Es invierno, los copos de nieve terminan por envolver la escuela y las calles, con pasos lentos y aburridos te diriges rumbo a otro maldito día de escuela, tu paso es lento, aburrido y sin ganas, llevas la cabeza gacha, pues prefieres no encontrarte con nadie en tu camino hasta poder llegar al destino predicho.
Tu nombre es Craig Tucker, tu cabello negro azabache y tu piel pálida son lo que te hacen resaltar aunque lo odies, tus ojos azul grisáceo son tan simples, que llaman la atención, eres delgado, casi pareces enfermo, aunque sabes que estas perfecto de salud. . .bueno, casi.
Estas a metros de llegar al maldito destino, sueltas un suspiro aliviado, pensando que la mañana va demasiado bien para ser real, formas una mueca de alivio, y justo cuando estas por atravesar la puerta,unos cuantos pasos detienen el tuyo, levantas la mirada pensando en que rayos has hecho para merecer tal castigo, justo cuando pones los ojos en frente, te encuentras con quien menos quieres, si, te encuentras frente al rubio más molesto de todo el pueblo.
-Asi que pensabas entrar sin darme un beso de saludo ¿eh? -
Dijo aquel chico de cabello oro que tanto te saca de quicio, mejor conocido como Kenny, Kenny McCormick.
A respuesta de aquello, simplemente rodaste los ojos intentando no dirigirle la palabra, y seguiste tu camino aún cuando tenias al rubio entrometido pegado como sanguijuela a ti.
El primer timbre sonó, dando a entender que al fin, luego de tanto hayas llegado a tiempo, cosa extraña pero cierta, sin embargo hay un examen y no piensas entrar sólo para ver un reprobado, prefieres un ausente o una tardanza, cuando lograste liberarte del rubio molesto, te diriges hacia el patio, sacando una caja de cigarrillos del interior de tu desgastada mochila negra, estabas a punto de fumar un buen rato hasta que logras escuchar unos cuantos gritos y molestos chillidos, normalmente no te incumben lo que hagan los demás, pero al escuchar de forma insultante "Maldito judío canadiense", era lo que te había llamado la atención, al menos un poco.
Te asomaste a ver que sucedía, y te encontraste algo cruel, bastante para ser hecho por niños.
El menor de los Broflovski se encontraba en el suelo, atado a un árbol, con el torso descubierto, y en la frente y pecho un montón de insultos escritos, mientras los niños y niñas gritaban como si se tratara de un maldito show.
No podías dejar eso así, no porque te interesara él pelinegro, sino que estaba seguro que el Broflovski no merecía aquél trato de mierda.
Apareciste casi de la nada, con tu aura temible y demás, lograste intimidar a los pubertos haciendo que huyeran como los maricas que eran, luego de ello, posaste tu mirada en el menor, quien se encontraba temblando como gelatina, rápidamente te agachaste, sacaste una navaja del interior de una de tus botas, notaste como el niño Broflovski se asustaba, pero simplemente intentaste calmarlo con la mirada, cosa que quizá no haya salido demasiado bien, luego de desatarle, notaste como intentaba cohibirse en sus propios brazos, se veía bastante miserable e incluso logró darte algo de pena, por lo que te quitaste con cuidado el abrigo y se lo colocaste encima de sus desnudos hombros, este te miró incrédulo, por lo que decidiste hablar.
- Devuelvemela cuando tengas algo con que abrigarte.- Usaste el tono más comprensivo que pudiste pero fue casi imposible, tu tono de voz es monótono y desinteresado.
Estabas casi por irte hasta que escuchaste la suave voz del menor llamándote
-Gracias Craig. - Musitó en un tono casi inaudible y solo negaste dando entender que no había problema, pero el menor también negó, y prosiguió a hablar.
-No, enserio gracias, pudieron matarme o dejarme morir de hipotermia si tu no hubieras llegado, eres algo así como un héroe. . . - Escuchaste decir al niño, frunciste un poco el ceño ¿Tu un héroe? Inventense otra, porque es imposible que vayas a creerte ésa.
Negaste rotundo, tomando la palabra.
-Yo no soy ningún héroe, casualmente estuve en un lugar donde te estaban atacando, cualquiera en mi lugar te hubiera ayudado. -Musitaste lo mas serio que tu voz lo permitía.
Viste al niño reír levemente ¿y de que carajos reía? La verdad no tenías idea, solo sabias que te molestaba, "las risas infantiles son tan molestas" piensas.
El niño tomo lugar a levantarse y despedirte de ti con una sonrisa amigable, la cual respondiste con una mueca de molestia y seguiste tu camino.
Decidiste dejar el lugar, buscando algún otro mas tranquilo, procurando no meterte en más situaciones molestas.
Lo que tu, Craig Tucker, desconocías, era que el pequeño Ike Broflovski tenía un apodo nuevo para ti, ya no sólo eras simplemente "Craig Tucker", para Ike eras "Craig Tucker, my hero".
N/A: Bueno, hola(?). Espero les guste este fic, es el primero subido a la red de mi autoría , se que está medio deforme, por lo que espero no sean duros conmigo, soy medio retrasada (?), en fin, es una pareja por así decirlo. . .Crack, supongo que ya se dieron cuenta cual es 6u6
Pensaba hacerlo un One-Shot, pero juzgando a que escribi muy poco, lo haré un Two-Shot o más, no sé (?).
Bueno, bye, bye. <3 ~
-Alex.
