Un chico muy curioso.

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No paraba de mirarle. ¿Enserio me había ido con un chico que acababa de conocer?. Cruzamos la ciudad, eso sí, no fuimos por tramos transitados ya que tenía miedo de que hubiera otra estampida. Entramos en un edificio y cogimos el ascensor. Vi que nos dirigíamos al último piso, al piso 10. Cuando la puerta se abrió, una brisa con olor a flores me acarició la cara, cerré los ojos e inspiré. Olía realmente bien. Abrí los ojos y pude ver que me encontraba en una especie de jardín. Varios Rosales me rodeaban, así como unas bonitas enredaderas en flor, que subían por las paredes hasta formar un portal por el que poder entrar al jardín. Un poco más alante, a mi izquierda había un banco de madera que colgaba de una barra de madera cubierta por esas enredaderas, cual columpio.
Había varias mesas colocadas con un toque rústico, y gente sentada en ellas tomando café, batidos o algún refresco. Era un sitio de ensueño.
- Cierra la boca que te van a entrar moscas.- Rió Cam.
- Calla anda no estropees el momento. - Dije dándole un pequeño empujoncito en el hombro.
-¿Quieres sentarte o prefieres que sigamos de pie?
- No, no. Vamos a sentarnos. Este sitio es precioso.
Cameron se fue a hablar con el camarero y este nos dirigió a la mesa. Había un pequeño murito y sentí curiosidad. Me asomé y pude ver todo Madrid. Era increíble. Me senté frente a Cameron y le miré fijamente. Me sonrió y empezó a contarme lo que antes le había preguntado.
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POV. JAKE

- Jake, ¿No crees que sería mejor llamar a tu hermana?.-Preguntó Roberto.
- Ya es mayorcita cuando estén viniendo que llame. ¿Tú estás un poco raro con mi hermana?
Nos encontrábamos en mi garaje dándole cera y limpiando mi coche, y en todo el rato Roberto me había preguntado por Kate unas veinte veces.
- Encima que me preocupo por ella...
- Cállate y empieza a darle por el capó de alante yo empezaré por atrás.
- Yo no sé cómo Katherine...
- Tío, te quiero mucho pero he de decir que eres un pesado... ¿No estarás detrás de mi hermana?- Pregunté alzando una de mis cejas.
- Qu-que va Jake, si a mí tu hermana me cae genial, pe-pero nada más.
Jeje, le había pillado. Pues yo jamás es que me imaginara a Roberto detrás de alguien, y menos de mi her. Mmm...
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POV. Katherine
-Así que MAGCON es básicamente un grupo de chicos jóvenes que os subís al escenario y hacéis el bobo, mientras chicas adolescentes babean a vuestros pies, ¿No?
- De todos los "hater coments" que me han dicho ese es uno de los que más me han dolido, Kate.- Dice con una voz ridícula mientras mientras dramatiza la escena llevándose la mano al pecho.
No puedo evitar reírme, este chico, no tiene remedio y tampoco sentido de la vergüenza, jaja. Me alegro de haber venido con él, resulta ser un chico muy agradable, mayor de edad y con un gran sentido del humor. Además es muy fácil picarle, lo cual me recuerda mucho a Jake, porque reacciona igual.
- Pues si te digo la verdad, nunca te había visto.
-Gané reconocimiento gracias a una red social, llamada Vine.
- Andaa, ¿No es esa la red social en la que cuelgas vídeos con una duración de 6 segundos?
-Sii justo esa. Si la conoces, ¿como es que no has visto mis Vines?
-Supongo que tampoco he indagado mucho, sigo a Viners famosos que viven en mi localidad. Pero una cosa está clara, tú no eres de España ni por asomo. Te lo iba a decir antes, pero me interesaba el tema de MAGCON que, bueno, me lo tendrás que explicar otra vez porque no he entendido ni papa.
- Jaja, ¿tanto se nota? Será por el acento...-Dijo rascándose la nuca. Eso le hacía parecer más mono de lo que era.
- Bueno Cameron Dallas ha sido un placer conocerte, pero me tengo que ir, mis amigas estarán preocupadas.
- ¿Ya te vas?, Ohh... -Dijo con un tono apenado. - Bu-bueno, jeje, ha sido una gran aventura, encantado de conocerte Katherine Rodrígez.
-Gracias a ti por el batido, y... ¿No te importará que te quite ente magnífico sitio?, es genial para relajarse un poco.
- Cuando quieras jaja. - Dijo guiñándome un ojo. - Una cosa Katherine, voy a estar aquí la próxima semana y después regresaré a Los Ángeles. Me preguntaba... Me preguntaba si te apetecería quedar otro día.- Otra vez, tocándose la nuca, estaba nervioso jajaja, me encantaba verle así.
- Pues claro, el miércoles que viene, quedamos aquí. A las 18:30, no te retrases.
Empezé a andar hacia la salida. Una vez fuera, pensé en todo lo que había pasado y que tenía que contárselo a Ashley. Intenté alcanzar mi móvil que estaba al fondo de mi bolso cuando mi dedo rozó con una tela suave. Tiré un poco para ver qué era. MIERDA. Era la blusa que estaba mirando en la tienda. No sabía si ir a devolverla, o volver y pagarla, o... Búa, la cosa es que lo hice. En unos minutos me encontraba frente a las puertas de Magic. Al entrar me dirigí al mostrador, donde se encontraba la dependienta, que, para ser honestos, no es que tuviera cara de querer hacer amigos.
- Hola, disculpe. -Un hilo de voz salió de mi boca. -Hace un rato ha habido un problema con una panda de chicas que han entrado persiguiendo a un chico... El caso es que... Es que... El y yo hemos tenido que salir corriendo por nuestra propia seguridad...
- Y has aprovechado para robar.-Me interrumpió la señora de pelo a medio tintar.
-No, yo no he robado nada, solo me lo he llevado sin querer. Además...
-NO HAY MÁS QUE HABLAR. Quédese ahí. ¡Pedro!
Acto seguido el guardia de seguridad vino a marcha rápida donde yo me encontraba.
- Por favor escúcheme, no he tenido tiempo de dejarla, si hubiera robado de verdad hubiera vuelto...
- ¿Y te crees que me importa? ¡¡PEDRO!!
- Y-ya estoy aquí Señorita Gertrudis.
-Bien. Llama a la policía y diles que he pillado a una de las chicas que ha destrozado mi tienda y ha aprovechado para robar. - Dijo achinando sus ojos de forma amenazante. Menuda imbécil. Encima gruñona, amargada. Estoy segura que si la gente conociese a la dueña de esta tienda se arruinaría en cero coma. Pero ahora lo que me preocupaba era como salir de este problema. Pedro me llevó a una especie de cuartito a oscuras, me dijo que esperase ahí y cerró la puerta.
- ¡HEY!, ¡¡¡POR FAVOR ABRIR LA PUERTA!!!- Grité mientras aporreaba la puerta con todas mis fuerzas. Pero nada.-Al menos encender la luz.
Lágrimas tibias se deslizaron por mis mejillas y el horrible flash back de lo que ocurrió ese día, golpeó mi mente. No podía gritar, mis cuerdas se quedaron mudas al igual que el ambiente. Poco a poco mis ojos se fueron acostumbrando a la oscuridad, y pude distinguir varias cajas con papeles enrollados y varias cajas de herramientas. Probé a llamar a mi madre pero no había cobertura y me quedaba un 15% de batería. Me estaba empezando a desesperar hasta que la puerta de metal se abrió. La luz no pudo cegarme pues ya era de noche. Eso sí, pude distinguir la silueta del oficial que estaba delante de mí. - Chica, ¿estás bien?. Sal no tienes nada que temer.
Salí afuera y me encontré con la dueña de la tienda, ¿esposada?
El oficial volvió a dirigirse a mí, esta vez me pidió que explicara mi versión y le conté el buen rato que pasé con Cameron. Me dijo que si podía testificar ante lo que había pasado. Me pareció un poco raro puesto que era solo una camiseta, ahí ya fue cuando me enteré de que después de que yo me fuera con ese muchacho habían entrado a robar dinero de la caja. Por eso era sospechosa. Busqué mi teléfono para llamar a Cameron y me dí cuenta... ¡¡NO ME HABÍA DADO SU NÚMERO!! Soy muy lista, hice amago de seguir buscando mi teléfono, hasta que mi dedo volvió a rozar otra textura no muy usual en un bolso. Esta era papel, como un pañuelo. Y, efectivamente, era una servilleta del sitio donde habíamos estado. En ella pude leer: "Llámame 682228889". Una gran sensación de alivio recorrió mi cuerpo. Me había metido la servilleta en algún momento, este chico estaba lleno de sorpresas. Marqué el número y sonaron varios tonos, pensaba que no iba a descolgar, pero su voz sonó en el auricular:
- Hi! Who is it?
- ¿Cameron?, ¿Eres tú?
-¿Kate?
- Ohh gracias a Dios. ¿Te acuerdas de la camiseta de antes que me lleve sin querer antes? Pues he venido a devolverla y... Bueno a habido un "pequeño" problema.
- ¿Que ha pasado?
- Ahora no hay tiempo necesito que vengas a la tienda Magic en gran vía está enfrente del Corte Inglés. Justo enfrente, la verás enseguida. Ahora nos vemos ven rápido por favor.
- Cuenta con ello, espero que estés bien.
Una sonrisa se extendió por mis labios. Le dije al oficial que el testigo llegaría enseguida. Algo en mi interior me hacía cosquillitas, como cuando te van a dar el resultado de un examen pero en este caso es que tenía unas ganas enormes de ver a Cameron Dallas.
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POV. CAMERON
Recorrí varias calles y pregunté a varias personas. Ya me encontraba enfrente del Corte Inglés, me giré y pude ver la tienda que me decía Kate. Crucé la calle y entre a la tienda. Vi a una señora esposada y enfrente a Kate sentada en una silla cabizbaja, le puse mi mano en el hombro. Ella levantó su cabeza y vi cómo su cara se iluminaba.
- Cameron. Ohh gracias a dios que has venido.
Me abrazó. Un cosquilleo recorrió mi cuerpo. Debía estar bastante preocupada.
-¿Que ha pasado, Katherine?
- Me han acusado de un robo. Piensan que he robado de la caja y he cojido ropa. Le he contado mi versión al oficial pero necesito que testifiques...
- ¿Para qué vas a testificar si sabes que la chica es culpable?, seguro que estáis compinchados. - Dijo la señora con saña.
- Señora no desvaríe, yo no he robado nada y si lo he hecho no ha sido aposta.
- ¿Que pasa aquí?- Preguntó el oficial evitando una posible pelea.
- Que esta chica de aquí es culpable y no quiere admitirlo.
Yo no sabía qué decir, estaba perplejo ante esta situación. Malentendido.
- A ver Señorita Gertrudis vamos a arreglar esto como debe ser dejemos que este chi...¿Cameron Dallas?
- ¿John?
-¿Os conocéis?
- Claro que si Kate, este policía  de aquí estuvo el otro día haciendo guarda en las puertas del show de MAGCON. Me pidió un autógrafo para su hija y nos hicimos amigos.
Era increíble, menuda "casualidad". Conté mi versión ante John que coincidía perfectamente con la Katherine. Y por si fuera poco vimos los vídeos de la cámara de seguridad y pudimos ver que los ladrones eran 4 y por su aspecto parecían varones.
- Esta bastante claro que eres inocente.- Dijo John.
-¡Pero eso no puede ser!, ¡Ella es una ladrona!- Volvió a interrumpir Gertrudis.
- Señora, las pruebas están claras. Las cámaras de la tienda muestran claramente que son inocentes. Y muestran a los verdaderos ladrones. Le prometo que haremos lo posible por llevarlos ante la justicia. Pero usted no tiene derecho a encerrar a una persona en contra de su voluntad, espero que sepa que eso puede llegar a ser un delito. 

¿Pero y esta señora de dónde ha salido?

-Cameron, Katherine podéis iros. Es inocente.

Dimos las gracias John y salimos de esta tienda miré a Katherine y me dedicó una bonita y dulce sonrisa, la cual le devolví encantado.
- Bueno Katherine, ¿Te invito a cenar o te llevo a casa?
-Ambas opciones son tentadoras jajaja, pero creo que debería irme ya a casa. Por cierto Cam.
-Dime.
- Llámame Kate.
No pude evitar sonreír y bajamos juntos por Gran Vía disfrutando de un Madrid nocturno.
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Holaaa a todooos, esta parte es mucho más larga que las demás, creo que está bastante bien. Lo he tenido que volver a escribir porque se me borró entero. Espero que os haya gustado. Ya estoy escribiendo el próximo capítulo. Si tenéis alguna idea de lo que puede pasar o algo o simplemente comentáis vuestra opinión me haríais muy feliz. No os olvidéis de votar si os ha gustado. ¡¡¡¡No vemos en la próxima lectura!!!!

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⏰ Última actualización: Oct 08, 2016 ⏰

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