FALL《Luke Hemmings y tú》

|Capítulo 19|

|LUNES|

*Narra _____*

Me encontraba en mi casillero sacando los libros correspondientes a mi próxima clase. Ya habían pasado dos semanas desde lo ocurrido con Luke, dolía demasiado como me ignoraba o me evitaba, pero me lo merecía. Caminaba cabizbaja por el pasillo en dirección hacia la clase de matemáticas cuando dos personas interrumpieron.

-Styles ¿como te ha ido?.- Eran Nash y Niall. Traté de ignorarlos pero fue inútil, Niall agarró mi brazo y me devolvió para quedar de nuevo cara a cara con los dos.

-¡OYE QUE TE PASA!.- Me quité bruscamente de su agarre. -¿Crees que puedes llegar así y fingir que nada pasó?.-Miré a Niall.

-Cariño, es que, nada pasó.- Contestó en un tono irónico y sin importancia.

-Maldito.- dije casi inaudible. -¿Qué es lo quieren?.- ya estaba fastidiada.

-Oh, no queremos nada. Ya pasó lo que queríamos que pasara.- Nash comenzó a reír. -Nunca me gustó la amistad que llevaban tú y Luke.

-Eres un maldito Nash.- bufé.

-Lo sé, pero por lo menos sí les creo a mis amigos cuando me dicen algo.- Dicho eso Nash y Niall se dieron la vuelta, dejandome ahí parada. No sé porque las palabras no salían, tenía tantas ganas de llorar, pero tenía que ser fuerte para no darle el placer a ninguno de los dos.

-¡Hasta nunca ______!.- El grito de Niall retumbó por todo el pasillo.

Corrí hacia el baño, lo malo es que estaba casi hasta el otro lado, pero no me importó y corrí lo más rápido que podía. Mis ojos dejaron salir lágrimas de desesperación, enojo y tristeza. Faltaba poco para llegar al baño y choqué con alguien que iba saliendo del salón de deportes. 

-Lo siento, yo...-Traté de limpiar mis lágrimas y mirar a la persona con la que había chocado. Todo mi ser se paralizó al encontrarme con esos ojos azules que me hacían tanta falta. La mirada de Luke estaba apagada, sus ojos no tenían el mismo brillo de antes. Su boca trataba de abrirse como si quisiera decir algo y su orgullo no lo permitiera.

Escuché un suspiro por parte de Luke y esquivó mi débil cuerpo para seguir con su camino. Tenía que decirle algo, quería escuchar su voz de nuevo.

-¡Lu-Luke!.- grité en un tono entrecortado. No obtuve respuesta, él seguía caminando. -¡Luke, por favor!.- mis lágrimas volvieron a salir. -¡Sólo dime que sientes por mí!.- mi cuerpo estaba en el piso y mis manos tapaban mi rostro. Levanté la mirada y el cuerpo de Luke estaba parado dándome la espalda.

-Lo que tú nunca sentirás por mí _____.- Las palabras de Luke retumbaron en mi cabeza. El tono de su voz era tan ronco.

-Luke...- susurré, pero ya era tarde porque el cuerpo de Luke ya no estaba.

*Narra Luke*

El entrenador me pidió que le llevara unas listas para el juego de mañana. Había durado unos minutos para encontrarlas ya que tenía como mil papeles en su escritorio. Finalmente agarré las listas y salí del salón. Estaba comprobando que si fueran esas hojas cuando un cuerpo chocó conmigo.

Levanté mi mirada y me encontré con la persona que menos me quería encontrar, mi corazón se destrozó al verla en ese estado. Tenía ganas de abrazarla y decirle que todo estaba bien. Su cuerpo se veía débil, sus ojos estaban rojos y sus cabellos estaban pegados a su rostro ya que estaba húmedo. Recorde las palabras que me dijo ese día:"Largate de aquí Hemmings, dejame sola" di un suspiro y continúe mi camino.

