Hola a todos!!!
Les agradezco sus votos. Este capítulo es un poco más corto, pero el día fue algo largo además que se fue la luz dos veces...
En fin, espero les guste, y si es así, voten por favor.
Ya saben, Gravity Falls NO me pertenece.
Capítulo II: Chantaje
El baile terminó y ambos chicos se dieron una pequeña reverencia, pero el chico no soltó la mano de Dipper.
-Quizá quieras venir un momento. El rey dará su anuncio en un rato.
El castaño no entendió a lo que el rubio se refería pero éste no le dio tiempo de pensar, pues lo jaló de la mano y se lo llevó al balcón donde estaba el rey.
-¿Qué? -Dipper miró hacia la pista de baile y luego al joven. -¿Eres tú el príncipe Will?
Dipper comenzó a respirar apresuradamente. El otro chico soltó una carcajada y comenzó a acercarse a Dipper. El castaño comenzó a retroceder asustado, pero eso sólo incitaba al otro a acorralarlo en una pared, si no fuese porque alguien los interrumpió.
-¡Bill! -Ambos voltearon hacia el lugar de donde provenía esa voz y era el rey Stanford que los miraba con sus manos en su espalda y su porte elegante. -Compórtate.
Bill tomó una distancia respetable de Dipper, mientras éste los miraba al rey y al rubio incrédulo. -¿Tu nombre es Bill? -Quizá escuchó mal.
-Que conste que yo no rompí la regla, padre. -Dijo Bill volteando medio cuerpo para mirar a Stanford, el cual seguía mirando hacia abajo en la pista de baile. Luego rodó sus ojos. Bill volteó de nuevo hacia Dipper. -Sí, mi nombre es Bill, pero ahora que sabes eso, no puedes bajar.
Bill sonreía de una manera que no parecía molestarle los eventos, sino que los estaba disfrutando.
-No pensaba bajar. -Bueno, ahora que sabía que era Bill y no Will, Dipper se sentía más tranquilo. Luego miró al rey que los ignoraba y otra vez a Bill. -¿Lo llamaste padre? ¿El rey es tu padre? -Preguntó el castaño tartamudeando.
-Sí. Aunque al que le hicieron este baile para buscarle marido no fue a mí. -Dijo mirando hacia un lado, pero luego miró a Dipper poniendo una sonrisa de lado. -Aunque tampoco me molestaría si lo encontrase.
El castaño se sonrojó. Siendo sincero consigo mismo, se sentía más cómodo con ese rubio (aunque era demasiado confianzudo) que con su prometida, la cual últimamente estaba algo neurótica.
-¿Dónde estará Will?
Decía Ford en tono impaciente y zapateando su pie izquierdo. Parecía un poquito molesto.
-No sé... nos obligaste a usar máscaras. -Dijo Bill poniendo sus manos en su espalda y mirando hacia la pista tal como Stanford, Dipper se puso a su lado mirando extrañado todo. -Sin mencionar que lo obligaste a pintarse el pelo de castaño.
-Su pelo original es demasiado llamativo. -Dijo Ford serio. -Además, ese tinte se quita con el agua. -Comentó restándole importancia.
Pasaron unos pocos minutos cuando un chico ligeramente más alto que Bill hizo acto de presencia jadeando. -Perdón el retraso.
-¿Y tu acompañante? -Preguntó Ford sin interés en que Will estaba cansado.
-Padre... -Dijo con cierto miedo. -N-no encontré a alguien... -jugó con sus dedos mirando hacia abajo. -más bien... nadie se acercó a mí y y-yo...
Will era demasiado tímido. Ford suspiró con cansancio. Mejor Bill encontró a alguien. El rey pasó una mano por su cara.
-Bueno... supongo que no hay otra opción... casi es media noche... -Ford puso su mano en el punto de su nariz frotándolo. -Daré por terminado el baile...
Miró nuevamente hacia el salón y habló en voz alta.
-¡Gracias por asistir, mis queridos súbditos! Me encantaría decir que este baile fue un éxito, les agradezco sus atenciones y que a pesar de ser algo repentino, hicieran un espacio para venir a este, su castillo.
Ford empezó con su discurso donde Dipper sólo fingía escuchar. Cuando terminó, se escucharon aplausos y como la gente se dispersaba para irse o se despedían. El chico notó que Will estaba en una parte del balcón donde los demás invitados no podían verlo. Dipper se dio la media vuelta para irse, cuando una mano lo sostuvo de su muñeca.
