Aitor
Todo era muy oscuro en aquella habitación, por alguna extraña razón se podría observar una gran y hermosa luna, de repente ya no estaba en esa habitación estaba en un gran campo, estaba anocheciendo y estaba nublado, lo que más me gustaba era sentir el aire en mi rostro, días como esos me fascinaban, seguí caminando, más adelante, me encontré con un gran árbol y en él, estaba sentado un chico que miraba a la nada, se me hizo muy familiar, era él.
En ese momento todo se volvió borroso, fue como si todo se esfumara, intenté gritar, pero algo cubría mi boca.
—¿Dónde estoy? —susurré
—Estás en hospital —dijo una enfermera
—¿Qué hago aquí? — dije un poco alterado
—Tuviste un accidente, te atropellaron, ¿recuerdas algo? —
—No, sólo sé que me duele mucho la cabeza —y no mentía
Una señora vino a mí con lágrimas en los ojos, no la reconocí, ella me dijo que pensaba que podría morir.
—Me alegra que hayas despertado hijo —dijo llorando
—¿Hijo? —pregunté un poco confundido. En ese momento su cara hizo una expresión de confusión
—Ammmm, señora me está incomodando —le dije
La enfermera le dijo algo que no pude comprender, y ambas salieron de la gélida habitación, me dispuse a recostarme, la verdad desde que desperté todo es muy raro, esa mujer diciendo que soy su hijo, y yo en el hospital, vaya que esto es una locura.
El sueño me empezaba a ganar, veía negro, mis ojos se cerraban cada vez un poco más...
****
Me vi como salía de una casa, me veía demasiado triste, más de lo acostumbrado, vi como caminaba y pasando las calles, como si nada más importará, de repente vi como mi otro yo volteaba de repente, y ya me percate porque un coche a una velocidad bastante rápida, le empezó a tocar el claxon de pronto, todo fue muy rápido, él había salido volando desde donde estaba parado, estaba como atónito, y de pronto se escuchó un fuerte golpe contra el pavimento, la sangre le empezaba a salir de la nuca, la gente conmocionada y uno que otro curioso, se acercaron al lugar del accidente, vi como el conductor no era un poco mayor de 20 años, se echó a correr, logro su objetivo, se escabulló, me acerque un poco más y vi como estaba yo un poco más pálido en la acera, a lo lejos se escuchó el sonido de una sirena, y de ella bajaron unos paramédicos, uno de ellos pregunto que si habían visto como sido el accidente, entre los otros paramédicos, me subieron a un tipo de camilla hacía la ambulancia, de repente ya estaba en ella, conduciendo al Hospital GEA González de Tlalpan, entre ellos decían paciente masculino de aproximadamente 15 o 16 años, presenta fuerte contusión en la cabeza, necesitará una transfusión de sangre, al llegar al hospital me bajaron y preguntaron si tenía alguna identificación, entre mis cosas tenía mi credencial de la escuela...
De repente me desperté algo asustado y confundido por todo lo ocurrido, ¿eso es posible haber visto todo eso?, bueno había escuchado que las personas inconscientes escuchan todo, pero esto sí fue muy raro.
Ha pasado demasiado tiempo desde que desperté, no lo sé unas 5 o 6 horas, ya perdí la cuenta, juego con el control de la cama.
Mejor me decido a encender el televisor, en MTV pasan una canción muy peculiar, se me hace conocida, y de un momento empiezo a tararear.
Kiss me hard before you go
Summertime sadness
I just wanted you to know
That baby you're the best
I got my red dress on tonight
Dancing in the dark in the pale moonlight
Got my hair up real big beauty queen style
High heels off, I'm feeling alive
Y digo casi como un susurro Summertime sadness, ya había casi olvidado que cantaba esa canción en las tardes mientras leía o hacía cualquier cosa, tal vez después de todo el destino hace lo mejor para nosotros, lo que él creé que es adecuado, me viene a a la mente ese chico, he tratado de recordar su nombre pero por alguna extraña razón no puedo recordar, ha caído la noche, y mi cuerpo pide reposo, entre el sueño y mis pensamientos...dije.
—Izair —susurre casi como un soplido.
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True Love (Gay)
Romance- ¿Y ahora que harás, has experimentado muchas cosas últimamente?- me dijo con curiosidad. - Realmente no sé cómo asimilar todo esto, fue tan rápido, tal vez sólo hizo lo que para él fue lo más correcto. - ¿Y aun así no fue suficiente?- me dijo in...