Ojos y sonrisas

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Sus ojos eran alegres y llenos de vida, no pude evitar sonreír.

—Tu sonrisa —me dijo—es especial, cada sonrisa es única, pero la tuya es especial, es hermosa y eso dice mucho de vos.

Ese fue un cumplido de los que que despiertan a la mariposas que llevas dormidas dentro.

—No me digas esas cosas—conteste.

—Por qué no?

— Porque sos bueno, simpático, carismático, amable y ahora poético pero no al punto de querer demostrar tu intelecto, sino desde el humilde punto de vista de un observador que se maravilla de cosas simples.

—Y qué problema hay con eso?

—No me quiero enamorar.

Escritos De Una Mente PrisioneraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora