¿Yo? ¿Princesa? [EDITANDO]

Capítulo 3

Ahí estaba él, sentado, sonriendo y hablado con otros chicos. Nos regresó a ver.

- ¡¡Felix!! ¡¡Casey!!- se levantó y caminó hacia nosotros. Me puse nerviosa, a veces hablábamos, pero no cuando estaba sola. Cuando estaba con Felix nos poníamos a hablar hasta que toqué el timbre para entrar a las respectivas clases.

- ¡Hola, Oscar!- saludó Felix mientras lo abraza, a veces pensaba que los dos son gays, pero luego me acordaba de que Oscar se besó con una chica y que tenía novia, y se me pasaba

Sí. Oscar tenía una novia llamada Michell, para él era la mejor, pero todo término porque ella lo engaño con otro chico, pobre Oscar.

- ¡Casey!- mientras se acerca para abrazarme. ¡¡OMG!! ¡¡OMG!! ¡CÁLMATE CASEY!

- Hola Oscar- dije mientras me abraza fuertemente, era más alto que yo, tal vez por unos 15 o 17 centímetros y eso realmente me encantaba.

- ¿Cómo estas? ¡Que linda estás hoy!- comentó mientras se separaba y me miraba con su hermosa y perfecta sonrisa, por a fuera podía lucir normal, tal vez con un pequeño rubor, pero por dentro me estaba derritiendo.

- Gracias, estoy bien y ¿tú?

- Muy bien. ¡Es genial verte de nuevo!- exclamó con felicidad.

- ¡¡¡Wiiiii!!! ¡Se gustan! ¡Se quieren! ¡Son novios!- comenzó a decir Felix interrumpiendo el mágico momento.

- ¡Felix!- espeté un poco molesta. ¿Y a este qué le pasaba? A Oscar no le gustaba, ¿Qué parte no entendía?

- ¡Es que Oscar si te quiere!- soltó Felix mirando a Oscar.

- ¡Ya basta Felix, si te lo conté fue para que no me estuvieras molestando con eso. Y al parecer no lo entendíste, no debías contarselo!- le respondió Oscar muy molesto, se fué furioso. Lo pensé unos minutos, ¿realmente Oscar me quería?, por una parte si se lo contó a Felix significaba que era cierto y cualquier otro chico se hubiera defendido y no se hubiera ido.

- ¡Espera! ¡Oscar!- salí gritando detrás de él.

-Casey...yo...- respondió mirando al piso. Me acerqué más a él y lo miré fijamente a los ojos, esos hermosos ojos azules que me gustaban tanto, dejé de pensar en eso y me enfonqué en mi pregunta.

- ¿Es verdad?... O sea que tú me...

- Sí Casey, me gustas, te quiero, pero no era capaz de decirtelo.

- Pero ¿Cómo? De todas esas chicas rubias y con ojos azules, ¿me escojiste a mi?

- Es que tú eres especial, eres única, ¿Has visto a otra chica como tú en toda la prepa? Pues, yo no. Yo solo me he fijado en ti. ¿Te has dado cuenta de que solo tú me haces reir a carcajadas? Sabes, he tenído a varias chicas que me han querido, pero ahora que lo entiendo, no se trata de tener a muchas si no a una que te haga sentir que es suficiente con ella, y así me siento cuando estoy contigo.

Me quedé atónita, se me comenzó a acercar. Era tan lindo, si de lejos lo era, ¿Se imaginan de cerca? De muy cerca.

- A mi también me gustas. - confesé en voz baja. Mi sueño se estaba cumpliendo. Él me queríay yo a él. Sentí ganas de llorar de la emoción.

- ¿De verdad? pero si yo no soy especial, soy como cualquier chico de San Francisco.

- Pues para mi no, eres el chico más radiante que he visto, y puede que suene ridículo, pero es verdad...- sentí su respiración tan cerca de la mía y estaba a punto de cerrar los ojos.

- ¡AJAM! ¡Los atrapé! pero ya es hora de ir a clases- apareció Felix de la nada haciendo que se me pusiera la piel de gallina y me alejara de golpe de Oscar.