El gran dilema entre Ser lesbiana o no. El Campamento, trata de una joven que tiene una vida cotidiana, y se junta con sus excompañeras del colegio en un campamento, allí reencuentra a su mejor amiga, con la cual perdió contacto y descubre que es l...
Al llegar al punto de reunión los chicos ya no tenían una camiseta azul, ahora era blanca, y estaban repartidos entre dos en la entrada del comedor, tres chicos asistiendo entre mesas, dos en vigilancia de la basura y el orden, seis dando el servicio de la comida y los demás dentro de la cocina. La Sra. Sentosqui estaba compartiendo con todas las mesas ofreciéndoles más comida y preguntando si les ha gustado la actividad de bienvenida, eran varias mesas colectivas, pero como algo común las líderes y sus integrantes se sentaban juntas, nosotras llegamos al comedor y precisamente quien nos dio la bienvenida fue el chico que me devolvió el bolígrafo en la bienvenida cuando se había caído al suelo.
- Buenas tardes chicas, bienvenidas al comedor, pueden ver que en el área de la izquierda están los platos, vasos y cucharas, y a la derecha la comida de su elección, recuerden que cada utensilio que utilicen tendrán que lavarlos ustedes mismas desde que terminen en el fregadero que está al fondo - y nos señaló la parte trasera del comedor.
En ese momento Diuk se puso delante de mí y le dio una sonrisa rápida al joven
- Mucho gusto cariño, soy la Srta. Bueno - y estira su mano para saludarlo con una sonrisa pícara nativa de ella. El chico parece que el gesto lo tomó por sorpresa, pero le respondió inmediatamente.
- Un placer Srta. Bueno, mi nombre es Matthew pero me pueden decir Matt y soy el líder de la zona este, cualquier duda pueden comunicármela.
- Ay gracias, que atento - aún mantiene Diuk su sonrisa - ¡Ah! Y ella son mis amigas y compañeras de cabaña, Isabel, Shannon, Indira, Robi... – dice señalándonos a cada uno de nosotras.
El joven da un paso delante he interrumpe a Diuk y se queda en frente de mi parado, me mira y sonríe
- Y... ¿Usted es?... - Yo me quedo callada mirándolo con cara de asombro, pero Diuk continúa diciendo - Y ella es nuestra líder, Lizet - y hace un gesto de incomodidad.
Matt me estira la mano y me dice:
- Fue un placer conocerte, espero poder hacerlo mejor – nos miramos unmomento en silencio y luego solté su mano
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Con una breve sonrisa y las gracias, decidimos entrar por fin al comedor. No tenía mucha hambre porque mi cabeza estaba centrada en todo menos en comida, pero decidí servirme un poco de arroz con guisantes. La comida fue bastante escandalosa, es como si todas las chicas se conciliaron para poder actualizarse la vida en el comedor. Yo mientras tanto, mendigaba un poco el arroz, mientras escuchaba a mis amigas hablar un poco de sus vidas.
Shannon nos comentaba que ya quería formar una familia, ansiaba tener su hija o hijo, lo que Dios le quisiera dar, pero que amaba a su esposo y quería ampliar la familia, por otra parte, y en un sentido contrario Diuk quería dedicarse al arte y farándula. Deseaba estudiar comunicación social y viajar por el mundo, quería sacarle todo el provecho a su aún mantenida juventud y su eterna soltería. Isabel, sin embargo, hablaba de ser la dueña de su propia empresa, se enfoca en trabajar duro, terminar su universidad y ser la primera en su familia en obtener un título, ese era como su deseo. Indira no opino mucho, aún pienso que sigue siendo muy reservada, pero con los tantos comentarios de Robelia y el futuro que tenía planeado para ella y su novio no bastaron más comentarios y yo me beneficie de ello. Solo asentaba de vez en cuando la cabeza confirmando lo que las chicas decían, mi vida no había cambiado nada desde el colegio y mi futuro estaba incierto, casi no pensaba en ello, solo sé que estudio en la universidad y eso es lo único que ocupa mi tiempo en casa, me dispuse a opinar lo más mínimo sobre mi vida hasta que sentí una mano en mi hombro.
- Sí que comes poco, con razón estás tan flaca - levante mi mirada lentamente y veo un aro plateado que brilla en mis ojos deslumbrándome un poco, y segundos después el rostro de Rocío sonriéndome parada junto a mí.
- Eh... si - y sonreí.
- Come algo, necesitas recuperar las energías perdidas de esta mañana - soltó una carcajada y me dio unas palmadas en el hombro mientras seguía caminando hacia el fregadero.
En ese momento mire a Isabel con la boca abierta, me tomo desprevenida, ella estaba sentada al lado de mi silla y me mira con un poco de misterio
– No, que no habían hablado casi, ¿Eh? - tomó su plato, su vaso y sucuchara y se fue hacer la fila al fregadero.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Yo comí lo más rápido que pude el poco arroz que tenía y me levanté brevemente de la silla, sin hacer mucho ruido, tratando de evitar a Ros hasta que pudiera hablar tranquila con ella.
Después de una mañana tan agitada y sorpresiva. El resto del día fue mucho más tranquilo. La tarde pasó rápido ya que estuvimos en la capilla haciendo actividades simples de conocimiento, donde todas nos presentamos por el nombre y apellido, a que nos dedicamos después de varios años y que aspiraban en un futuro, mi turno fue simple, me presente ante todos ignorando ser observada con especial atención por algunos, pero me centre en ser sencilla, como dije anteriormente, no me gusta ser el centro de atención.
Duramos casi hasta las 6:00 o 6:30 de la tarde entre conocimientos, conversaciones y reflexión, sentía como mis ojos se cerraban solos del cansancio. Nos dieron una hora de receso así que decidí ir a la cabaña a descansar un poco e Isabel y Shannon me acompañaron. Diuk quedo hablando con un chico de camiseta blanca de buen porte. Tenía un jean azul oscuro, era alto y un color de piel mestizo, su pelo bien arreglado y una imagen impecable. Una de las chicas me dijo que él era el líder de la zona central pero no quise hacer mucho énfasis en ello, lo que más quiero es evitar mal entendidos, así que me dispuse a seguir, cuando voltee de repente me choque con Robi que estaba hablando con Matt, le pedí disculpas pero intenté ignorarlos, sentía la mirada de Matthew clavada en mi espalda, aunque a lo lejos solo se escuchaba la voz de Robi decirle "... pero estás seguro que para acá no hay ningún sitio que tenga buena recepción, es que yo...." Ella y sus insistencias van a acabar poniendo locos a todos por aquí, solté una risa para mí, pero seguí caminando junto con las chicas hacia mi cabaña, en ese instante sonaron los megáfonos "Disfruten su hora de ocio chicas, a las ocho tendremos una fogata en la zona oeste, contamos con su presencia", yo iba asentando la cabeza en sinónimo de confirmación a lo que oía las instrucciones, pero solo tenía un deseo en ese momento, llegar a mi camarote y cerrar los ojos un momento... y así lo hice.
