Capítulo 1: Hikaru & Clarissa

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Capítulo 1:

Clarissa POV:

El viento chocaba en mi rostro, refrescándome y despejándome la mente. Me sostenía fuertemente en el torso de Kevin, recostando mi mejilla contra su espalda. Llegamos al frente de mi escuela que estaba como un pueblo de fantasmas; las clases ya habían acabado, y estaba llegando el atardecer. Kevin me ayudó bajarme de su moto e inmediatamente me abraza por mis caderas, acercándome a el.

"¿De verdad tienes que irte a trabajar ahora?" Me pregunta con una voz exageradamente triste. Yo reí y le di un beso en sus grandes y suaves labios.

"Sí. Además, tengo que asegurarme de que los maestros no se dieron cuenta que me escapé." Le dije.

"¿Y cómo pretendes hacer eso?" Me pregunta coquetamente, mientras bajaba su cabeza y colocaba sus labios por mi cuello, dándome cálidos besos. Hice lo posible de no derretirme en sus brazos.

"Tengo mis maneras de manejar estas situaciones." Le respondo con una sonrisa juguetona. Escuché un sonido de satisfacción en su garganta. Kevin sube la mirada y me besa apasionadamente.

El beso se volvió un poco más intenso cuando coloco mis brazos alrededor de su cuello, acercándolo más a mí. Una mano mía baja suavemente por su brazo derecho lleno de tatuajes. Sus dos manos bajaron hasta mis muslos y no pude evitar sonreír en su boca por como su toque me daba cosquillas. Cuando pasaron como cinco minutos, decidí romper el dulce y tentativo beso.

"Me tengo que ir a trabajar." Le susurré en el oído y el gruñó con una sonrisa juguetona.

"Esta bien, espero verte mañana de nuevo. Y tal vez podemos continuar por donde nos quedamos." Me dice con una voz baja, peligrosa, pero jodidamente sexy. Mordí mi labio inferior y asentí. Kevin me da otro beso rápido antes de montarse en su moto y desaparecer en la calle. Me quedé allí parada por un momento, recordando lo bien que mi labios se sentían junto a los de él.

Kevin era un hombre de la Universidad cerca de mi escuela. Nos conocimos por casualidad, pero, desde esa primera vez que nos vimos me enamoré de él. Muchos los juzgan por su forma de vestir, por sus tatuajes, y por su carácter, cuando en realidad es un chico dulce, divertido, y protector conmigo. Tiene cabello rojizo, corto y parado. Sus ojos son de un marrón oscuro y profundo; obviamente, no se me puede olvidar su sensual y musculoso cuerpo. Llevamos saliendo a escondidas de mi padre, ya que Kevin no le cae nada bien; mi mamá sabe sobre nuestra relación, pero no está completamente convencida. Aún así, lo acepta.

Caminé hasta el Cuido de Niños donde trabajo con mi amigo, que es el mejor amigo de papá, y también es mi jefe. Al llegar, ya estaba oscureciendo y solo habían como cuatro niños que faltaban de recoger. Se supone que yo haiga venido aquí hace como tres horas atrás, pero digamos que me distraje mucho gracias a Kevin que me perdí en el tiempo. Al entrar, fui abrazada por dos niñas de cuatro y cinco años de edad, Kami y Stefany.

"Llegas tarde." Subí la mirada cuando la voz de Hikaru me llamó la atención. Estaba recostado en el margen de la entrada con una mirada completamente en blanco, pero podía notar el coraje en sus ojos.

"Perdón. Kevin me vino a buscar y pues─"

"Sabes que tu padre me volvió a llamar y tuve que mentirle de nuevo." Me interrumpió.

Resoplé. "Papá se está preocupando de más. No llego a casa en cinco minutos y rápido piensa lo peor." Entré a mi pequeña oficina y dejé mi mochila al lado de mi escritorio. Hikaru entró y se recuesta del escritorio.

"¿Lo puedes culpar? Eres su única hija, Clarissa. Es obvio que se preocupará por ti." Dice Hikaru, mirándome a los ojos.

"Tengo 17 años; ya no soy una bebé que necesita ser vigilada las veinticuatro horas del día." Le dije fríamente.

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