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La melodía de un violín me obliga a abrir los ojos. La descuidada habitación esta iluminada por los rayos nacientes del amanecer. Una ráfaga fría de viento que entra por la ventana rota me golpea al levantarme de la cama, así que vuelvo a enroscarse debajo de mi manta. Asomo la cabeza para revisar a Yoongi, pero él no está en el cuarto. Es posible que se haya ido ya al ático, así que hago un esfuerzo para levantarme, a pesar de tener mis extremidades heladas.
Salgo de la cama y miro sin razón a mi alrededor para asegurarme de que no hay nadie más en la habitación. Y entonces, echo un vistazo a la cama de Jin, cautelosamente, como si temiera que alguien me atrapara haciéndolo. Me paro frente a ella, sin saber que estoy esperando.
El sol se levanta y se vuelve a esconder para que la luna se deje ver, pero ya no siento el tiempo pasar desde que Jin no volvió a entrar por la puerta. Sé que Yoongi está atormentado, pero me pregunto que estará sucediendo en la cabeza de los demás. Quién lo ha aceptado y quién sigue negándolo.
En mi caso, camino un paso a la vez, trato de mantener la cabeza en su sitio.
Me pongo mis jeans más viejos (solo tengo dos) y también, como no tenía planeado salir del edificio, el feo suéter verde de algodón que Hoseok compró de todo corazón para mi hace dos semanas.
La triste historia detrás de este suéter no fue más que una simple desdicha para mí: Nam Joon, como siempre, se encargó de organizar el presupuesto para comprar cosas que necesitaríamos para el invierno y se suponía que Jin compraría todo, ya que nadie más tenía tiempo libre esa semana debido al trabajo, pero en el último minuto él estuvo ocupado, así que Jimin y Hoseok se encargaron de las compras. Y no había nada malo al respecto, hasta que recordé que la última vez que todos necesitábamos un corte de pelo, yo me encargué de darle a Jimin un nuevo estilo, que al final no le gustó tanto como yo esperaba. Es importante mencionar que, si Jin no hubiera intercedido, yo aún tendría moretones en la cara. Así que Jimin se encargó de cobrármela en esa ocasión.
Era obvio que de todas las cosas que trajeron, Yoongi se quedaría con lo mejor, una chaqueta un poco vieja de imitación de cuero que lo hacía parecer más rudo de lo que era, mientras a mí, un Hoseok satisfecho de sí mismo me entregaba un horrible suéter verde que tenía un gatito, demasiado tierno para mi edad. Dijo que Jimin lo alentó a comprarlo, ya que al parecer, recientemente, yo había desarrollado un gusto por los gatos que no había comunicado. Y, como una de las cosas que la vida me ha enseñado es a no despreciar algo que te cubrirá del frio, no tuve más opción que no objetar, además tenía que pagar por mi pecado... ¡Pero como demonios iba a conseguir chicas con un suéter así!
Para hacerme sentir mejor, Taehyung se quedó con el par de calcetines color fucsia, aunque a él le iba más el suéter. Y Jin me animó diciendo que él se encargaría de comprarme algo varonil la próxima vez, pero... supongo que, por alguna razón, la vida me a condeno a este suéter, ya que no abra una próxima vez.
Salgo de mi habitación para darle la cara al frio clima de esta mañana. Paso frente a la puerta de Rix, un hombre de mediana edad que se mudó hace siete meses, fue abandonado por su esposa, y ahora es dueño del violín que escucho todas las mañanas al llegar del trabajo. Trabaja tocándolo en las calles del centro de la ciudad cuando no se está emborrachando en su habitación.
No creo que alguien le haya contado sobre Jin aún. Pero, por algún motivo, ahora lo único que puede escuchar son los acordes de un violín lamentándose.
Subo dos pisos hasta llegar al ático. Es la única habitación que se construyó en el cuarto piso, tal vez se planea hacer otra, ya que aún hay muchos ladrillos tirados por ahí, además de las calderas y el transformador eléctrico, pero nunca sucedió. Es notablemente más grande que las otras dos habitaciones que tenemos en el segundo y primer piso, por eso decidimos que fuera la primera que tendría electricidad y agua. Además de que es la única que tiene gas natural para nuestra pequeña estufa.
