Prólogo.

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Mi vida gira entorno a viejas canciones, sí viejas canciones, cada momento, cada segundo que viví está ahí. Cuando amé por primera vez, cuando quise a alguien, cuando me volví amiga de ellos (digo ellos por que son 4 personas) cuando les hice daño, en fin, esas canciones hablan sobre mi, a veces de otro modo, a veces de forma cambiada, a veces cosas que no son ciertas o más bien de modo personificado o ficticio, pero siempre van para mi.

Al escuchar una de ellas, en cada estrofa, en cada verso, en cada palabra yo estoy. Un momento vivido, una sonrisa, un abrazo, un llanto, una tristeza o tal vez un odio, un rencor, un amor, una ruptura, una "friendzone", un rechazo, una indirecta, etc. Me hacen recordar eso, eso que vivimos, y sí no lo soporto es decir, lo detesto.

Y tener alguien que te lo recuerde es peor.

—Oye Sherlyn —comentó mi amiga Emily, sentándose alado mío —. ¿Te iras a la fiesta?

Yo estaba sentada, leyendo una revista, donde salía el puesto de las canciones más escuchadas y por supuesto, ahí estaba  algún momento vivido del pasado. Hablaban sobre la esencia de la letra de esa canción y se preguntaban ¿Como se les ocurrió esto a los artistas? ¿Quien será esa mágica chica de las canciones de ellos?

—¿Cual? —pregunté dando la vuelta la página de la revista—. Ahora estoy muy ocupada

—¿Leyendo revistas? Vamos Britt, yo se que tienes tiempo —insistió—. Es hoy, en tu día libre.

—Tu lo haz dicho, en mi día libre. Solo descanso y "bye fiestas" —volví a ojear desinteresada —. Ya no soy esa Brittany fiestera que conocías.

—Por favor —volvió a insistir—. Si no te vas hoy conmigo a esa fiesta escucharé canciones de 5SOS hasta que te vuelvas sorda.

Y ahí lo ven, mi mejor amiga es 5SOSFAM, y peor, vive conmigo en mi departamento.

Ella es la que me recuerda escuchando canciones, ella me reclama, me insulta, me reprocha, me reta, me odia por lo que hice, pero al fin y al cabo es mi mejor amiga y vivo con ella, aunque pegue pósters por todo el departamento, aunque todo esté repleto de cosas de ellos, y, aunque escuche sus canciones ella es mi única amiga, la que no me rechazó por mi pasado (aunque si, me echa en cara, que es peor) y que estuvo conmigo a pesar de todo (a lo mejor para molestarme) la quiero.

Cuando una persona se siente sola, se vuelve amiga hasta de sus peores enemigos.

—¿Me estas chantajeando? —pregunté frunciendo el ceño—. Por favor Emily, sabes bien que en este departamento esta PROHIBIDO escuchar canciones de ellos, y más cuando yo estoy presente.

—Escuchar canciones sí, pero no cantarlas —comenzó a cantar —.  I whish that I was eigteen, Do all the things, You read in magazine, You know I’m not saying I wanna be Charlie Sheen

Por favor Eighteen no.

She’s just a little bit older, But I whan to know her, But she said it’s already over  —seguía cantando, y cada vez más fuerte —. So tell me what else can I do? I bought my fake ID for you.

Odio el coro, odio el coro.

—Esta bien,esta bien, esta bien —interrumpí su canto —. Pero prométeme que te callarás por favor.

No puede ser. Brittany Scott Miller se ha dejado manipular.

Ayuda por favor.

—Claro, te lo prometo —respondió contenta, parecía una niña malcriada que luego de llorar le dieron lo que quería —. Te tienes que arreglar, que es ésta noche.

—¡No me has dicho que es ésta noche! —exclamé sorprendida—. Sabes que yo tardo mucho en prepararme.

—¡Entonces prepárate ahora! —exigió levantándome del sofá (y tirando mi revista, por cierto) para que me vaya a preparar —. Y así llegamos a tiempo. Ah si y ya te lo dije, solo que no me prestaste atención.

—Ya voy, ya voy —respondí entrando a mi cuarto.

No sabía ni que ropa usar, ni que zapatos y mucho menos peinado. Definitivamente tardo mas en elegir que ponerme que en vestirme.

—¿Éste o éste? —pregunté a Emily señalándole los dos vestidos que tenía en la mano—.  No se, creo que el rosa es muy de "niñita" y el negro muy de velorio ¿Que opinas?

—Me gusta más el azul —respondió leyendo la revista que recién había tirado—. Tu eres la mágica chica, te odio.

—En primer lugar no tengo en mano ningún vestido azul —tiré los dos vestidos en el sofá —. Y en segundo, te dije una y millones de veces que si vas a volver a reprochar con cosas que han pasado hace años ahí está la puerta, no quiero discutir contigo de lo mismo —agarré de nuevo los vestidos y me fui en dirección a mi cuarto.

Entré en el baño, me bañe, me lavé la cabeza y luego agarré la toalla y me sequé, luego mi cabello y me vestí, (seguía sin saber que vestido usar, entonces agarré una falda negra que me llegaba hasta la parte alta de mi cintura y también una blusa color rosa claro pálido) me puse los tacones, (que eran de color negro, por cierto) me solté el cabello, lo peiné, luego me maquillé  y agarré mi bolso para luego irme

—¡Hasta que por fin sales! —exclamó Emily sentada en el sofá esperando —. Creí que nunca ibas a salir.

—¡Ya! No molestes por favor —cuestioné molesta—. Que mucho hago acompañándote a esta fiesta para que no te quedes sola.

—Esta bien —asintió levantándose—. Vámonos

Salimos del departamento, prendí mi coche y conduje hasta el lugar donde era la fiesta, estacioné y nos bajamos, todo estaba lleno de luces, la musica alta y como en todas las fiestas la gente tomando y bailando como siempre

Pasaron los ratos, Emily se quedó aburrida y yo estaba sentada, cerca de donde servían los tragos, aún sobria.

—Yo ya me voy —soltó un bostezo—. Tengo sueño ¿Te vas conmigo?

—¿Me traes hasta aquí para luego irte temprano? —pregunté molesta—. ¡No! Mejor te vas tu.

Estaba molesta con ella, por eso respondía así.

—Esta bien, como quieras —respondió agarrando su bolso molesta—. Adiós

Luego de que Emily se fuera, estaba un chico alado mío, al que ella calificaba como "lindo" pero no se veía bien su cara por las luces que brillaban que hacía que no viera tan bien

—Un trago para la señorita por favor —ordenó el chico (perecía estar ebrio) y además tenía una voz familiar, creo que ya lo conocía pero no se donde—. Eres súper guapa.

—Yo no tomo —respondí—. Estas borracho querido

—Yo si haré que tomes —agarró un vaso—. Y no tan borracho como tu estarás

—¿Eso crees? —sonreí—. Suerte con eso, querido.

Hey Shelyn! ; AfiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora