☾ Werewolf • Derek Hale

uno. ☾

Lynn
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Hoy, sabado 12 de Mayo, porfin podré ver a mi hermano mellizo Scott.
No lo veo desde que tenia 2 años, cuando mi padre se fue de casa me llevó con él, y Scott se quedó con mamá.
Hace tiempo, ella me mando el número de telefono de mi hermano por mensaje así que hemos mantenido el contacto por videollamadas, aunque estas no nos han dejado saber gran cosa el uno del otro.
De verdad tenia muchas ganas de ver a Scott y a mamá, y aunque no sabía que me depararía este encuentro, no puedo esperar a volver a vivir con ellos.

Al bajar del avión junto con mi padre cogimos un taxi para dirigirnos hacia mi nueva casa.
Tardamos 30 minutos hasta llegar a Beacon Hills y la verdad que se veía todo bastante acogedor.
Mi papá le pagó al taxista y luego sacó las 3 maletas que llevabamos.
Me coloqué mi mochila en la espalda, cogí mi maleta y esperé a que mi padre cogiera las otras dos.
Ya listos, el me dirigió hacia la casa y una vez allí toqué el timbre.
No tardó más de 3 segundos y un chico de mi edad muy parecido a mi me abrió la puerta, al instante supe que era mi hermano.
En ese momento nada me importaba, así que deje la maleta y corrí a los brazos de mi hermano a abrazarlo.

-¡Scott!-lo abracé como nunca había abrazado a nadie, no queria soltarlo, no despues de haber estado desde los 2 años separados.
No lo pude evitar y me puse a llorar, y pude notar como él tambien derramaba algunas lágrimas.

-Tanto tiempo, te prometo que nunca mas te irás de esta casa.-me dijo en tono cariñoso.

-Te quiero hermanito.

-Yo también.

Vi como la silueta de una mujer nos miraba con ternura desde dentro de la casa.

-¡Mamá!

-Mi princesa, como has crecido-me dijo abrazandome.

-Te quiero mami.-le dije dandole un beso en la mejilla.

-Y yo a ti cielo.

Después de ese emotivo momento, mi hermano y mi madre saludaron a mi padre.

-Ven te enseñaré tu habitación, está al lado de la mia.-me dijo mi hermano cogiendome de la mano.

Subí las escaleras junto a el, y me llevó hasta una habitación espaciosa, con una cama en la esquina, tenía mi armario al otro lado y un tocador para poner mi maquillaje. Y justo en frente, el escritorio junto una gran ventana.
La habitación era de un color azul marino que me encantaba y los muebles eran de madera oscura.
Estaba sencillamente decorada con algunas fotos de mi hermano y yo con a penas 2 años y algunas con mi madre y mi padre de pequeña.

-¿Te gusta? Tampoco la queria decorar mucho, pensé que lo querrias hacer tu misma cuando llegaras, para colgar fotos de tus antiguos amigos y los que hagas aquí-me dijo mi hermano.

-Es perfecta, me encanta.- le dije con una sonrisa, a lo que el también me sonrió.

De repente sonó el telefono de mi hermano, y me dijo:

-Te dejo que te instales, yo de mientras voy a contestar, vuelvo en un rato.

Oí como hablaba con un tal Stiles, y sobre un tal Derek.
Pero dejé de escuchar y me puse a meter mi ropa en el armario y mi maquillaje en el tocador.

Cuando acabé con todo me puse un rato a mirar mi movil y a enviar algunos mensajes.
Pero entró Scott a mi habitación al poco rato.

-¿Quieres ir a cenar a mi restaurante favorito y al de mamá? Ella dice que nuestra primera cena después de tanto tiempo separados ha de ser especial.

-Claro.-le contesté poniendome en pie con una sonrisa.

Y después de tanto tiempo, sentí que volviamos a estar los cuatro juntos, juntos como una familia de verdad.

Scott
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Durante el camino hacia el restaurante pensé en como contarle a mi hermana sobre el mundo sobrenatural, porque tenia muy claro que no le iba a mentir.

-¿En que tanto piensas?-me preguntó mi hermana.

-En nada-le dije sonriendo para tranquilizarla-te he de contar muchas cosas.

-¿Ah si?¿Alguna chica?-me miró riendo.

Lo que quedaba de camino nos la pasamos riendo y haciendonos bromas entre nosotros. La verdad, ahora me sentia mejor teniendo a mi hermana al lado, la había estado esperando por demasiado tiempo. Siento que ademas de mi hermana, será también mi fiel confidente a la que le podré contar todos mis problemas.

Entramos al restaurante con mis padres atrás nuestro, y nos sentamos en una mesa libre que había en una esquina al lado de un gran ventanal.

-Scott y yo siempre venimos aquí cuando celebramos algo, os aseguramos que os va a encantar-dijo mamá.

Después de haber pedido la comida me empezó a sonar el telefono.

-Lo siento he de cogerlo, es Stiles, enseguida vuelvo.

-Tranquilo, ve.-dijo mi padre.

Salí fuera del restaurante y le dí a contestar.

-¿Scott?

-Sí, soy yo ¿Que pasa Stiles?

-Pasa que se te habia olvidado mencionar el pequeño detalle de que tenias una hermana melliza, pero tranquilo, era algo insignificante.-me dijo en tono sarcástico.

-Espera...¿Nunca te lo habia dicho?

-¡Joder, no!

-¿Y como te has enterado?

-Me lo ha contado mi padre.

-¿Y él como lo sabe?

-Se lo dijo tu madre...¡Bueno, oye! También te he llamado por Derek.

-¿Que le pasa a Derek?

-Esto es Beacon Hills, ¿Qué no le pasaría a Derek?-la verdad es que tenia toda la razón.

-Stiles...

-Bien, bien...Dice que ha estado teniendo visiones extrañas donde unas especies de tigres blancos con ojos violetas entrenaban en su loft y se llevaban un colgante que el nunca ha visto.

-¿Tigres blancos?

-Sí, una cosa más para añadir a mi lista de "Seres potencialmente peligrosos que podrían arrancarme la cabeza".

-Tendremos que preguntarle a Deaton si sabe algo sobre esos seres, pero ahora no puedo hablar, estoy en el restaurante con mi hermana. Me estan esperando.

-Esta bien, por cierto, Derek me dijo que tenia que hablar contigo, que cuando pudieras le llamaras.

-De acuerdo, le llamaré más tarde, adiós.

Colgué la llamada, y sinceramente, ahora mismo solo queria recuperar el tiempo perdido con mi hermana y no preocuparme por nada más.

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