capitulo 7

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Al despertar me arreglé con mi bikini que consistía en dos partes de color azul claro, me coloqué un pantalón corto y una sudadera para que no se notara.

Llegué a la entrada del gimnasio y todos estaban ahí.

Vamos a ver, para que no halla nadie colado, cada uno levante la mano de su acompañante. Al decir eso una muchacha se quedó sola, me acerqué a ella.

Quien te invitó -le pregunté.

Royers -dijo con voz de egocentrista.

Con que él, ¿quién eres tú?

Soy Perla, la novia de Royers.

Oh, mira que bien, a este juego pueden jugar dos.

Entre al gimnasio con los demás siguiéndome, abrí la puerta que daba a la piscina y vi que Tom había hecho lo que le pedí.

Disfruten vengo en un momento -dije y salí de ahí, aun no había visto a Royers, pero pobre del sí lo veo.

Me dirigí al cuarto de Reiny, él era de los más mujeriegos de este lugar. Toque la puerta y segundos después me abrió, asombrado a que yo esté en su puerta.

Coge un bañador y acompáñame -le dije furiosa. Hizo lo que le pedí y caminamos al gimnasio. Tienes que fingir que coqueteas conmigo por un rato. A cambio te dejare bañarte en la piscina.

A una preciosura como tú, no hay problema -me dijo con una cara muy sonriente. Antes de entrar, me despoje de la ropa quedándome en bikini.

Acaso quieres que te violen -dijo mirándome embobado.

Por algo se defenderme -entramos y él me tenía agarrada de la cintura. - La música retumbaba el lugar y la mesa de comida estaba repleta.

Le di una rápida mirada a todo el lugar, encontrándome con Royers observándome con la ira reflejada en todo su rostro.

Vamos a bailar -le dije tomando de la mano a Reiny. Comenzamos a bailar y sentía a Reiny pegándose a mi cuerpo, hasta que no lo sentí más, me di la vuelta encontrándome a Royers, agarrando del cuello a Reiny.

Suéltalo -le dije a él, Royers me miro.

Como ordenes -dijo y lo tiró a la piscina.

Serás idiota -le grite, Me di la vuelta para salir de ahí, pero él me rodeó por la cintura con sus brazos.

Déjame

No - respondió - ¿Por qué estabas con él?

Lo invite, así como tú invitaste a tu amiguita.

Estas celosa -dijo sonriendo.

No, pregúntaselo a ella, que dijo que es tu novia

Que - dijo- espera. Me tomo del brazo y llegamos a donde se encontraba la tipa.

Perla -dijo él con una voz que intimidaba a cualquiera.

Si corazón -dijo ella mirándolo seductoramente.

Le podrías decir a Yes que lo que dijiste es mentira -dijo el mirándola a ella con repulsión.

A mí me enseñaron a no hablar mentiras -dijo ella.

Mira idiota, te callas la boca y te alejas de mi hombre o saldrás mal parada -le dije ya cansada de sus estupideces.

-Y tú -dije señalando a Royers- ¿Por qué rayos la invitaste?

Dijiste que podríamos invitar a alguien.

Olvida, me ira a dar un chapuzón -me tire a la piscina. Momentos después sentí a Royers detrás de mí.

Perdóname nena -dijo.

Me di la vuelta y lo hundí. -Ya te perdoné -dije riendo.

Me las pagaras -dijo, yo comencé a nadar para alejarme. Sentí que me tomaban del tobillo y me hundían, intentaba subir, porque me quedaba sin aire. Royers me agarro de las mejillas y me pasó aire por los labios, duramos unos segundos así y después subimos. Cuando lo hicimos, todos los muchachos, silbaron.

Eso Royers - todos gritaron y al decir eso se tiraron al agua, haciendo que riéramos todos. Al final de la tarde, salimos y nos despedimos. Me fui a mi habitación, me cambié y me acosté después de un rato, Royers entró y me agarró de la cintura quedando abrazados.

Dices ConocermeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora