Mayo.
- Muy bien. Sophie. Pasaste – Dice Clara cuando termino la prueba.
Todos aplauden sorprendidos por la demostración. Supere a Sara que tenía la mejor calificación del grupo.
Cuando llego a mi puesto Anthony me coge en volandas y me hace girar en un abrazo.
- Felicidades – me dice al dejarme en el suelo.
- Gracias – digo después de la impresión.
Todos rinden la prueba con éxito y Clara nos deja libres para descansar.
Me siento en la banca como de costumbre y cierro los ojos apoyando la cabeza atrás.
- Toma.
Abro los y veo a Anthony que me tiende un refresco.
- Gracias, pero... - niega con la cabeza y me callo.
- No te preocupes – se sienta a mi lado y bebemos de nuestros refrescos.
Me siento mal. Anthony siempre me da un refresco cuando salimos de clases de Clara. Él insiste en que no me preocupe, pero igual yo puedo pagarme un refresco. Él siempre me invita
- Hoy llegare algo más tarde – me informa Alma – tengo una clase que cubrir. ¿Estarás bien sola?
- Si. No te preocupes – la tranquilizo.
Todos se preocupan por mí, más de lo que yo estimo conveniente, pero no puedo hacer nada para remediarlo.
A las dos horas que Alma suele llegar, entro en la casa. No sé qué hacer. Me quedo en la sala de estar y prendo el televisor.
Estoy media hora mirando la pantalla sin ver nada en realidad. Hay algo que me está inquietando y no sé que es.
Me levanto y camino por la planta completa. Sé que hay algo, mi sexto sentido, por llamarlo de alguna manera, me tiene así de inquieta.
Cierro los ojos y me dejo guiar por lo que siento. Con las manos voy tocándolas cosas para no caerme y doy de frente con algo antes de golpearme con él.
- la repisa – murmuro.
Pero no tengo tiempo de averiguar algo más. Escucho la puerta del auto de Alma cerrarse.
Corro, sin hacer ruido, a la cocina y llego a tiempo.
- Sophie, llegue.
- Hola – le digo apareciendo con un vaso con agua.
- ¿aburrida? – pregunta dejando las llaves en una bandeja cerca de la puerta.
- Estoy viendo la televisión.
Ella mira y veo que dan una película de comedia. Asiente y dice que luego tendrá la cena.
La veo desaparecer hacia su cuarto.
Cuando escucho su puerta cerrarse, suelto el aire de mis pulmones. Me quedo mirando la repisa que está en el comedor.
Alma se da cuenta de que me encuentro extraña, pero le digo que debe de ser por la prueba del día que me dejo así.
El fin de semana no puedo hacer nada con la repisa. Alma pasa todo el día en casa observándome. Trato de aparenta la normalidad con la que llegue y resulta.
El viernes siguiente, ella me dice que tiene que cubrir a una amiga y llegara tarde.
A la hora que se va, aprovecho para ver la repisa.
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Mi Destino: Escrito desde el inicio
FantasíaDespués de que Sophie descubre la verdad de su mundo, se enfrentara pero de manera diferente. Tendrá que buscar por su propia cuenta la verdad que se oculta desde los principios de los tiempos. Lo que no sabe es que hay alguien más detrás del pode...