Motivos por los que Minseok no debería salir con JongDae ❀ KaiSoo • ChenMin

08: Tendré que hacer cita para verte

⚠️  Avertencia, spoilers de un libro, si no has leído Cinder y quieres hacerlo (y no te van los spoilers), no recomiendo mucho leer este capítulo, lo siento :c

《▪︎▪︎▪︎》

KyungSoo estaba azorado. Sus mejillas estaban ardiendo a causa de muchos motivos. La principal la veía justo ahora, frente a él.

Después de que JongIn lo dejara en la entrada de su edificio de los dormitorios, su corazón se había normalizado conforme subía las escaleras. Se aseguró de que sus mejillas no reflejaran todo el nudo que sentía en su estómago porque los ojos de JongIn seguían brillando en sus recuerdos, con una sonrisa hermosa mientras se despedía.

No se habían acercado más, solo habían caminado con las manos tomadas, pero el simple recuerdo hacía que KyungSoo pareciera que tuviera taquicardia. Su estúpido corazón era un traicionero, y aunque él quisiera seguir negándolo no podía. No podía seguir mintiéndose a sí mismo, ni a los demás sobre Kim JongIn, le gustaba, le gustaba muchísimo.

Y bueno, en esas situaciones no había nada que hacerse, simplemente aceptar la realidad y lo que viniera.

Aunque eso significara hacer cosas ridículas.

Cuando llegó a la habitación que aún estaba vacía, Minseok seguramente se había quedado por ahí charlando con Baek o quizá ㅡcon un poco de suerteㅡ con JongDae, así que se tiró sobre su cama, con el regalo de JongIn entre las manos. Los ojos le brillaron y sonrió un poco emocionado mientras se apresuraba a rasgar el papel.

El lomo de un libro se asomó y casi gritó de sorpresa.

Le habían regalado un libro. ¡Al fin alguien le había regalado un maldito libro! ¡Mil puntos para Kim JongIn! El tipo se merecía más que dejar que le agarrara la mano.

Sacudió la cabeza para espantar los pensamientos estúpidos y poco racionales que pasaban por su cabeza dispuestos a almacenarse por ahí.

El libro traía consigo una nota decorada con pequeños puntos e intentos torpes de corazones en las orillas. Y rezaba así:

《Espero que te guste... y que me recuerdes en cada página, en cada lugar y momento. Te compraré el siguiente en cuanto termines con este.

-Kim JongIn》

Do frunció el ceño y se dispuso a ver la hermosa portada de un pie que parecía un poco mecánico con una zapatilla roja. Se quedó extrañado ante la rara elección del chico.

Nunca se hubiese imaginado que le regalaran un libro, mucho menos uno como aquel. Juvenil, el inicio de una saga, y... juvenil. Distópico.

Había escuchado hablar de aquella saga, contempló el nombre y recorrió con sus dedos el grabado del título: Cinder.

No sabía si echarse a reír o a llorar por el gusto tan raro que JongIn tenía. Había supuesto que le regalaría alguna obra famosa para intentar impresionarlo, algún clásico o quizá un libro romántico, pero una novela juvenil distópica basada en cuentos de hadas, jamás.

De cualquier manera le daría una oportunidad. JongIn lo merecía, y por ahora... El señor de los anillos de J.R.R. Tolkien debería esperar.

Estaba recogiendo el papel, doblándolo cuidadosamente para guardarlo en una pequeña caja bajo la cama cuando Minseok entró a la habitación.

El chico escudriñó a su amigo y levantó una ceja de manera acusadora.

ㅡ ¡Tienes un libro nuevo! ㅡ saltó Minseok mientras corría a la cama de Do a tomar el libro entre sus manos.