-¡Lu-Luke!.- escuché que gritó. Cerré mis ojos y traté de ignorarla. -¡Luke, por favor!.- volví a escuchar, pero mis pies no dejaban de caminar. -¡Sólo dime que sientes por mí!.- Mi cuerpo se quedó quieto cuando escuché esas palabras, quería seguir caminando e ignorarla, pero me dolía demasiado.

Suspire y finalmente hablé.

-Lo que tú nunca sentirás por mí _____.- Dije en un tono firme. Mis pies volvieron a responder y seguí mi camino hacia la cancha, dejando a ______ atrás. Maldita sea, como duele.

*Narra ______*

Este día había sido el peor, ni siquiera sé porque me desperté, mejor me hubiera quedado en casa y nunca salir.

Cerré mi maleta ya lista para mañana, no me quería ir, pero era lo mejor. De vez en cuando hace bien cambiar un poco la rutina. Pero yo amaba mi antigua rutina, en donde Luke y yo eramos inseparables, eramos él y yo contra el mundo.

Luke tenía un enorme lugar en mi corazón, pero dolía tanto tener que sacarlo porque yo ya no era lo mismo para él, ya no era mutuo. Mi corazón se destrozó al ver el álbum de fotografías que teníamos desde pequeños hasta hace unas semanas. Abrí el álbum y mi mente se llenó de tantos recuerdos que habíamos pasado. Una sonrisa se formó en mi boca y luego una lágrima se deslizó por mi rostro. Es increíble como las personas pueden llegar a ser una fuente de fuerza para uno, porque sin ellas, eres débil. Volví a abrir la maleta e hice un hueco en mi ropa ya doblada y metí el álbum, volví a acomodar mi ropa, y cerré la maleta para luego bajarla y ponerla en una esquina de mi habitación.

Grace entró por mi puerta con una sonrisa enorme en su rostro. Sorbí mi nariz y sequé mis lágrimas para luego hablar.

-¿y ahora a ti que te picó?.- Reí un poco.

-Ashton es increíble.- dio pequeños saltitos. -Es la mejor cita que he tenido.- Mordió su labio inferior y se tiró a mi cama.

-Genial Grace, me alegro mucho por ti.- Le sonreí y me dejé caer a su lado.

Grace estaba en silencio con la mirada perdida al techo. Luego de unos segundos habló.

-Lo besé.

Di un respingo y la miré.

-¿Qué? Grace, te dejo sola y te haces rebelde. -Ambas reímos.

-Oye, no me podía ir de aquí sin antes darle un beso.- Grace dio un suspiro de enamorada y se tapó la cara con una almohada. -Sólo que, lo voy a extrañar mucho, ya sabes, mañana nos vamos...

-Oh vamos Grace, pueden tener una relación a distancia.- Traté de animarla.

-______, las relaciones a distancia es enamorarte de las palabras, no de la persona.

-Grace, la distancia no significa nada, cuando alguien lo significa todo.- Grace hizo una mueca y luego sonrió de lado.

-Y sólo serán unos meses y luego regresaremos.

-Tienes razón, gracias.- Me abrazó, le respondí el abrazo.

Ya todo estaba listo, mañana nuestro vuelo sale a las 8 p.m. para poder llegar allá en la mañana. Mis padres habían estado todo el día llamando a la abuela, asegurandose que ya tuviera todo listo allá, parecía como si mis padres fueran los que se iban a ir. Harry estaba sentado en el sillón jugando con sus dedos. Fui en dirección hacia él.

-Hola.- Sonreí.

-Hola.- seguía jugando con sus dedos.

-¿quieres hablar?.- pregunté un poco insegura.

-¿Te tienes que ir mañana? _______ nunca faltas a mis partidos.- Sus ojos verdes me miraron con decepción.

-Oh vamos Harry, sólo faltaré a uno.- Despeiné su cabello. -Los próximos serán en unos meses y te prometo estar aquí para cuando empiecen.- Lo miré y le sonreí sinceramente.

Harry sonrió de lado y luego me abrazó.

-Te voy a extrañar boba.

-Yo más bobo.- lo abracé más fuerte.

Luego de unas horas más, subí a mi habitación, esta será la última vez que dormiré aquí, mañana será el día...