[DaeJae] "Conociendo El Amor"

Un desenlace inesperado

No lo aceptaría, no dejaría que mis padres decidieran lo que haría. No me casaría con otra persona que no fuese mi dulce YoungJae. Mi padre me miraba con superioridad, mi madre solo con lástima, sabía que ella no podía hacer más que apoyar a mi padre. Pero no podría doblegarme, no dejaría que me diera órdenes nuevamente.

Tenía que pensar con más inteligencia, mi padre era un hombre muy frio y calculador, debía estar un paso adelante o sino sería una víctima más de sus autoritarias decisiones.

-No tengo tiempo de pensar en algo así ahora, soy joven. -afirmé intentando no desafiar a mi padre con la mirada, sabía lo mucho que le molestaba cuando la gente intentaba darle la contra. Mi plan era tener mas tiempo para evitar un matrimonio que no quería.

-Se que eres joven hijo mío, mi única sugerencia es que te comprometieras de una vez. -dijo mirándome con la ceja levantada. Su palabra "sugerencia" me hizo reír, era demasiado obvio que era una orden, aun así debía buscar más posibilidades para safarme de que la situación.

-Ahora estoy muy ocupado, claro que lo consideraré después de que la empresa sea la líder en Corea -le dedique una pequeña sonrisa, y noté que sus hombros se relajaron.

-Hijo, eso va a llevar tiempo, ambos lo sabemos. -mi padre sin duda alguna no era un tonto, me dedico una sonrisa sarcástica.

-Padre déjame divertirme un poco antes de comprometerme, sabes a lo que me refiero -al parecer aquello lo convenció.

-lo comprendo -dijo y se levanto con elegancia, mi madre lo siguió y sostuvo uno de sus brazos, se despidieron y salieron de mi oficina.

Suspire aliviado, por ahora estaba a salvo.

Trate de ponerme en contacto con YoungJae después de aquella reunión con mis padres, no me contestó. Quizá estaba en su trabajo o en la universidad pasando clases, tal vez no traía el móvil.

Comencé a ponerme nervioso después de la cuarta llamada que YoungJae no contestaba. Trate de distraerme con el papeleo de la empresa pero nada quitaba la preocupación que sentía por YoungJae en ese momento.

Pensé en buscarlo, pero luego considerando mejor la situación comprendí que lo mejor sería esperar.

YoungJae me llamó unos minutos después, atendí prácticamente desesperado.

-¿Estas bien? -pude escuchar la melodiosa risa de mi pequeño del otro lado.

-Claro que si, lamento no haber contestado, estaba haciendo un trabajo -dijo divertido por mi notoria preocupación.

-Me preocupo mucho por ti...-dije en tono cariñoso, me gustaba hablarle así. YoungJae era tan hermoso, realmente lo amaba demasiado.

-¿Porque llamaste Dae? -eso era lo que siempre pasaba, cuando trataba de ser cariñoso o insinuar algo él evitaba a toda costa el tema.

-Solo quería escucharte -no dejaría que YoungJae volviera a evadir mi amor como lo había hecho todo el tiempo.

Se quedó unos segundos en silencio, me imagine a un sonrojado YoungJae, sonreí con solo pensar en aquella imagen.

-Debería colgar, me haces perder el tiempo y tu pierdes el tuyo. -afirmó con demasiada seriedad, tanta que me hizo sonreír como un idiota.

-¿Perder el tiempo?, eso nunca si se trata de ti -dije claramente.

-Dae ya debo entrar a clase, adiós. -dijo de repente.

-Cuídate porfavor, te amo. -YoungJae no dijo nada y colgó. Había escuchado lo que le había dicho y hasta podía jurar que se había puesto nervioso.