Un Hibrido Alpha

Cap 1: Adelanto De La Transformacion

Loreta caminaba por el parque camino a su casa, ya casi se hacia de noche y había perdido la noción del tiempo haciendo un trabajo en la biblioteca ya que era demasiado extenso y se distraía constantemente leyendo otros libros que poco o nada tenían que ver con el tema del trabajo.

Su cabello corto negro en capaz volaba con el viento nocturno, sus ojos verdes y piel color canela solían llamar la atención de algunas personas de su instituto aparte de sus 1.84 metros haciendo que sea mas alta que el resto de sus compañeras. Ella no era como el resto de sus compañeros, su familia paterna entera eran licántropos lo cual la incluía a ella y su transformación seria en 3 años cuando cumpliera los 20.

Las calles estaban vacías y con la presente oscuridad le daba un aura tenebrosa y solo quedaban unas pocas luces en el parque lo que hizo que apurara el paso para salir rápido de ahí mientras sentía que la miraban desde la oscuridad y ese pensamiento no esta tan errado. Un lobo de pelaje castaño de ojos amarillos se escondía en los arbustos mirándola inquieto sin quitarle el ojo de encima, Lucas era el nombre de ese licántropo, es primo de nuestra protagonista y planeaba atacarla para adelantar su transformación ¿por qué? Su manada se había quedado sin un alpha y convenientemente ella es un alpha y faltaba poco para la siguiente luna llena, lo que le daba suficiente tiempo por a apurar las cosas pero tenia que ser cuidadoso, ya que lo hacia solo y las posibilidades de que no funcionara eran considerables y si no se controlaba podría matarla, era lo ultimo que quería conseguir

Pero ¿que él no puede hacerse cargo de su manada? Hay dos problemas con eso: 1#: él era un beta y ya había intentando todo para subir de rango pero no le funciono, 2#: ella era hija única y él sabia que le costaría unirse a una. Algo en todo esto no le convencía y asustaba pero sabia que era lo correcto, de alguna extraña manera.

La vio sentarse para recoger unas hojas que el viento le voló de un cuaderno, era el momento de hacerlo, la ataco haciendo el suficiente daño para dejar ADN en ella pero no para matarla o dejar su aroma impregnado, y corrió de nuevo a la oscuridad dejándola confundida y tiritando. ¿por qué habían lobos ahí? Ni dejaban entrar perros pequeños y en las noticias no habían dicho nada sobre el escape de algo del zoológico, a además ¿qué clase de lobo se iba después de pocas mordidas así sin más? Nada de esto le olía bien pero un dolor de cabeza la hizo olvidarse de eso e ir cojeando a casa ya que la mordió en la pantorrilla izquierda.

Al llegar a casa sus padres la recibieron preocupados al ver su estado, su madre, Tara, una enfermera de alto rango, curo sus heridas mientras su padre, Daniel, detecto el aroma de un lobo que la había atacado. Le parecía muy familiar pero no sabia de donde, lo único que detectaba era que el lobo era un beta, eso fue lo suficiente para enojarlo; nadie se metía con su pequeña y quedaba impune pero seria algo que tendría que resolver otro día, en ese momento su hija callo inconsciente por el cansancio y la llevo en andas a su cuarto. ¿por qué un lobo la atacaría sin ningún motivo? ¿por qué no la había matado cuando pudo? no se sabía pero en ese momento no era el momento de resolver esas preguntas, aun no...

Al día siguiente parecía como si a ella no le hubiera pasado nada grave, casi al punto de que parecía que no paso nada, todo se había cicatrizado rápido, lo cual extraño a su madre pero no a su padre; ya había visto eso en lobos jóvenes que iban a pasar a su primera transformación pero ¿la de su hija seria dentro de 3 años no? eso seguía creyendo el mientras la oída decir que se sentía mejor, más que bien de hecho. Todo se puso más claro a la hora del desayuno, Loreta era vegetariana desde que tenia uso de razón , cosa que sus padres respetaban pero ese día no negó ni el tocino ni los huevos fritos pero si la avena que usualmente come, eso le prendió el foco, ¿cómo fue tan tonto? el viejo truco de acelerar la fecha, un truco muy barato y desesperado en su opinión pero no parecía haber nada de malo en eso, su hija se veía radiante y sus ojos verdes tenían más luz que de costumbre como si ese ataque hubiera incrementado su belleza. Se hacía tarde, tomo sus cosas, se despidió de sus padres con un beso en la mejilla y corrió para lograr tomar el autobús

