Después del beso...
Estudio de María
_ Menos mal aquí tenemos ropa, toallas y todo lo necesario para podernos secar, por lo mismo de las fotos que se toman. – Dijo María, entregando una toalla y una camisa a Esteban que entraba al baño del estudio.
Ella también se fue a cambiar al baño de su oficina. Cuando regresó en busca de Esteban, se encontraron en medio del estudio. Se quedaron mirando sin decir palabra. María fue quien habló primero después de un corto silencio.
_ ¿No tendrás problema en tu trabajo por tardarte con las fotos? – Estas palabras eran de alguna manera el regreso a la realidad.
_ No importa. Lo que acaba de pasar es mucho más importante. – Esteban no quería ni podía irse.
_ No sé qué me paso, no lo entiendo, que pensarás de mí, no suelo hacer esto con mis clientes. – Dijo María un poco nerviosa.
_ ¡No! Por favor no pienso nada de ti, no sentiste lo que paso entre nosotros, fue algo especial, algo como... – Aunque tratara, Esteban no encontraba las palabras para describirlo.
_ Es que nosotros ni siquiera nos conocimos y yo te... yo permití que be... – No tuvo el valor de decírselo.
_ Es cierto que no nos conocemos, pero en mi corazón yo siento que te conozco desde hace mucho tiempo y te he buscado por toda mi vida. ¿Qué sentiste tu María? Era más una súplica que una pregunta.
_ Sí. – Confesó María, yo también sentí lo mismo. – No podía negarlo y sobretodo a él. – Eso fue precisamente lo que sentí Esteban. Yo jamás he besado a un hombre la primera vez que lo veo, es que...
_ ¿No pudiste evitarlo? – Preguntó él acercándose
María caminó hacia atrás temiendo por su propia reacción a la cercanía de sus cuerpos, deseaba volver a besarlo, no podía controlar ese deseo, necesitaba hacerlo otra vez, pero...
_ Todo esto es una locura. ¿No lo ves? – Ella dijo muy firme.
_ Sí lo sé, lo es. – Él siguió acortando la distancia dejándola perturbada al escuchar su voz tan cerca. Era tan familiar, tan conocida, tan irresistible. – Pero ¿tú te atreverías a no vivirla?
_ ¿Vivirla? ¿De qué hablas? – Indagó María sorprendida por lo que decía él.
_ De lo único que tiene sentido para mí en este momento. Volver a besarte.
Se acercó aún más a María, ella trató de alejarse, pero no pudo hacerlo porque su corazón le gritaba que lo besara de nuevo, que no lo dejara ir. Ambos cerraron los ojos y nuevamente se lanzaron a un beso tan lleno de ternura como el anterior, pero esta vez con más pasión, los besos cálidos de Esteban invitaban a María a abrir la boca, de inmediato y ella aceptó. Las sensaciones de la pasión recorrían sus cuerpos y no podían dejar de besarse, se necesitaban. Esteban estrechó María fuertemente entre sus brazos y ella rodeó su torso sintiéndose tan plena con el calor de su cuerpo junto al suyo, la necesidad de ese contacto. Besarse les hacía sentirse completos, por eso aquél anhelo tan avasallador. Esteban lentamente dejó de besarla y los dos se quedaron mirando tan sorprendidos por lo que nuevamente había ocurrido, pero esta vez con la confirmación de que se pertenecían por la eternidad.
Si tú ves en mi
lo que veo en ti
no dejemos que
se haga eterna
nuestra soledad
_ Es una locura tan grande. – Susurró María.
![](https://img.wattpad.com/cover/67004222-288-k120104.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Entre la piel y el alma
RomanceUn encuentro, una mirada, la sensación de reconocimiento. Muchos impedimentos y una duda: ¿Vivir un amor que parece irresistible o renunciarlo en nombre del amor a los hijos? La canción Laberinto - Marger es la que aparece en el ima. Portada por @al...