Era de día y no vería a Gebas hasta las 6, estaba ansiosa, eso no era bueno, pero era una sensación tan agradable que no me preocupe en deshacerla.
Me la pase leyendo bajo la misma estrella* hasta que era hora de arreglarme.
*Bajo la misma estrella, libro de Jhon Green.
Me meti a la ducha, y pensé que sí empezaría a salir con Gebas el debería contarme sus secretos y yo los míos, pero, ¿el podría sobrellevar mis secretos?, era lo que más me angustiaba.
Sin darme cuenta eran ya las 5:15 y aún no elegía mi ropa, y sí quería rizar mi cabello un poco tendría que darme prisa.
Elegí un blusón de rayas negro y unas mallas color
azul marino, peiné mi cabello con un poco de rizos, que en realidad fueron los únicos que se sostuvieron.
Tocaron la puerta y al instante me puse nerviosa. Abrí.
- Princesa, te vez hermosa.-dijo Gebas sonriendo.
-Gracias, tú estas guapo.- lo que decía era verdad, esa chamarra de cuero negra hacia que sus ojos miel resaltarán y contrastaba con su pantalón marrón.
Nos subimos en su Italika y no tardamos ni 20 minutos en llegar.
- Estuve pensando Gebas.- dude.- que emm ¿por qué tienes tanto interés en mi?
- Porque eres diferente.-dijo sin dudar.
- ¿Soy diferente?¿En qué?-pregunté.
-En todo.-dijo.
- Explícate.
Abrió la puerta de pizzabanti
-Bien, eres directa, no tratas de coquetearme, eres linda, te gusta leer, escribes bien, ¿aún quieres más?.-respondió.-
-Wow, tranquilo, no pensé que fuera así, pero gracias.- dije
-¿Nos sentamos?
Asentí.
Buscamos el lugar más alejado.
-Bien, pensé que sí quiero salir contigo debo confesarte que no soy normal, y se que tú tampoco lo eres, como lo se, no se pero lo siento.- dije.
- ¿Cómo que no eres normal?-preguntó.
- Soy...-dude en decirlo.- mmmh tal vez nunca hayas escuchado de ello, soy una chica inmortal, soy un ángel caído.
-Bien, no me sorprende y te creo porque te confesare que yo soy un nefilim, pero no al cien por ciento, aún no soy inmortal, necesito encontrar al ángel caído del que provengo.
- Retrocede, eres un nefilim, ¿Y la cicatriz?, se que no es idéntica a la de un ángel caído, pero es rara.
- Soy de primera generación y a pesar de no tener todos los poderes de un ángel caído, tuve la oportunidad de tener alas pero los arcangeles me las quitaron, dijeron que me las devolverían en el momento que demostrará ser digno de ellas.
- Pero ser digno, ¿cómo?
- No lo se, pero ahora que sabes de mi no te alejaras ¿verdad?.- preguntó angustiado.
- Por supuesto que no, te has vuelto especial para mi Gebas.-dije entendiendo porque dijo que me perdería el día de los bolos.- jamás me alejare de ti, lo prometo.
Me tomo de las mejillas y me beso, sus labios rozarón suavemente los míos, fue una sensación increíble que jamás había sentido.
Ambos teníamos secretos, y ambos teníamos un objetivo que conforme se diera nuestra relación nos diríamos. No queríamos apresurarnos, fue una promesa.
Gebas llamó a la mesera y pedimos una pizza hawaiana y unas papas con queso. Cenamos, y al terminar me fue a dejar.
PERDÓN POR HABER TARDADO EN SUBIR MIS CAPÍTULOS, PERO ESTABA CARGADA DE TAREA ESPERO LES ESTE GUSTANDO EL TRAMA. POR FAVOR RECOMIENDEN QUE LEAN MI LIBRO. GRACIAS READERS.
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Dulces secretos.
Teen FictionLany una chica nada común, conoce a Gebas en clase de física. Gebas se siente una atracción por Lany pero no se atreve a decirlo porque no tiene confianza en sí mismo. Lany al contrario será la primera en dar algún pasó, aunque todo puede correr pe...