Capitulo 1 - Pandístico

260 23 19
                                    

Mi vida... ¿Que puedo contar de mi vida? Pues no mucho, la verdad. Y probablemente, tampoco os interese demasiado. Pero se que tengo que hacerlo. Por algo estoy escribiendo aquí. Así que... Tendré que comenzar, supongo.

Yo... soy una chica normal. No tengo nada en especial. Tengo una personalidad... introvertida y reservada, de modo que no suelo hablar con mucha gente. No es por que sea tímida ni nada. Simplemente, no lo veo necesario la mayoría de las veces. No tengo mucha gente en mi vida con la que quiera hablar y pasar el rato.

Tengo algunas amigas pero, para ser sinceros, no tengo un lazo especial con ninguna. No hay nadie a la que le llame "mejor amiga". No hay ninguna con la que me haya abierto, ni contado nada sobre mis sentimientos. Y los mismo me pasa con mis amigos.

¿Y la familia? Bueno, también normal. Están mi padre y mi madre. No tengo hermanos, así que soy hija única. No tengo ni tíos, ni tías, ni sobrinos, ni sobrinas. La única familia que tengo es a ellos dos. Pero estoy bastante bien con ellos.

Pero... ¿Seguro que no es esto lo que os interesa, verdad?

Entonces os contaré como conocí a la chica panda, ya que fue... De una manera un poco peculiar.

Acababa de llegar del instituto. Estaba bastante cansada, tanto física como mentalmente. Al llegar la casa, fuí a la cocina y me hice algo para comer, ya que mis padres no estarían para la hora de comer en casa, y yo, sin tomar algo, no me iba a quedar.

Me hice unos espaguetis, y también la carne picada que me dejaron mis padres. Si, lo se, mucho cocinar no es, pero al menos lo admitó.
Metí la comida en el microondas, y esperé hasta que sonó el indicador de que ya estaba listo. Se podía ver el humo que salía de mis espaguetis mientras los sacaba, y los llevé lo más rápido posible a la mesa para no quemarme mis manos. Después de esperar un rato, me tome los aceptables espaguetis. Hasta ahí, todo normal.

Después, dejé los platos y el vaso en el fregadero. Fui caminando hasta la habitación, abrí la puerta, para después cerrarla cuando entrará, y me tumbé en la cama de golpe.

–Que bien sienta una cama cómoda...– murmuré feliz.- Hmm... Voy a buscar algo por Internet, a ver que encuentro... Quizás hayan subido un nuevo capítulo de algún anime...–

Cogí mi portátil y lo apoyé en la cama. Después lo encendí, y esperé a que cargará.
Y, en ese momento, algo cayó bruscamente encima de mi espalda, que dio un grito. No sé si me dio más susto aquel hecho, ya que yo también grité, o dolor. En serio, dolió bastante el golpe.

Quien fuera que hubiera hecho eso -consideraba que era "quien" más que "lo que", básicamente por el grito que casi me dejo sorda- me iba a ver muy enfadada...

Bueno, al final no. Por que, cuando vi quien fue, casi no me lo pude creer.

Una chica... ¿Disfrazada de panda...? Por que otra cosa no podría ser...

Su piel era blanca, muy blanca, parecía incluso pelo, aunque creo que no lo era. Su pelo era largo y liso, y de arriba para la mitad era de color blanco, y de la mitad para abajo era de color negro. Tenía como una especie de jersey largo, que excepto por la gruesa línea que tenía al final del vestido, era blanco, y unos pantalones, también de color blanco. En su cuello tenía una cinta negra, y la parte sobrante colgaba de su cuello, haciendo como si fuera una especie de bufanda, aunque no lo era. Sus manos parecían... ¿Negras? Si, también parecía que tenía pelo... Incluso se podían llegar a asomar unas garras...
Nah, seguro que son de mentira...
Igual que sus orejas y cola de panda...
Incluso sus ojos parecían de mentira. Quiero decir, que llevaba lentillas. Brillaban más de lo que suelen brillar unos ojos normales.

¡El panda la va liar parda!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora