Offhand |Raura| SIN EDITAR.

EPILOGO

No siempre las cosas salen como queremos que sean, pero aunque la mayoría de veces eso es molesto, lo disfrutamos de la mejor manera posible; dejando de lados los contras y disfrutando de los pro. Ya sea estando junto a la persona que se ama y ayudándola a sobrellevar los problemas o al olvidarlos, siempre se pueden olvidar.

A veces un libro te lleva a disfrutar de una de las mejores historias; problemas, dudas, desconfianzas, pero siempre ganaba el amor, porque, pues es el amor, otras veces ese libro no es mas que una historia real que están creando personas inundadas de ese mismo sentimiento y sin importar como sea el final queda la dicha de que esa historia estuvo llena de amor, la de ellos lo estuvo y el lo recuerda perfectamente, cada etapa.

Puede solo cerrar los ojos y recordarlo todo, cada beso, cada pelea, cada caricia, cada toque, todo y todo era especial aunque fueran solo recuerdos, esos siempre serian los mejores de su vida.

Los últimos meses que estuvo con ella fueron mas que perfectos, nunca se quedaba quieta, era como una niña que cuando descubría algo nuevo se sentía realizada, le parecía maravilloso y fascinante, y el disfrutaba eso como nadie diferente a el lo haría.

No se arrepintió de nada, de haberlo dejado todo por estar con ella, porque en si y sin quererlo ella se había convertido en su todo, en todo lo que necesitaba para ser feliz, y sabia que no tendrían una larga historia juntos, porque no fue asi, pero fue la historia corta mas maravillosa y no hubiera cambiado eso por nada. Una historia que repetiría mil veces mas sin importar el final y teniendo siempre presente el amor que había reinado en ella.

Sonrió recordando la manera en la que había vuelto con ella y dos meses después en Amsterdam le había pedido que se casaran, eran solo ellos dos, alejados de toda las personas y ella no pudo negarse, salto sobre el para abrazarlo y susurrarle que si en el oído y desde ahí todo pareció una ilusión, todo a su lado lo fue.

Soltó una bocanada de aire mientras rompía el sobre que tenia entre sus manos, lo había llevado con el durante casi seis meses y aunque no se sentía listo para saber lo que contenía sabia que nunca lo estaría, asi que era mejor aceptarlo de una vez.

Creo que me gusta esto de dejar cartas a las personas que son importantes para mi. 

No voy a empezar esto con una dedicatoria porque sabes que es solo para ti, no nombre o sobrenombre no nada, porque eres simplemente tu y eso me encantaba y lo sigue haciendo.

Llegaste a mi vida como una especie ciclón, para mi, en un buen sentido, acabaste con todo y formaste algo mucho mejor, sin dejar atrás lo que ya era, me soportaste cada vez y estuviste ahí hasta el fin. ¡Nos casamos! nunca me imagine casada con nadie pero tu cambiaste eso también y lo hiciste en realidad, y culpo al tiempo por no habernos regalado un poco mas, por no habernos concedido un lapso mas largo juntos para disfrutar de esos placeres y disgustos de ser unos recién casados conociendo el todo y la nada, uno al lado del otro, aunque también nos culpo a nosotros por no habernos conocido antes y por negarnos al principio, fuimos unos idiotas. 

Pero a pesar de eso, pienso que todo lo que vivimos fue suficiente,  sin saberlo me enseñaste a vivir la vida, a amar y olvidar, me enseñaste todo a lo que me negaba, sin saberlo me enseñaste que todo e posible, porque fuiste posible para mi aunque no te pedí, apareciste y eso lo fue todo.

Cuando me di cuenta que eras todo lo que necesitaba para avanzar fui la mujer mas feliz del mundo, te lo aseguro, olvide todo lo que pasaba y me concentre solo en ti, me encantaba verte dormir, lo hacia seguido cuando yo no podía, grabe cada una de tus facciones perfectamente en mi memoria, al igual que tus gestos. Eres hermoso, aunque creo que eso ya lo sabes, pero tienes que saber que no eres tan hijo de puta como lo creías, eres mucho mejor que muchos que se creen buenos pero realmente no lo son y eso me hace demasiado feliz.

Tal vez esto sea estúpido, pero enserio, aun no puedo creer que nos hayamos casado, siempre va a ser algo tan nuevo para mi, pero lo disfruto de igual manera, de la mejor manera y sabes exactamente a lo que me refiero.

Arriésgate cariño, como lo hiciste por mi, como lo harás por cada cosa que quieras, ya sabes que nada se pierde con arriesgarse, en realidad puedes ganar mucho mas de lo que crees, estamos como ejemplo y eso esta mas que bien. 

En fin, la verdadera razón por la que te escribí esta carta es porque ademas de agradecerte por hacerme tan feliz siempre y por quedarte hasta el final, es para decirte que seras un idiota y voy a odiarte si no rompes esa estúpida promesa que me hiciste el día que nos casamos, rompela porque es lo que yo quiero, no quiero que me ames siempre y te cierres a otras personas, no te imaginas cuanto me odiaría por hacer que te cierres al amor. Enamorate, sufre, recuperate y vuelve a enamorarte las veces que sea necesario hasta que encuentres a una persona que te haga sentir especial, tanto como me hiciste sentir a mi y estaré feliz porque estarás rehaciendo tu vida con otra mujer que podrá darte los momento felices que necesites siempre.

Aunque no lo creas siempre estaré ahí, en cada paso es des, voy a cuidarte de todo, voy a amarte con todo, siempre, siempre...

Y ya lo único que quedaba era avanzar y esperar a que todo salga bien.

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Creo que eso fue todo...