, Minato. La mayor se llama Hinata y Neji es el primo de las dos niñas

¿Unos Hyuga? Al fin podría conocer a un Hyuga, estaba esperando el día para conocer a los integrantes de aquella famosa familia.

Fue en ese momento en el que vi la cara de Hinata, podía jurar que eran los ojos más hermosos que había visto en estos cinco años de vida que tengo. No sé por qué no tengo el valor de hablar con ella, pero me dan celos cada que ella y Sasuke están juntos, sé que son mejores amigos pero ¿y yo?

Solo ellos dos: Sasuke y Hinata; Hinata y Sasuke, sin Naruto de por medio.

Capítulo ll

-Buenos días Hinata –saludaba siempre cada sábado cuando ella salía a su caminata en las mañanas y con el puro pretexto de que también amaba esa actividad, me uní a ella

-Buenos días, Naruto –saludó cordialmente antes de ponerse sus audífonos e ignorar el hecho de que siempre la seguía

Nunca supe por qué no podía hablar cómodamente con ella, siempre había algo que impedía entre nosotros una plática común y corriente, eran pocas las veces que nos saludábamos y contadas en las que pasábamos de un "¿Hiciste la tarea, me la pasas?" Solamente podía admirar aquel largo y azulado pelo moverse con ella. Deseaba ser más cercana a ella ¿Por qué el idiota de Sasuke pudo y yo no?

¿Sasuke? Él venía cada que se le placía acompañaba a Hinata a caminar, ellos siempre iban riendo. Para él, Hinata era especial porque es la única chica con la que sonríe, con la que ríe, la única chica a la que le habla

-¿Naruto? –maldición, he sido descubierto -¿Qué haces aquí?

-¡Sasuke, Hinata! No los había visto –inmediatamente el rostro de Hinata cambió, su sonrisa se había ido en el momento en que me vio –Yo, necesito ejercitarme un poco; el doctor me dijo que lo necesito

-¿No será por otra razón, idiota? –ella empezó a reír. Sasuke sospechaba de mis sentimientos hacia su mejor amiga, ante él yo era bastante obvio –Saben qué, tengo que ir con mi hermano a hacer las compras, continúen ustedes. Nos vemos

No hubo conversación en nuestra parte, mis palabras no salían y ella nunca me hablaría. Creo que ese era nuestro destino.

*

-Hinata, amiga debes ayudarme –no me gustaba ser una persona chismosa pero era imposible no escuchar la conversación teniendo en cuenta que Hinata se sienta frente a mí –por favor, eras la única persona que puede hacerlo ¿me ayudas?

¿Desde cuándo Sakura y Hinata eran grandes amigas? Casi nunca hablaban y para ser sinceros... Hinata no hablaba con nadie que no fuera Kiba, Shino o Sasuke ¿es porque Sakura se peleó con Ino y ahora no tiene a nadie más?

-De-depende de que-que sea Sa-Sakura –respondió Hinata con su usual tartamudeo, es chistoso porque aun cuando ya vamos a entrar a preparatoria ella sigue con sus malos hábitos y dentro de unos pocos segundos empezaría a juguetear con sus dedos

-Eres la mejor Hinata –podía notar cierta hipocresía por parte de la peli rosa, lamentablemente la conozco muy bien y sé que detrás de ese tono de voz hay algo malo –Verás amiga, hay un chico que me gusta mucho desde el jardín de infantes y obviamente ya sabes quién es ¿verdad?

-No Sakura, no te ayudaré en eso –por primera vez se pudo oír a Hinata hablando con determinación, no había duda o miedo en su hablar

-Pero no sabes lo que te quiero decir aún

-Sé perfectamente lo que quieres y lo siento no te puedo ayudar

Hinata se paró de su asiento, Sakura como pudo la detuvo

-Hinata, por favor –suplicaba Sakura

-No puedo ayudarte, lo siento –murmuró e inició su camino directo al pasillo

-Hinata, por dios –gritó asombrada- ¡Te gusta Sasuke!

Y todo se detuvo: mis compañeros, Hinata, Sakura, mi mundo. Todos miraban a Hinata y después a Sasuke quien había ingresado al salón después de lo que dijo Sakura, la pobre tenía ambas manos en cubriendo su boca, como si hubiera descubierto el más grande secreto del mundo.