Capítulo uno

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Ya había pasado más de una semana desde que Marinette había salido del hospital, y en todo este lapso de tiempo, tanto Alya, como sus padres, estaban contentos de ver que ella se estaba volviendo a acostumbrara a su vieja rutina.

Eso era algo que les gustaba, aunque había cosas que les sorprendía, como algunos cambios a lo que era antes, como el hecho de levantarse temprano, la remodelación de su cuarto y guardarropa.

Tikki por las noches la ayudaba a practicar por las noches para que se acostumbrara de nuevo a utilizar sus poderes, lo necesitaba por el bien de París, dado a que ella no recordaba nada como era de esperarse sobre cuando era Ladybug, y como tal, de su compañero, Chat Noir.

Algo en lo que había mejorado bastante era en los estudios, pocos días después de salir del hospital, los médicos habían recomendado una profesora particular para poder guiar y adaptar más rápido a Marinette en el ámbito académico, para así, adelantar la integración de ella en la escuela nuevamente.

Alya y Marinette, lograron formar un vínculo de amigas, uno nuevo, pero no tan fuerte como el anterior, eran amigas, claro que si, pero ella aún no le tenía de toda confianza a la castaña por el simple hecho de no haber tenido situaciones que lo reforzaran a su amistad.

En la escuela, todo iba dentro de lo normal, los docentes tres días después de que saliera Marinette del hospital, les informaron a los alumnos la causa y razón por la cual Marinette había estado faltando durante todo el mes, y que, para alegría de varios, ella la semana entrante volvería al colegio.

Ese día la clase estuvo llena de susurros y mensajes de texto por lo que, quedaban de clases, o al menos todos a excepción de Adrien, Nino, Sabrina y obviamente Chloe, y obviamente, estos que se mandaron susurros y mensajes de texto le hicieron un gran interrogatorio a la Alya, la cual solo respondía con algo de incomodidad, aunque al menos prefería eso, a que le hagan esas preguntas a Marinette, que ella desconocía su respuesta.

Después de todo ese interrogatorio Alya les había dicho que el lunes, se les presentara bien, y tranquilamente, por el hecho que sí, la llegaban a asustar o generaban alguna reacción negativa era probable que ella pueda desmallarse, así que todos decidieron que se presentarían de la manera más educada y tranquila posible.

Era lunes, con el sol apenas saliendo y con una Marinette en medio de un baño bastante relajante y entretenido, dado que se encontraba hablando con su mejor amiga, Tikki, de una forma muy animada.

Al cabo de unos minutos ella salió del baño y se propuso cambiarse, se vistió con una calza blanca que llegaba hasta las rodillas, una blusa con mangas hasta los codos con un pata de un gato en medio, llevaba sus dos tiernas coletas de siempre, y sus clásicos zapatitos. 

Bajó a desayunar y a encontrarse con sus padres, su madre le sirvió el desayuno. Una vez que terminó el desayuno se propuso a terminar de acomodar su mochila y partir a la escuela, en la cual la esperaba Alya bastante emocionada a simple vista.

Una vez que llegó a su nueva escuela, se encontró con Alya en la puerta, la cual la saludó bastante animada, aparte del gran alago que recibió de esta por su vestuario, diseñado por ella, ambas entraron juntas al salón y se encontraron con algunos de sus compañeros, entre ellos Adrien y Nino, Marinette los saludo alegre, y se después se dispuso a sentar en el lugar que le dijo Alya.

Ambos chicos miraron extrañados a Marinette, tanto por su forma de vestir, como su forma de saludar tan, tan amable, era la primera vez que la joven peli-azul no tartamudeaba frente al modelo, eso si los dejó extrañados pero lo ignoraron, luego de un tiempo entró la profesora, que al verla, le había preguntado si ya se encontraba del todo mejor, a lo cual ella le había respondido con un pequeño si.

Al terminar las tres clases que tuvieron, todos, a excepción de Chloe y Sabrina, después el resto había ido a recibir a Marinette.

--¿Por qué todos se nos acercan? --Preguntó en el oído de su amiga observando extrañada al ver un pequeño grupo de jóvenes acercarse hasta ellas.

--Quieren darte la bienvenida Mari --Respondió volteando a ver a sus compañeros acercarse a donde estaban ellas.

--Oh, entiendo Ali.

--Hola Marinette, al fin volviste --Saludó alegre una chica rubia, de iris celeste y un vestido rosa claro con mangas rosa pastel.

--Yo, creo que también, em, disculpa mi inoportuna pregunta pero, ¿Quién eres? -Preguntó viendo a la joven de pies a cabeza, pero con algo de pena.

Todos los presentes sólo se vieron entre si, nunca creyeron ver a la azabache preguntando el nombre de unos de sus compañeros mas viejos.

--Soy Rose, Rose Lavillant --Respondió mientras ponía su mano en frente de Marinette.

-Bueno yo creo que ya me conoces Rose --Tomando su mano con una pequeña sonrisa-- ¿Y ustedes son? --Señalando las personas que se encontraban atrás y al lado de Rose.

--Oh ellos son nuestros compañeros evidentemente, ella --Señaló a una chica de pelo negro y flequillo violeta-- Es Juleka Couffaine --La nombrada saludó desde la distancia, ella correspondió con una pequeña sonrisa-- Él --Dijo ahora señalando a un chico bajito de pelo marrón y de remera verde-- Es Max Kanté.

--Un gusto verte de nuevo Marinette.

--El gusto es mío Max --Respondió de manera ligera.

--Ella --Señaló esta vez a una chica de pelo rosa oscuro-- Es Alix Kubdel --Ella la saludó igual que la pelinegra-- Él --Apuntó con su mano a un chico alto de cabello rubio-- Se llama Lê Chiến Kim.

--Hola Nette --Saludó con una gran sonrisa el chico.

--Hola Kim --Correspondió con la misma actitud animada del contrario.

--Él --Dijo señalando a un chico mas alto que Kim con apariencia amenazante-- Es Iván Bruel --El chico de forma tímida levanto su mano saludándola, ella correspondió alegre-- Ella es Mylène Haprèle, el chico pelirrojo que esta ahí atrás, se llama Nathaniel Kurtzberg,  y el rubio que esta acá, se llama Adrien Agreste, y el chico a su lado es Nino Lahiffe --Terminó por presentar Rose con una sonrisa.

Entre todos los presentes comenzaron a charlar sobre temas triviales, hablaron sobre la amnesia de Marinette, lo cual les resulto extraño que no se sintiera mal o confundida, por el hecho que lo normal es sentirse aterrado y confundido al no poder recordar a su familia y amigos, era algo que debía ser duro, pero sin embargo, ella parecía tomarlo con calma.

Una de las ineficacias de vieja Marinette era que se preocupaba y estresaba mucho, pero esta Marinette no, parecía que nada podía abrumarla o molestarla, parecía tomarse el mundo con calma algo que les pareció bueno, pero aun así no quitaban las ganas de volver a ver a la antigua ella, la que era energética y se preocupaba por el estado de los demás, en cambio esta nueva versión suya era mas tranquila o al menos así lo aparentaba.


El olvido [Completa] [Corrigiendo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora