Cuando todo iba bien.

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Me he levantado justo a tiempo para ir al instituto, la alarma ha sonado después, no me imagino que habrá pasado. Bueno, en realidad habré ido posponiendo la alarma hasta darme cuenta que la he cagado.
Me visto rápido, hoy tenemos deporte en el instituto, así que cojo unos pantalones de chándal de mi silla que no huelen demasiado mal, con las prisas, tiro el mando de la consola que me había dejado encima de la mesa y me doy cuenta de que lleva toda la noche encendida, eso no le viene bien después para el rendimiento.
Bajo corriendo las escaleras y casi tropiezo y me caigo, cojo las llaves de la entrada y salgo corriendo hasta que veo a Lily en la puerta gritandome:
-¡¿Otra vez te has quedado sopa Jack?!
Mientras corremos le voy pidiendo diculpas como puedo entre jadeos.
-¡Joder Jack!¡Que tenemos clase con el señor Jhonson!
Es nuestro profesor de historia, la última vez que llegamos tarde nos echo la bronca y nos dijo que como volviéramos a llegar tarde nos llevaría al despacho del director.
Entre mis jadeos se oyen algunas palabras de disculpa lo que hacen que haga reír a Lily y aminoremos la velocidad.
Justo cuando estamos pasando la puerta de la clase suena el timbre. Salvados por la campana. Literalmente.
Veo a Lily sentarse en su sitio y secarse un poco de sudor que tiene por la frente, cuando se seca se echa hacia atrás un mechón de pelo que se le habría escapado al hacerse la coleta o que con la carrera se le habría soltado.
Cada día me doy cuenta que me gusta más, hasta que veo a todos mirando hacia mi dirección , pero no era por mí, si no por el quien estaba detrás.
Cuando me giré no ví a Jhonson, si no a la psicóloga del colegio, resulta que el profesor de historia se había puesto enfermo debido a una comida en mal estado.
Salimos de la clase libre en la que la mitad de los compañeros se habían dormido y algunos otros estaban con el telefono móvil, ya que la psicóloga había seguido la táctica de los otros compañeros, quedarse dormida
Lily y yo junto a dos amigos mas, Joe y Amelié, hablamos durante toda la clase en una voz no muy alta.
Joe se puso a jugar a un juego de su teléfono, mientras que los demás hablabamos. Lily se paso el primer cuarto de la hora maldiciendome por haberse pegado una carrera de mi casa al colegio para nada.
Cuando termina última clase Lily me propone una idea que no resulto ser muy buena.

Intentando Olvidarla.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora