Recuerdo que dolía, verla dolía.
Dolía la manera en la que miraba a su alrededor ida y sin percatarse de todas las personas que estaban a su alrededor aunque no era muchas. Ella solo pensaba en el, en su estúpida y brillante risa, en sus estúpidos y perfectos ojos brillantes, mientras pasaban miles de cosas ella no podía notarlas pues estaba perdida en el vaivén de su ser, de el completamente de el y de su ser perfeccionista ante sus ojos mismos, ella no notaba cuanta gente perdía, ella no notaba tan cual sola quedaba aunque era una de las pocas cosas que le importaba porque de las personas que seguía rodeada sabia que la valoraban, que su presencia era por querer y no por tener.
Sabia que era tiempo de sacarlo de su mente, de ella, pero no lo hacía, maldita fuerza de voluntad que tenia. Aun lo amaba, pero ¿por qué lo amaba? No es posible amar a una persona que hace todo por destruirte, a una persona que hace todo por destruirte. Como amar a una persona que te destruye y tu misma lo ayudas a ello.
Ser ella dolía, verla vulnerable dolía pero no tanto como ella lo sentía, no tanto como en la profundidad de su dolor proveniente de las palpitaciones rotas y destruidas de su corazón.
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Cartas a un amor
عشوائيQuerido amor. Hoy te mostraré todas esas cartas qué no sabias de su existencia y los momentos en los que suelo recordarte a cada detalle, por miedo a lo que ayer nos unia hoy ya no exista ni la mínima parte. Te preguntarás ¿Por qué hasta ahora? pue...
