Encuentro Inesperado

16 1 0
                                    

Era casi mediodía, cuando ella apenas llegó de su rutina diaria, ya habían pasado 4 meses, luego de aquella decisión, y la verdad es que le iba bien.

Apenas llegó a su apartamento, se dispuso a preparar la tina para darse un baño y acto seguido, cuando terminó de hacerlo, fue directo hacia la cocina a preparar su almuerzo. Luego de una hora, se encontraba revisando sus e-mails, cuando llamaron a la puerta.

Ella se dispuso a abrirla y cuando lo hizo, lágrimas empezaron a correr por sus mejillas y su cuerpo adquirió una emoción tan grande e inexplicable, que solo podía mantenerse ahí, sin articular ninguna palabra, cuando de pronto, se lanzó a sus brazos y por fin salió algo de su boca...

-Papá!

Si, y es que ella tenía mucho tiempo sin saber de él, desde aquel día en que tuvo que partir a la guerra para luego no volver a verlo más que en sus pensamientos, junto con el recuerdo de su madre fallecida.

Luego de un intenso y largo abrazo, lo invitó a pasar y sentarse, y después de invitarle un jugo, se pasaron toda la tarde hablando de ellos y de sus vidas. Él miraba a su hija, tal cual como miraba a su fallecida esposa... Con una ternura inexplicable. Y ella lo veía a él con ese destello de esperanza en sus ojos, pues al fin lo volvía a ver.

Luego de horas de charla y risas, su padre se despidió, ya que debía cumplir asuntos de negocios, pero le prometió volverla a visitar pronto. Ella lo abrazó muy fuerte y dos minutos antes de cerrar la puerta, de su boca salieron unas palabras que no decía hace muchísimo tiempo:

-Te quiero papá!

Ladrona de melancoliasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora