Yo bajo a comer y durante todo el rato no se oye ninguna voz, no me decidía a decirle algo a mi madre o no, no me atrevía a romper ese silencio tan profundo...
Mi madre: Te has hecho ya las maletas?
Yo: Si hija si...
Las dos semanas que faltan para que nos mudemos pasan súper rápido, gracias a dios las cosas ya no están tan tensas como antes.
El camino es bastante largo pero yo me pongo la radio y se me hace más corto. Paremos para comer y me lo pase bastante bien, la verdad, no sé qué hacía hay en medio de la carretera un restaurante así.
A partir de ahí, por el camino, me quedo durmiendo hasta que llegamos a mi supuesto nuevo barrio, es bastante bonito, por la calle hay bastantes chicos y chicas de mi edad, no creo que me cueste mucho hacer amigos.
Llevo todo el camino pensando en cómo me voy a presentar, en si será guapo o no el novio de mi madre, en si tendrá hijos o no... Yo quiero una hermanita pequeña, bueno aunque sea hermanito, me da igual, solo quiero a alguien con quien pasar tiempo y jugar.
Bueno, llegamos a mi nueva casa, no es como me la esperaba, es bastante parecida a mi antigua casa, hasta es del mismo color por fuera, blanca y azul.
La cosa es que no me apetecía nada de nada ver al novio de mi madre, a ese al que me iban a obligar a llamar ''papa''.
*bajamos del coche*
Mi madre: Cariño, no vamos a bajar todas las cajas hoy, estoy muy casada.
Yo: Vale mama.
Mi madre abrió la puerta de la casa y ahí estaba su novio, ese que no había visto en la vida.
Y en una de las esquinas del comedor principal, en el suelo, había un chico sentado con las rodillas pegadas al pecho, con la capucha puesta y con los auriculares puestos. Llevaba puesto una sudadera roja que le venía bastante grande y unos vaqueos negros bastantes ajustados.
De la capucha le salía el típico peinado que se echan la parte de arriba del pelo que es la más larga para atrás.
Bueno a lo que íbamos, el estaba ahí y yo no sabía si era el hijo o el ayudante del de la mudanza del novio de mi madre o yo que se.
ESTÁS LEYENDO
''Así soy yo''
RandomBueno yo os voy a contar la historia de Susana, una chica alta, un poco delgada, de ojos y pelo marrones oscuros. Ella es una chica a la que por desgracia le toca mudarse, a muchos les a pasado, es algo normal en esta vida.