Déjate caer (fanfic de 5SOS)

CAPÍTULO 9

NARRA MICHAEL

Me acerqué a un banco con la madera desgastada que había justo al lado de un árbol cubierto de hojas y me senté en él para descansar en la sombra y pensar con claridad. Suspiré. Luke y Savannah vinieron a mi mente. Debería habérmelo imaginado antes; yo sabía que Luke sentía algo por Savannah, pero teniendo en cuenta como eran los dos no imaginé que fueran a tener algo. Al menos no tan deprisa. Sacudí la cabeza. No podía enfadarme con uno de mis mejores amigos por estar enamorado de la misma chica por la que yo sentía algo, pero eso no significaba que no me doliera. Por mucho que supiera que lo que él sentía era muchísimo mayor a mis sentimientos por Savannah no era fácil. ¿Cómo iba a mirarles ahora sin sentir una punzada en el estómago?

Saqué mi iphone del bolsillo de mi pantalón para llamarles y pedirles disculpas por haber reaccionado de esa manera tan infantil. Además mi estómago rugía, necesitaba desayunar y no tenía la menor idea de dónde habían ido a comer. Busqué el nombre de Luke entre mi lista de contactos cuando de repente mi iphone vibró entre mis manos. Tenía un nuevo mensaje.

De: desconocido

Te veo.

Me quedé paralizado observando ese mensaje. ¿Qué coño era eso? Me levanté del banco y miré a mi alrededor. No había nadie. Ignoré el mensaje y empecé a caminar en dirección a la salida mientras volvía a buscar el nombre de mi amigo entre mis contactos.

Mi teléfono volvió a vibrar.

De: desconocido

Muévete, sí. Yo voy a seguirte de todas formas.

Aligeré el paso sin mirar atrás. Salí del parque y me detuve. Eché un vistazo dentro del recinto lleno de árboles y vegetación. No había nadie. Me encogí de hombros y seguí caminando.

Una vez más mi iphone vibró. Decidí ignorarlo pero siguió vibrando, alguien me estaba llamando. Miré la pantalla del iphone, dubitativo y decidí responder a la llamada para acabar con esa mierda.

—¿Qué coño quieres?— Escupí cabreado. Me sorprendió oír una voz femenina al otro lado de la línea telefónica.

—Mira detrás de ti.— Respondió calmadamente.

¿Que mirara detrás de mí? ¿Qué cojones era eso?

De todas formas decidí darme la vuelta. Mis ojos se toparon con una figura femenina. Las comisuras de sus labios se elevaron dibujando la curva de una sonrisa en ellos al verme.

—Hola, Mikachu.

“Mikachu”. Miré a la chica que había justo delante de mí a los ojos, los cuales tenían una tonalidad verde oscuro que me resultaba muy familiar. Eran muy vívidos y parecían divertidos. Su pelo castaño caía por debajo de su pecho despreocupadamente. Abrí los ojos sorprendido; sólo podía ser ella.

—¿Charlotte?— Me acerqué más a ella. —Charlotte, ¿eres tú?

—¿Cuántas veces voy a tener que repetirte que me llames Charlie, Michael?

La miré fascinado y eché a reír. Me acerqué a ella para ahogarla en uno de mis abrazos. Hacía tantos años que no la veía. Charlie era mi mejor amiga de la infancia. Aún recordaba el día que me dijo que tenía que irse a vivir a los Estados Unidos.estábamoss en el jardín de su casa jugando con su gato Cloud.

Desde entonces seguimos hablando, pero desde hacía unos meses, perdimos el contacto por completo. Yo siempre estaba ocupado con cosas de la banda y no tenía tiempo para amistades ajenas.