Después de media hora, ella comenzó a moverse y después de unos minutos abrió los ojos. Al principio se veía confundida pero después reaccionó y se sentó de golpe asiendo que le doliera la herida. La volví a recostar y la tranquilicé.
¿Donde está Zehp?
Esta con Paola en mi habitación – le dije para darle los medicamentos que había dejado la doctora.
Gracias – dijo después de habérselo tomado.
La doctora entro para decirle a Yes que el día de mañana tenía que reposar para que la herida cicatrizara. Como supuse ella se negó y yo le aseguré a la doctora que descansaría. La lleve a su habitación en mis brazos, la deposité en la cama.
Vendré en un momento me aseguraré de que estén bien, ellos dormirán en mi habitación, por esta noche.
Ella asintió dándome a entender que estaba cansada. Salí de su habitación y me dirigí a la mía, al abrirla encontré a Paola durmiendo en mi cama con Zehp en brazos le di un beso a cada uno de buenas noches y me dirigí a donde Yes. Al llegar a su habitación, pensé en acostarme con ella, pero reaccioné y me acosté en el suelo.
Me despoje de la ropa, quedándome solo en bóxer. Cuando me iba a acostar su voz me detuvo.
Acuéstate conmigo –dijo y pensé que lo había imaginado, porque pareció un susurro creado por mi mente, pero ella se movió dejándome espacio para yo acostarme.
Me acosté y la atraje hacia mí, para rodearla la cintura, después de un rato dándole la vuelta a todo lo que había acontecido. Terminé cayendo al fin en un profundo sueño.
Pov's Yessica
Desperté cuando las luces entraban por mi ventana, recordé todo lo que había acontecido el día anterior y me sorprendí al recordar que yo le había pedido a Royers que se acostara conmigo.
Le di la vuelta con la mirada a mi habitación, dándome cuenta que estaba sola. Me decepcioné porque algo en mí quería despertar junto a él.
Me levante y caminé hacia el baño, vi mi reflejo en el espejo, estaba toda despeinada, me hice un moño, me despojé de mi ropa y entré a la ducha para relajarme. Salí del baño con una toalla en el cuerpo. Camine a mi tocador me coloqué la ropa interior, dejando caer la toalla.
En ese momento, me di la vuelta encontrando a Royers sentado en mi cama con una sonrisa de oreja a oreja.
Sigue, estoy disfrutando –me dijo, haciendo que sintiera un rubor en mis mejillas.
Disfrutando de las vistas –le dije para continuar vistiéndome-.
La verdad, si y mucho –me dijo.
Me alegro porque en la piscina usaré bikini –le dije para ver como su rostro cambiaba a uno lleno de ira.
No estarás así, delante de los muchachos –dijo con voz enojada y decidí provocarle.
Y quien me lo va a prohibir, tú.
Sí –en ese momento se acercó y me acorraló contra la pared.
Eres mía y nadie se mete con lo mío –dijo y comenzó a acercarse.
Te olvidas que te puedo dejar sin descendencia, así como estas ahora –dije señalando a su entrepierna que estaba desprotegida.
Pero si no lo has hecho, es porque también quieres esto –iba a preguntar que era cuando sentí sus labios arriba de los míos, al instante me congelé, ya que nadie se hubiese atrevido a hacerlo, pero después le seguí, después nos separamos por falta de oxígeno.
Te lo dije, eres mía –dijo con una sonrisa, lo miré, y decidí que le podía dar una oportunidad.
Entonces tu eres mío, y pobre de la mujer que se te acerque –dije y el soltó una carcajada.
No llevamos ni dos minutos y ya me amenazas –dijo con una sonrisa egocéntrica.
Solo aviso, vamos hoy dejare a Paola con Zehp en el apartamento y quiero que me acompañes para que veas donde estará.
Bien, déjame ir a buscarlos y nos vamos –dijo y salió por la puerta. Minutos después entro con Zehp en brazos y Paola detrás de él. Me acerqué y tome a Zehp en mis brazos y le hablé como si el me entendiera.
Zehp escucha, tú vivirás con la tía Paola, pero vendré a visitarte todos los días, quiero que te comportes bien. –dije y le di un beso en la mejilla. Salimos y nos dirigimos a la puerta donde le colocaron el rastreador a Royers. Al salir nos dirigimos al auto, le tire las llaves, el las atrapo en el aire.
Conduce tú –le dije mirándolo.
Entró en el asiento del piloto y encendió el motor, dejando ver la emoción que tenía.
Hace mucho que no conduzco –lo dijo con mucha emoción.
Arrancó y le di la dirección del apartamento, al cabo de 10 minutos aparcó en el estacionamiento, subimos a mi piso y entramos.
Paola, ayer dejé dinero, para que compres ropa, la nevera siempre tendrá comida y piensa que es tu casa.
Me senté en el sillón en forma de L, después de poner a Zehp en su cuna, Royers se sentó atrayéndome hasta que quedé sentada en sus piernas, me levantó la blusa para inspeccionar la herida.
¿No te duele? –me pregunto.
No, ya para mañana estaré como nueva –dije y lo besé en los labios, hasta que un carraspeo nos hizo separarnos. AL girar nuestros rostros nos encontramos a su hermana.
No, que no eran nada –dijo con una sonrisa en el rostro.
Sobre eso –dije bajando la cabeza- estamos juntos, pero desde esta mañana –dije y oculte mi rostro en el cuello de Royers haciendo que él se riera.
Nena, me haces cosquilla –dijo Royers riéndose.
Si es así, estoy muy feliz por ustedes –dijo ella y sonreí. Pasamos el día completo y ya cuando estaba anocheciendo nos despedimos y regresamos al reformatorio.
Royers se dirigió a su habitación para buscar ropa, mientras aproveché y entré a la ducha, cerré mis ojos, disfrutando de la sensación de las gotas al caer a mi cuerpo. Cuando sentí como me abrazaban por detrás, abrí mis ojos encontrando a Royers sonriendo.
Así ahorramos agua –dijo y yo reí por la excusa barata que puso.
Seguro –dije y me di la vuelta agarre mi jabón y comencé a pasarlo por todo mi cuerpo, cuando terminé se lo pase a él.
Mientras, me entraba bajo la ducha para sacar todo rastro de jabón, cuando acabé, Salí tomando una toalla, entre al cuarto y me vestí con unos pantalones cortos y una franela, me acosté y Royers salió con solo un bóxer puesto. Se acostó a mi lado y me abrazó.
Descansa nena –dijo depositando un beso en mi cabello.
Descansa guapo –dije y me rendí a los brazos de Royers.
A la mañana siguiente nos arreglamos y salimos para el gimnasio, cuando llegamos todos estaban entrenando.
Chicos préstenme atención –dije y al momento todos pararon -Ya la primera pelea será en una semana, hoy harán pareja con alguien y pelearan, para ver si han mejorado.
Entrenaron duro toda la semana hasta que el día de la pelea llegó.
Bueno, hoy pelearemos contra un reformatorio, les deseo mucha suerte y que pongan en práctica lo aprendido.
Como pensé ganamos todas las peleas, felicite a los muchachos por eso.
Los quiero mañana a la entrada del gimnasio con sus bañadores cada uno puede llevar a una persona.
Me despedí, y me fui a descansar, le dije a Royers que durmiera en su habitación para que no vea el bikini que usaría.

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Dices Conocerme
RomanceYes es una joven que es despreciada por sus padres y decide independizarse a la edad de 16 años, busca una forma de ganar dinero haciendo lo que le gusta, ella no cree en el amor, su único pariente que la ayuda es su tío Tom que es guardia de segu...