Estoy a punto de estallar, quiero llorar, quiero saber qué hacer porque aunque todo es bastante obvio aún no sé si me llegues a querer.
A veces me hablas, me abrazas, me das esos pequeños besos que sabes qué me encantan y algunas otras veces creo que no te importa, me dejas ahí con el corazón en mis manos y un montón de dudas en mi cabeza.