Mi Príncipe de Hielo

Una Recepción complicada?

Dos pequeños ukes se habían levantado muy temprano, un pequeño uke de cabello verde había secuestrado a un lindo peliceleste algo adormilado, entrando a atracar la habitación de un malhumorado albino de ojos zafiro.
Kazemaru suspiro, sabia que Midorikawa despierto a las 7 am no era nada bueno, el peliverde se lanzo encima del albino tomándolo con ambas manos mientras le ponía una mordaza esquivando todos esos golpes y no recibir quejas, un rubio de largo cabello entro ayudándole con Suzuno sacándolo de ahí a rastras en completo silencio por la puerta trasera, Kazemaru solo miraba con algo de pena a los dos que sostenían al ojizafiro.
Terumi los metió a un carruaje muy amplio donde un pequeño peliplata y un pelirosa dormían abrazados entre algunos cojines para que no se movieran, Terumi se acerco besando la cabeza de su pequeño Atsuya

—bien yo iré a dejarlos al castillo de Endo, para que puedan arreglarse sin el gritón de Mamoru, el idiota de Haruya, el acosa shirous Shuuya Goenji y bueno Hiroto, felicidades Ryuuji tu novio no tiene apodo!!—sonrio Afuro arreglando su cabello de forma delicada

—Terumi, Hiroto no es un santo me costo mucho entenderlo— lloro Ryuuji con dramatismo causando que los demás rieran excepto Suzuno (esta amordazado ewe)

Terumi empezó a temer por sus vidas, Suzuno tenia un aura negra recorriendo su cuerpo, Kazemaru le quito la mordaza de forma lenta temiendo la reacción del peliblanco

—TRAVESTI MAL PARIDO!! REGRESAME A MI CAMA!! REMEDO DE DIVA!!—le grito dulcemente el tierno Suzuno que casi hace que choquen contra un árbol

—vamos gatito de Haruya no te enojes ni te pongas agresivo te vas a arrugar— sonrió Afuro sin saber que había abierto la caja de pandora con una simple palabra

Los ojos zafiro brillaron de forma cruel, Midorikawa sabia que ahí correría sangre y no se salvarían

—Terumi...—susurro Suzuno con voz queda y suave

—kazemaru ven...— Midorikawa jalo al peliceleste junto a los dos pequeños dormidos, ahí iba a arder y no precisamente en fuego

—si querido gatito— sonrio Afuro sin saber que su vida estaba peligrando

—si me vuelves a decir así te dejo calvo INTENTO DE MUJER BARATA!!— Suzuno descargo toda su ira golpeando al pobre rubio hasta que se canso regresando a su asiento después de dejarlo inconsciente

Con un rubio inconsciente, dos ukes traumados y dos dormidos llegaron al castillo, todos bajaron Atsuya ya se imaginaba lo que Afuro le pudo haber hecho al peliblanco, así que se lo llevo arrastrando sin importarle manchar el impecable y lindo traje blanco de su esposo, Suzuno y Midorikawa entraron hablando de helados y gatitos, Fubuki sonriendo tan lindo como siempre y Kazemaru guiándolos a todos en el frente.
Una mucama recibió con emoción al peliceleste indicándole una habitación donde se prepararía cuando llegara la hora de la boda

—estas nervioso— pregunto Shirou con un tono inocente y una mueca muy dulce

—demasiado no sabes cuanto, hoy unire mi vida con la persona que amo— rio el peliceleste con una dulce sonrisa y un sonrojo en los labios

Al entrar casi todos se van de espaldas, un lindo vestido de novia algo esponjado adornaba el centro, pero un sonrojo se apoderó de Suzuno y Ryuuji volteandose a los lados para no pensar en sus inminentes destinos, kazemaru se acerco con lentitud a su vestido para descolgarlo con suavidad

—veo que estas emocionado, te veras hermoso a Endo le va a encantar—sonrió Fubuki dandole una suave palmadita en su hombro como señal de apoyo

Suzuno camino.ya mas relajado hasta ponerse a la altura de un gran ventanal que estaba de frente se podia ver todo Raimon y era algo admirable, suspiro dejando ver una pequeña casi imperceptible sonrisa, era hermosa la forma en la que todo se planeaba para recibir a los proximos reyes
Sin embargo por otro lado una turba de semes alterados cortian por todo el castillo de Goenji ya que Endo estaba tan nervioso que no lo podian parar para poder ayudarlo con su arreglo personal, Haruya solo se reia del peli crema y el vampiro que seguian a un principe castaño en boxers