Capítulo 6

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-Despierta Ana, cariño, es hora de irnos-escucho a mi madre hablar suavemente

-¿Mamá?-digo sorprendida

-Cariño, soy yo no te asustes, ahora levántate, debemos irnos

-¿Qué? ¿Dónde?

-En busca de la felicidad

-Mami, ¿De qué hablas?, ¿Ya no me odias?

Me acaricia suavemente la cara, sonriendo, luego apoya un beso en mi frente

-Ana, mi querida Ana, como te odiaría yo a ti, te amo

Siento unas lagrimas tibias deslizarse por mi rostro, una tras otra

-No sabes cuánto tiempo espere escuchar eso-digo entre risillas

De repente todo se vuelve negro, y me siento sumergida en un mar de gritos, y estoy en un cuarto donde las cortinas son rojas y se están quemando, todo arde aquí adentro, y allí esta ella

-Ana, ayúdame

-¿Lia? Lia!!!

-Ana, quítame de aquí por favor

Intento atravesar el cuarto hasta llegar junto a ella, pero el fuego se hace más fuerte, y obstaculiza mi paso

Me arrodillo al piso, sin saber que hacer, por Dios, Lia esta muriéndose

-Ana!!!!!

La escucho gritar, tan fuerte que me deja perpleja, hasta volver en mí y verla arder

Grito desesperada, intento cruzar pero no consigo, el fuego sigue arrimándose

El fuego cesa, ahora estoy en un cuarto de cristal, es frío y vacío, excepto que en una esquina se encuentra una mujer de espaldas

-Mira lo que has hecho, Ana-habla esa mujer

Se da vuelta, y la veo, con el rostro todo quemado, con el cuerpo todo quemado, Lia

Alguien más aparece por la otra esquina del cuarto, mi madre

-Mira lo que has hecho, Ana-dice mi madre acercándose a Lia

-Yo no...yo no!!-dejo escapar gemidos sofocados

Del otro lado del cuarto, aparece otra persona, mi padre

-Mira lo que has hecho, Ana-esta vez lo dice mi padre uniéndose a las otras dos

-Mira lo que has hecho, Ana-dicen al unísono

-Rompiste esta familia, está rota, tan rota como tu-dice Lia dirigiéndose a mí, luego suelta unas risas perturbadoras

-Nos mataste, a cada uno de nosotros, nuestras almas, y todo esto lo hiciste tu-mi madre es la que esta vez habla, también uniéndose a la risa de Lia

-Tus sombras te persiguen, nosotros somos tus sombras-se une mi padre a ellas

-Calla, no es verdad, no lo es!!!-digo con lagrimas en los ojos

-Mira lo que has hecho, Ana-comienzan los tres

-Mira lo que has hecho, Ana

-Mira lo que has hecho, Ana

Me arrodillo, tapando mis oídos con las manos, encogiéndome hasta quedar lo más pequeña posible

-Mira lo que has hecho, Ana

-Nooo-grito

De repente, despierto de un salto

-Tranquila, Ana, tranquila-me sostiene por el brazo Laura

EternoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora