"No podrá tener corazón, pero si alma".
Después de llegar a la cabaña me quité la mochila dejándola a un lado y el fue en busca de una manta para luego cubrirme con ella. Cuando ya me había cubierto se alejó y se quedó mirando por una ventana. El sueño no se esmeró en aparecer y me quedé dormida por unos minutos.
Ya despierta miré de reojo hacia el vampiro y este seguía en la ventana pero giró su vista hacia mí. No sé por qué razón cerré mis ojos rápidamente y fingí seguir dormida como cuando era pequeña y papá me acostaba en la recamara. Me seguía mirando y ya no sabía que hacer así que paré de fingir e hice que "desperté". Noté que se puso nervioso pero no desvió su mirada.
— Hola... —Dije tímida. Esperé por unos segundos alguna respuesta pero nada. La habitación estaba en completo silencio. — Oye, ¿Por qué no me hiciste daño? ¿Por qué me cuidaste desde un principio? —Dije yendo al grano. Pude notar como sus músculos se tensaban y se ponía nervioso. Nuevamente no hubo respuesta. — Si no me vas a responder por lo menos dime tu nombre. — Me llamo Ian —sonrió. Su voz era ronca pero a la vez melodiosa. — ¿Y tú? — Kate Smith —Le devolví la sonrisa. — Y gracias. — ¿Gracias por qué? —Dijo confundido. — Gracias por haberme protegido. —Él solo sonrió aún más.
« Dios mío, su sonrisa... »
Nos quedamos sonriéndonos y mirándonos. Él acercó su mano, tomó la mía levantándome y me guió hasta la cocina. Mi cuerpo estaba un poco débil y me sentía mareada. Allí me soltó de la mano y fue a buscar algo.
— Supongo que estás un poco mal, toma — Puso en mi mano una píldora anti-inflamatoria. Fue en busca de un vaso y me lo pasó con agua. — Tómalo, te hará sentir mejor por unas horas —Dijo apoyándose en la pared. Yo tomé la pastilla y la tragué junto al agua. — Muchas gracias, Ian —relamí mis labios húmedos. Vi que este fijó su mirada en ellos y relamió los de él de una manera provocadora. Me sentí un poco incómoda.
Dejé el vaso en el lavabo y de nuevo el silencio impregnaba el ambiente. Un sonido se empezó a escuchar a lo lejos. Ian estaba atento hasta que escuchó un gemido de dolor proveniente de la zona sur.
— Tengo que ir para allá, quédate aquí —Dijo serio. — ¿Qué? No me puedo quedar aquí —Reproché. — Es arriesgado que salgas en estos instantes. — ¿Por qué me proteges tanto? — Porque... —Bajó la mirada. Los gemidos de dolor se escucharon nuevamente. — Tengo que ir, lo siento —Se acercó a mí y depositó un beso en mi mejilla. Sus labios eran fríos y húmedos. Pasó por mi mejilla su dedo pulgar, acariciándola. Mi cuerpo recibió una pequeña descarga eléctrica haciéndome sentir miles de emociones. — Adiós... —Dijo y este salió de la casa, quedando yo allí, sola.
Comencé a recorrer la casa. Era pequeña y un poco tradicional, pero linda. No estaba del todo arreglada, ni aún menos era una cabaña con lujos. Era antigua y un poco dejada. Había en ella una habitación, un baño, la pequeña cocina y el living. En el living había una pequeña estantería con libros, me acerqué a ella y saqué uno. Limpié el polvo que tenía en su portada y leí " Ángeles y Vampiros, el Apocalipsis". ¿De qué se trataría? La curiosidad como siempre, es dominante y abrí el libro. Allí comencé a leer:
"Ángeles y Vampiros (Un apocalipsis). La historia prohibida."
Cuenta la historia que los Ángeles se encargaban de cuidar a la especie humana, ya que eran su única misión hasta que llego una criatura extraña. Diferente. Su apariencia era pálida, con ojos rojos, no tenia pulso, era un muerto en vida con poderes extremadamente sobrenaturales. Los ángeles siguieron a la criatura para encontrarse con que, mataban a los humanos para saciar su sed, ellos al tratar de impedirlo murieron. Desde ahí los ángeles y vampiros estuvieron en guerra y las tierras fueron divididas en "La Pitoria" y "La Adruana". En esos tiempos, la Gobernadora Lissa junto a sus dos hijos, Patrick y William Bostick, cuidan de los vampiros y eliminan a los Ángeles. Luego de un tiempo Lissa y William fueron encontrados muertos. Esto enfureció más a los vampiros y ellos buscan venganza. Adela y Cedric teniendo el puesto de Gobernadores de "La Adruana" mantienen reglas y límites entre ambas razas para mantenerlas a salvo de cualquier ataque o embestida. Ahora en la familia Bostick solo queda Patrick, quién supera los 150 años y se caracteriza por ser alguien muy prepotente. Él no quiere paz, él quiere exterminar. ¿A quiénes? A los Ángeles.
Terminé de leer esa hoja y pasé a la siguiente. En ella había una foto de la familia Bostick. Lissa era una mujer muy linda. Rubia de ojos amarillos, pálida. Labios rosa y sonrisa amplia, sus hijos eran igual a ella. En la otra plana estaba la familia Wapenhans. Pero aquí había algo extraño, Adela era muy joven y tenía a una pequeña en sus brazos. Al lado de ella estaba Cedric. Confundida pasé la hoja y leí:
“Los Ángeles”
Criaturas puras que son encargadas de proteger a los humanos, generalmente según algunas religiones se encuentran en el cielo y los envían en caso de emergencia. Pero en otras definiciones a estas criaturas dicen que protegen a la raza humana de los vampiros, ya que ellos están en contra de quitarles el alma, pero que no le sirven a un Dios si no a realeza de ello.
En la realeza de los ángeles se encuentran los Gobernadores Adela y Cedric Wapenhans, encargados de cuidar a la especie y mantenerla en buenos estados. Estos no tienen hijas. Se cuenta por ahí que Adela si tuvo una hija, pero se le fue quitada por no haber tenido la edad suficiente como para cuidarla. Hay fuentes y fotos que confirman el dato.
Pasé la plana y seguí:
"Los Vampiros"
"Los vampiros son unas criaturas malignas que se alimentan de la sangre de seres vivos para mantenerse con vida. Siempre han estado en guerra con los ángeles por encontrar cual de las dos criaturas es más poderosa.
Sus características son: ojos rojos o amarillos, piel pálida y fría, fuerza sobre humana, velocidad, inmortalidad, entre otros.
¿Cómo matarlos? Las únicas formas de matar a esa criatura es quitarle todas sus partes del cuerpo y quemadlos o con plata. Si no es quemado totalmente puede renacer. Una de las formas de alejar a estas criaturas es con ajo, es muy importante saber que los vampiros solo pueden ser destruidos entre ellos mismos o por los ángeles. "
Estaba sorprendida. Este libro decía muchas cosas que yo no sabía o que, a lo mejor olvidé en su momento. Con cuidado dejé el libro en el lugar que permanecía anteriormente y vi la hora en mi reloj. Eran las 12:37 p.m. Luke debe estar despierto y buscándome por la ciudad o... por aquí, en el bosque.
Tomé mi mochila y me la puse, abroché mi casaca y me dispuse a salir de la casa camino a La Adruana. Cuando ya estaba afuera antes de empezar el trayecto miré cautelosa mente a mí alrededor por si había alguien más que yo en este sector. Pero no, no había nadie más. Eso me favorecía.
Saqué mi brújula y seguí el camino hasta llegar al límite. Demoré 30 minutos hasta llegar a un pequeño refugio que nos tenía el Gobernador. Casi nunca ocupado. Me sorprendí al ver a alguien allí, podía escucharlo. Entré y lo vi. Era él, justo cuando más lo necesitaba, en realidad, justo cuando él necesitaba de mí.
¿Qué les pareció el capítulo? Si les gusta "Me tientas al peligro" buscanos en Facebook: https://www.facebook.com/metientasalpeligro
ESTÁS LEYENDO
Me tientas al peligro.
VampireSinopsis. Kate Smith es una chica/ángel que está cayendo en las manos de un vampiro. Éste, llamado Ian, no quiere hacerle daño alguno, sólo quiere estar con ella y protegerla. Lamentablemente para ambos, hay muchos obstáculos que le impedirán estar...