El sonido de la alarma hizo que despertara, el reloj marcaban las 8am. Un nuevo día comenzaba. El cansancio y las ganas de dormir aún estaban presentes en mí, pero no tenía tiempo para seguir descansando, así que sin más preámbulos refregué mis ojos con mis manos para poder despabilarme un poco así finalmente levantarme.
Desayuné rápidamente y de paso alimenté al pequeño Toby. Me sentía ansiosa... un nuevo día aquí, poder conocer gente nueva y demás, estaba contenta. Apurada, le di un último sorbo al café y a continuación salí de la casa. Al dirigirme hacia la universidad, tenía que pasar frente a la casa de mi vecino, esto me había traído recuerdos de la mala pasada de la noche anterior. Estaba todo cerrado como de costumbre pero con la diferencia que no se escuchaba ninguna música así mismo seguí con mi paso.
Tenía que decir que iba de lo más normal, un poco de maquillaje y delineador de ojos, el cabello recogido y unos simple jeans de color gris con una camisa a cuadros azul y unos borsegos. Nada fuera de lo usual.
Faltaban un par de calles para llegar en cuanto se me ocurrió parar a un kiosco a comprar que tenía a un poco más cerca, al frente de una plaza. Fijé mi reloj y tenía tiempo, ya que había salido apurada. Luego de ir a dicho kiosco, tuve que cruzar por dicha plaza para cortar camino, así continuar con mi recorrido, pero por un segundo quedé helada al ver la persona que me había cruzado. Era mi vecino, estaba un poco alejado de mí y estaba rodeado de chicas mientras lo abrazaban, le pedían fotos y firmas. Espera... ¿Es famoso? La razón de mi confusión era simple, ¿Cómo es que unas chicas no más grandes que yo pueden idolatrar a esta persona? Además no lo voy a negar, parecía bastante amable, nada que ver cómo me había tratado a mí. ¿Será un actor? Digo, porque se le da bastante bien. Simultáneamente vi venir hacia a mí una de las fans que estaba con él, llorando de la emoción con una hoja con la firma del chico decidí frenarla y ver quien era esa persona al que parecía no poder creer que había visto.
-Hola- dije sonriente acercándome a ella. La niña frenó de golpe y me miró con sus ojos brillosos llenos de felicidad por lo que pasó. Correspondió mi saludo y me dispuse a preguntar lo siguiente:
-¿Tú me podrías decir quién es el chico de ahí?- dije de buena manera señalando a mi raro vecino. Ella secó sus lágrimas con sus manos, mientras tanto pude husmear la hoja que traía, la cual decía: *Con mucho amor. Rubius*
-Se llama Rubén, pero le decían Rubius, él subía vídeos a Youtube.- Concluyó, mientras le caía una lágrima por sus mejillas. ¿Mi vecino subiendo vídeos a Internet? Era curioso haberlo visto siendo un maleducado conmigo y después siendo súper gentil con sus fans.
-Ah okey, gracias- dije y esta se dio la vuelta para irse.
Cuando volví la mirada hacía el tal "Rubius" este me estaba mirando. Una mezcla de nerviosismo e inquietud recorrieron mi cuerpo haciendo que casi inconscientemente le quitara la mirada y seguir con prisa mi camino, ya que me miraba serio pero sorprendido por mi presencia.
Poco después llegué a la universidad, minutos antes de comenzar la clase. Todo era bonito, como por dentro y fuera. Me senté al lado de una chica con la que tuvimos buena onda y comenzamos a hablar, teníamos gustos bastantes parecidos y ella también se había mudado de otro país. Su nombre era Tara, una chica morocha de ojos verdes, ya nos habíamos hecho amigas.
Al terminar la clase, teníamos que esperar cuarenta y cinco minutos hasta la próxima, definitivamente no me iba a ir a mi casa para después volver, así que decidí quedarme.
