Sweet Patissiere

Day sweet

Por fin era hora.

Dipper recibió una llamada temprano en la mañana era su director, informándole que podía continuar en la escuela.

Al parecer alguien había hablado muy bien de él y mientras mantuviera su promedio nadie volvería a cuestionar sus faltas.

-Muchas gracias señor!-

Aunque sabía que en realidad tenía que agradecer a otra persona, a su gran amigo Bill, y encima de todo ahora voy a salir con él...

El pensamiento lo ponía nervioso, ¿qué tipo de cita tendría alguien como Bill planeado para él?

El solo era un pastelero con muy poca o ninguna vida social, no estaba seguro de que tan buen papel podría hacer.

Y luego estaba el asunto de que le gustara a Bill, él no sabía que hacer al respecto, Bill parecía muy serio al respecto y probablemente veía esto como una cita.

Y Dipper no podía evitar verla como una salida de amigos.

Esperaba no hacerle sentir mal, después de todo era su gran salvador.

Bill llego por el justo a tiempo, en un bellísimo deportivo azul, que parecía mucho más elegante y atrevido que el coche rojo que usualmente llevaba.

El tío Stan (que se encontraba arreglando algunos muebles de la pastelería), vio a Bill con recelo, y Bill solo le devolvió una mirada de autosuficiencia por encima de sus lentes de sol.

Dipper subió torpemente al coche y se ajustó el cinturón.

-Bienvenido Dipper!-

-Despídete de tus problemas y preocupaciones, vas a salir conmigo y eso significa gran diversión!-

Dijo Bill casi gritando para que el tío Stan pudiera escucharlo.

-Vamos allá-

Dijo un muy emocionado Dipper.

-Que coche tan lindo Bill, pero que le sucedió al otro coche?-

-¿a qué te refieres?-

-Al otro coche, al rojo-

-Oh creí que no era apropiado para esta cita, y decidí traerme este mejor-

-Pero no son ambos coches nuevos?, no es muy caro tener dos coches cada año?-

-No seas bobito dip, no tengo dos coches nuevos, tengo 10-

Dipper olvido sus buenos modales y dio un gritito-

-¿Qué?-

Parecía que Bill estaba en un mundo completamente diferente, Dipper no podía concebir esa cantidad de dinero, él ni siquiera podría pagarse un coche usado, mucho menos uno del año, ahora estaba seguro, esta cita seria grandiosa!-

Esta cita no estaba siendo para nada grandiosa...

Dipper estaba completamente aburrido, él y Bill estaban en los asientos delanteros del teatro , el más grande y elegante teatro de la ciudad, escuchando una ópera, Bill se veía muy entretenido, pero Dipper no alcanzaba a disfrutar la obra.

Todos cantaban acerca de una historia muy extraña, y el comenzaba a bostezar...

No quería ofender a Bill así que Dipper forzaba una sonrisa cada vez que Bill volteaba a verlo o a comentarle algo...

-Ese es el gran actor russiakin Volkivich, regresa de una gira de varios meses en teatros de Italia-

Y Dipper fingió una sonrisa.