Enamorado en silencio

Capítulo 3

En el capítulo anterior:

Nunca supe por qué no podía hablar cómodamente con ella, siempre había algo que impedía entre nosotros una plática común y corriente. Solamente podía admirar aquel largo y azulado pelo moverse con ella. Deseaba ser más cercana a ella ¿Por qué el idiota de Sasuke pudo y yo no?

Hinata, por favor –suplicaba Sakura

-No puedo ayudarte, lo siento –murmuró e inició su camino directo al pasillo

-Hinata, por dios –gritó asombrada- ¡Te gusta Sasuke!

Y todo se detuvo: mis compañeros, Hinata, Sakura, mi mundo se detuvo. Todos miraban a Hinata y después a Sasuke quien había ingresado al salón después de lo que dijo Sakura, la pobre tenía ambas manos en cubriendo su boca, como si hubiera descubierto el más grande secreto del mundo.

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¿Yo? Yo solamente sabía que mi mundo se había venido abajo, no sabía que tan cierto podría ser que Hinata gustara de Sasuke, pero él estaba aquí, mi amigo había escuchado la última oración emitida por Sakura así que todo podía pasar y el silencio que existía en el salón de clases no ayudaba mucho

-¿Es cierto eso, Hinata? –finalmente Sasuke habló – ¿Realmente te gusto?

La distancia que había entre ellos él la acortó acercándose a Hinata. Nada de esto podía estar pasando, no, no podía pasar

-Sa-sasu-su-ke-kun –mencionó Hinata, su tartamudeo estaba a todo lo que da –Yo...

No pudo terminar su oración: Sasuke se acercó a besarla, mientras que yo moría por dentro. Podía declararme como muerto en este momento, nada podía salvarme ahora, nada podía hacerme regresar al tiempo y asegurarme que Sasuke jamás tocara los labios de Hinata. No quería imaginarme el rostro de mis compañeros porque en ese momento solo pensaba en tratar de mantener la calma, no estallar y gritar que amaba a Hyuga Hinata con toda mi alma

-Me gustas Hinata, no te puedo ver más como mi mejor amiga –todos exclamaron que era la escena más conmovedora del mundo

Quería que el mal triunfara y que Hinata le dijera a Sasuke que a quien amaba era a mí. Espero que no sea mucho pedir

*

-Hemos recorrido un largo camino juntos, lamentablemente el momento de decirnos adiós y tomar caminos separados ha llegado. Muchos irán al extranjero a probar nuevas oportunidades pero donde quiera que estemos, compañeros, siempre recuerden que seremos de Colegio Konoha

Nos estábamos graduando, dejábamos preparatoria para ir a la universidad y muchos dirían que su vida por fin estaba cambiando ¿la mía? Cambió en el momento en que Sasuke le pidió a Hinata ser su novia enfrente de todos, para mi maldita suerte ella sentía lo mismo por él. ¿En qué cabeza pasaba que ella se podría enamorar de mí? Solo en la mía.

No supe nada de Sasuke ni de Hinata por dos años, ambos se fueron a la Universidad de Tokio y yo me quedé en Konoha estudiando Psicología con Shikamaru.

Debería enamorarme de Shion, la sexy extranjera que siempre me provocaba y con la que he tenido encuentros cada viernes, no sentía amor por ella pero no podía negar que me la pasaba mal; a veces ella me daba pena porque quería creerse la muy candente pero en la cama era tan ingenua y tan inocente; como Hinata. Al final descubrí que la única razón por la que me enredaba con Shion es por su gran similitud con mi amada Hinata. Lo sé, soy un miserable, por más que me esforzara en pensar en alguien más nunca lo lograba.

-Nunca me imaginé que estuvieras así de enamorado de Hinata, nunca hablaban. Qué fastidio debió haber sido cuando se hizo novia de Sasuke

-Lo sé Shikamaru; desde ese momento he sido un miserable

-Un miserable –repitió- deberías de dejar de hacerle eso a Shion, ella está enamorada de ti

-Ella es la que siempre me busca, la carne es débil

-Viejo que patético –respondió Shikamaru

Sabía que debía alejarme de Shion, yo no podía ofrecerle más que mi cuerpo y no es justo para ella

-No me importa Naruto –suplicaba- No importa si solo estamos juntos de esta manera ¡así me gusta! ¿Sabes?

-Por favor, Shion –supliqué sin fuerza- no te menosprecies así

Ella era tan resbalosa, y no podía decir que no a sus besos; sé que soy una porquería por aprovecharme de ella en esta manera, pero estaba enfermo lo sé. ¿Qué clase de patético era al pensar en Hinata cada que lo hacía con Shion? Cuando la rubia movía sus caderas contra las mías y me pedía con esa mirada perdida que entrara más fuerte a pesar de las lágrimas que derramaba o el dolo que sentiría al próximo día, no me podía detener a su sensualidad pero había algo que si me podría parar.

Hinata podría detenerme, saber que Hyuga me ama haría que estos encuentros se detuvieran porque solamente tendría ojos para ella; pero no está y nunca lo estará para mí. Hinata estaba prohibida.

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  "Enamorada en silencio"

Misma historia desde el punto de vista de Hinata

~PROXIMAMENTE~