-Tengo hambre.- resopló Tara. -¿Quieres ir a por algo de comer?-
-No... gracias, tengo que llamar a mi madre que está en L.A.- mentí, no era para llamar mi madre sino para "investigar" sobre mi vecino, todavía me había quedado la intriga de poder ver a lo que se dedicaba. Además no está mal querer saber sobre la persona que vive a mi lado ¿Cierto?
Mientras mi nueva amiga fue a comer algo y demás, yo me dirigí hacia el campus, típico lugar abierto al aire libre en donde los jóvenes suelen sentarse cuando tienen un tiempo para repasar exámenes o simplemente un rato libre para descansar, como yo. Por suerte no había nadie, me senté en un banco cerca de unas plantas y saque mi celular para poder buscar en Internet: "Youtube", y acto seguido escribir "Rubius" en el buscador. Una lista de varios vídeos de él apareció, y entre todos eso estaba su canal, vaya que tenía demasiados seguidores. Decidí por fin entrar a este, y pude ver que en la descripción del último vídeo decía "subido hace 3 años." el cual se titulaba "Gracias por todo.". Me coloqué los audífonos y le di play a dicho vídeo para luego comenzara a producirse.
Se lo podía ver sentado con varias estanterías de fondos repletas de figuras de colección y adornos, sorprendentemente eran exactamente los que yo había visto al ir a su casa, pero solo vi un poco de ellos. En cuanto a él, no hacía falta conocerlo para darse cuenta que estaba triste, se le podía ver claramente en sus ojos. El vídeo duraba aproximadamente treinta minutos, en los cuales no solo habló de la razón por la que se retiraba de Youtube, la cual era que sentía que necesitaba hacer algo más con su vida, dedicarse a otra cosa sino que también se la pasaba recordando momentos con fans o con sus amigos tiempo antes, reía al recordar esas ocasiones felices mientras sus ojos se llenaban de lagrimas. Luego pasó a la parte donde agradeció a todo el mundo: a su familia por haberlo apoyado desde el principio, a sus amigos, y sobre todo a sus seguidores, "Siempre les estaré agradecido, ustedes habéis hecho de mi vida un sueño para mí el cual no creí despertar jamás, pero como toda cosa en la vida... nada dura para siempre, ustedes se han convertido parte de mi, son la razón por la que hoy yo esté aquí. Hace años mi sueño era poder hacer feliz a la gente, sacarle una pequeña sonrisa en algún mal momento que esté pasando y gracias a vosotros lo he cumplido, por eso jamás os olvidaré, os quiero mucho... Hasta siempre." su voz se quebró en la última frase y rompió en lágrimas, intentaba ser fuerte, evitar el llanto secando esas gotas llenas de tristeza con sus manos pero no podía ya que ese rebelde líquido seguía cayendo de sus ojos empapando sus mejillas. Esa fue su última oración y finalizó el vídeo con un lindo clip lleno de momentos vividos y así finalmente decir nuevamente: "¡¡Gracias por todo!!".
Mi piel se erizó y mis ojos se humedecieron al terminar de ver el vídeo y sus comentarios de seguidores que aún así lo seguían alentando y le dejaban miles de cartas de agradecimiento y tristeza. Aproveché para ver algunos otros vídeos así conocerlo un poco más ya que me quedaban unos pocos minutos para volver a clases. En todos los que vi de ellos aparecía su amigo "Mangel" que también fue una de las personas la cual Rubius agradeció en su vídeo de despedida. Un joven morocho ojos marrones que usaba lentes, era bastante simpático se podía decir, hasta he visto un vídeo de ellos besándose, por el momento creí que eran homosexuales, pero supuse que era un tipo de broma por los comentarios de fans. Reía al ver las cosas que hacían, de verdad que eran buenos en esto.
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El chico de al lado, el psicópata [Rubius]
FanfictionSam, una chica de 22 años se muda a otro país, sorpresivamente junto a ella vive un chico el cual solía ser famoso por subir vídeos a Internet. A través de la voz de la protagonista se desembrollará una oscura historia de suspenso, desafiando lo...