Al llegar, sus amigos, Peter y James la esperaban en la entrada del instituto hablando de cosas pendientes para el día, hasta de Peter capto el olor a pasto fresco y agujas de pino,su aroma favorito, que venia de Loreta que iba caminando hacia ellos, parecía aun mas hermosa que ayer en la tarde cuando se despidieron. En cambio James solo capto el aroma de un can, uno grande y alterado que tenia ganas de cazar a cualquier presa fácil y veía a su amiga un poco más fornida y con mirada violenta y una sensación penetrante de que algo cambio y no tenia que ser así pero ambos decidieron tratar de ignorar eso y pasar un día tranquilo

Ellos tampoco eran normales, Peter y James eran un licántropo y un vampiro respectivamente, el primero era un beta, sus ojos tanto como lobo que como humano eran color miel espesa, su tono de piel era oscura y su pelaje era negro con motas castañas claras y media unos 10 cm más alto de Loreta. James por su parte no era el típico estereotipo de vampiro emo y pálido; sino una alegre, valiente, rudo y con sed de justicia; su pelo pelirrojo y piel color canela lo hacían ver bien parecido junto a sus ojos azules como el mar, era fornido y un poco bajito en comparación a su familia pero eso no lo dejaba desventaja, más bien, todo lo contrario, se le hacia más fácil escabullirse.

El transcurso del día no fue la gran cosa, lo de siempre, estar 7 horas en un lugar que te hace preguntarte por qué estar viendo esto si jamas lo utilizare en la vida cotidiana, aguantar los regaños de maestros cincuentones que aparentemente disfrutan más eso que enseñarte algo que si importe, y si eres un "nerd" correr de los fantoches que intentan quitarte el dinero que llevaste para comprar algo decente a la hora del almuerzo. Todo normal hasta que Austin, uno de los amigos y "compañeros de ataúd" de James se acerco a Loreta con una invitación a salir esa noche a dar un paseo; él si se acercaba mucho a la pinta que todos piensan cuando mencionan la palabra "chupa sangre", piel pálida, iris de color pálida, pelo largo y de color oscura de vez en cuando una mirada de "soy mejor que cualquiera" que había adquirido hace unos meses atrás después de una excursión en Grecia junto a unos amigos y su hermana menor,y justo después de ese viaje James empezó a sentir algo oscuro que estaba dentro de su amigo pero no podía saber bien que era exactamente así que dejo el asunto de lado por un tiempo.

- No deberías ir -dijo de inmediato el pelirrojo cuando Austin se fue con aire de superioridad- ya no es de confiar

-Pero pensé que eran amigos

-Exacto, eramos, algo en el cambio cuando volvió de ese loco viaje -su mirada parecía mas sombría y su voz mas lúgubre al decir eso

Pese a las advertencias, esa noche a las 8, ella estaba yendo a la dirección que le habían indicado en un mensaje por el teléfono pero... algo parecía ir mal, ya que a donde había llegado era un local abandonado y sucio, no un café moderno y nuevo, o al menos no aun, es lo que ella quería creer pero sus esperanzas se esfumaron al oír que no era la única ahí, unas 3 personas junto con Austin entraron a la habitación donde ella estaba con pasamontañas, sogas y jeringas con lo que ella creyó que era un anestésico muy leve porque casi todos llevaban uno de esos, o bien la iban a secuestrar o no sabían cuanto necesitan para dormir la. Hasta donde logro ver, los encapuchados eran tan pálidos como Austin.

-Pensé que solo seriamos tu y yo... -dijo ella con cierto nerviosismo

-Pero pensé que entre mas mejor, ¿no chicos? -todos los encapuchados dieron una risa sombría que le erizo los pelos de la nuca, y la forma calmada y sombría en la que él hablaba no hacia que la situación fuera mejor- tal vez podríamos hablar como personas civilizadas

-Ir a una conversación con jeringuillas y sogas no parece civilizado, si esto es una broma, es una de humor demasiado negro para cualquiera, incluso para un... -se quedo sin voz en ese momento, creyendo que se daba cuenta de lo que pasaba- v-van a usarme como comida ¿no?

Oyó un par de risas y la sonrisa de engreído en la cara del chico pálido frente de ella la hizo pensar que no la iban a matar, eso intento calmarla un poco pero la duda aun seguía ahí. Ella sabía que eran vampiros gracias a James pero su comportamiento era más agresivo que del chupa sangre más hambriento, intento escapar pegando le al que tenia detrás en la entrepierna pero solo logro huir un par de cuadras hasta que la acorralaron en un callejón donde la única iluminación era la luz de la luna que poco a poco se iba llenando. Ya no sabía a quien acudir, los nervios no la dejaban tomar su celular para llamar por ayuda y no había nadie transitando cerca para poder gritar, estaba sola. Peleo con casi todos y hasta ella misma se sorprendió de que pudiera aguantar tanto, hasta que sintió el pinchazo en su ante brazo y el mundo se iba poniendo borroso a la vez que una voz le susurraba al oído

-Si que eres inquieta, ahora, solo duerme te lobita -y así sin más callo inconsciente.