-¿A dónde crees que vas?
Dijo Bill acercándose al oído de Dipper. El castaño sintió como los cabellos de su nuca se erizaban.
-Eh... yo...
Bill tomó a Dipper de la cintura, y como ya los invitados habían sido desalojados del castillo, podía hacer todo el escándalo que se le diera la gana. Alzó su brazo libre para llamar más la atención. -¡Padre! ¡Will! ¡Él será mi esposo: Dipper Pines!
-¡¿QUÉ?! -Preguntaron los otros tres impresionados y sin entender, aunque Ford parecía más tranquilo.
-Sí, él será mi Pino.
Dijo ahora abrazando completamente a Dipper, el cual trataba de separarse. ¿Casarse? Apenas se conocían, además él ya estaba prometido.
-¿Por lo menos ya le preguntaste si quiere? -Dijo Ford mirando las reacciones de Dipper atentamente.
-Tres meses. -Dijo Bill mirando a Ford pero sin soltar a Dipper. -Dame tres meses para que acepte, si es así, nos casaremos.
-¿Y si no? -Preguntó Dipper logrando zafar un brazo.
-Te dejo libre. ¿Te parece, Pino? -Contestó Bill extendiendo su mano a la que Dipper había zafado. El castaño lo miró confundido. -Es para sellar nuestro trato. Dipper lo pensó pero se dio cuenta que no tenía opción. Estrechó la mano de Bill, el cual sonrió con algo de malicia. -Bien. Te llevaré a tu habitación. -Dijo cargándolo como saco de papas.
-Espera, ¿Qué? -Dipper empezó a patalear el pecho de Bill y golpear su espalda, pero parecía no surtir efecto en el rubio. -¡Bájame! ¡Bill! -Y parecía ser que ni Ford ni Will tenían pensado intervenir, pues se limitaban a mirar la escena. -¡Por lo menos déjame despedir de...!
Bill se detuvo en seco. -¿De quién, Pino? -Dipper creyó que era su imaginación, pero, ¿Acaso notó un pequeño rastro de celos en esa voz?
-De... ¡Mi prima! Sí... mi prima...
Bill hizo un gesto de disgusto. -Pues supongo. -El rubio bajó a Dipper y ordenó a un guardia escoltar a Dipper. Cuando éste logró divisar entre los pocos que quedaban afuera del castillo a Wendy, se acercó corriendo a la reja, pues ésta estaba ya cerrada.
-¡Wendy!
-¡Dipper! -Dijo ella acercándose corriendo también. -¿Qué pasó? ¿Por qué sigues adentro?
Ya ninguno de los dos traía el antifaz puesto. Dipper volteó a los lados para ver si nadie lo escuchaba, y habló en voz baja.
-Se fijó en mí el hermano del príncipe. Se quiere casar conmigo y debo quedarme aquí tres meses.
-Bien hecho. No es el premio gordo, pero es una oportunidad.
Dijo Wendy con una mirada que aterrorizó a Dipper.
-¿De qué hablas?
-Si el que se fijó en ti, es hermano del príncipe, si matas al príncipe y te casas con el otro, serás rey, luego lo matas y te casarás conmigo.
-¿Qué? -Dipper retrocedió asustado. -¡No haré eso!
Wendy jaló a Dipper de la camisa encarándolo.
-¡Lo harás! ¡Si no, divulgaré que todo esto fue plan tuyo!
-¡¿Qué?! ¡No tienes pruebas!
Wendy sonrió con suficiencia.
-Todos aquí se creen todo. Además, con ponerles una carita y fingir ser una víctima tuya me creerán. Haz lo que digo.
Dipper se asustó, pues eso era cierto. Bajó la cabeza derrotado por el momento, ya pensaría algo.
-Bien... lo haré.
Wendy sonrió. -Te mandaré mis órdenes por medio de cartas.
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Después de la media noche (BillDip)
FanficDipper y Wendy han sido invitados a un baile para encontrar un cónyuge para Will Cipher. Wendy prepara una trampa para obtener el reino, matando a su heredero. Ella fuerza a Dipper a competir por el corazón del príncipe, pero el castaño se enamora d...