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Sábado, 23 de Abril del 2016

Aitana,

Si te digo que arruinas mi vida, ¿cómo te sentirías? ¿Sentirías pena, empatía, malestar, no te importaría? ¿Intentarías cambiar eso? Ya sabes, dejar de arruinar mi vida. Actualmente, no sé porqué lo haces. Tal vez lo entienda en el futuro como también cabe la posibilidad de que no. A veces suelo entenderte, pero hay otras en las que me cuesta descifrarte. Eres como un laberinto, nunca sabes cuándo te encontrarás con una pared.

Sabes, aún recuerdo los momentos en el que me pedías ayuda, en los que te defendía, te protegía. Y lo que más me duele es ver en lo que te has convertido. En la forma en la que no te importa dañarme para conseguir lo que quieres. ¿Cómo puedes ser tan ingrata? ¿Tan mala hermana? Eres como una espina clavada en mi corazón. Lo peor de todo, es que no te puedo sacar por completo. Si hiciera eso, borraría cada buena memoria y eso me llevaría a odiarte. Y no quiero eso. No puedo creer que llegue a ser tan ingenua para pensar en que algún día te arrepentirás y volverás a ser la persona de mis recuerdos.
¿Qué será de mí? No quiero ser perseguida por el fantasma que alguna vez fuiste. Sólo te quiero de vuelta.

Probablemente no regresarás, tal vez esa parte de ti murió cuando padre te llevó lejos. Cuando me diste la espalda y clavaste una daga en el corazón de nuestra madre. No sabes las enumeradas veces que la vi llorar por ti. Todas esas veces se me desgarró el corazón. No creo poder perdonarte por todo lo que la has hecho pasar. No quiero sentir resentimiento hacia ti. ¿Por qué quieres enfadarme? Sabes que no puedes ganarme. ¿Por qué quieres que te odie? Sabes que eso solo destruirá mi corazón y me impedirá amar con todo lo que tengo. Tal vez ese es tu propósito. Podré perdonarte por tus malos actos hacia mí, sin embargo, los que has hecho contra nuestra madre, no. Ella sólo se dedicó a hacernos feliz. Hubo veces en las que dejó de comer para darnos a nosotras, dejo de comprarse cosas para que no nos faltará nada. ¿Cómo es que tienes la conciencia para cometer tal atrocidad? Ella quiere tu felicidad, aún así la has dañado de una forma irreversible.

Espero que te contentes en dejar una profunda y única cicatriz en el corazón de nuestra madre y en el mío. Porque no te dejaré tocar otro pedazo del de ella. Él mío se volvió de piedra con una coraza de titanio. No podrás traspasarla. No eres sólo una mala hermana y una mala hija, eres también una mala persona.

Con toda el amor que mi estupidez te tiene y todo el desprecio que mi cerebro te da, @EidersDial.

Cartas a una mala hermanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora