Esto son dos que iban super borrachos en un bar a punto de cerrar:
-Oye,¿por qué no vamos a mi casa para seguir con la juerga?
-No, mejor a la mía, que está cerquita
-A ver, veamos cuál está más cerca
Llegan a la esquina, se detienen y dicen:
-Ya llegamos, esta es mi casa
-No puede ser, tambien es la mía
- Llamaremos. Asi sabremos de quien
Llaman a la puerta, sale la dueña y dice:
-¡Muy bonito, padre e hijos borrachos.