03: El Castillo de Pólvora

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Mientras corría logre ver un agujero entre dos de las piedras de la estructura, el desconocido había salido, estaba caminando con su rifle apuntando, creía que seguíamos junto al portón, todos estaban atentos a eso, saltamos el muro y nos escondimos tras unas cajas que estaban a dos metros, pero nuestro plan no era tan elaborado.

-¿Y ahora Claudio? (Dije en voz baja)

- yo que sé, lo mío es disparar...

-Espera no dispares aún, ¿que son estas cajas?

Claudio sacó su cuchillo rompió una de las tablas de la caja, al ver lo que había adentro me quede petrificado unos segundos, estaban a tope de dinamita.

-Son como 8 cajas aquí... Y hay más del otro lado, mira, allí hay más,(Señalaba para todos lados Claudio)

-¿Para que necesitaría un viejo agricultor dinamita?

-recuerdas cuando dijo "maldito mugroso pueblo"

Si lo recordaba, al parecer planeaba hacer algo con toda esta dinamita, quizá por eso estaba nervioso. Cuando pude concentrarme tome dos barras de dinamita y le dije "vamos a entrar al sótano por la puertecilla de atrás", nos desplazamos cuidadosamente hasta una estructura a medio hacer de madera, estábamos por continuar nuestro camino cuando un disparo hizo volar astillas de la madera sobre nuestras cabezas desde una de las ventanas superiores, uno de los hijos estaba cargando su arma.

-¡Quieto, nos vieron!, (dije)

-¡te vieron! (respondió mi compañero en tono burlón.)

(Lance unas carcajadas, tome aire)
-tranquilo ahora lo bajo.

-¡cuidado Giovanni!

-¿de qué pequeño Claudio? Recuerda:" soy inmortal hasta que se demuestre lo contrario"

Esa era mi frase, mi padre solía decírmela cuando de niño le preguntaba si volvería de la guerra, la última vez que lo vi me dijo "Por supuesto que volveré Giovanni, recuerda, soy inmortal hasta que se demuestre lo contrario y estoy seguro de que tú también lo eres" las últimas palabras que escuche de él.

Me quede quieto, esperando un segundo disparo, midiendo el tiempo, otra bala impacto contra las maderas, mas de diez segundos para cargar el arma, pensé, me eché cuerpo a tierra tomando mi Winchester, apunté a la ventana tomé aire y apreté el gatillo, el disparo salió con un gran estruendo, a los pocos segundos el muchacho callo hacia atrás, cuando estaba por ponerme de pie para correr hasta la parte trasera de la casa unos cuatro disparos dieron contra el piso, levantando una nube de tierra... era el hombre desconocido riendo de una manera extraña, casi psicótica mientras recargaba su arma, Claudio sacó su revólver, se puso de pie y casi sin apuntar le dio en la cabeza, el hombre se desplomo de espaldas, comenzamos a correr, llegamos a las puertas del sótano que se encontraba tras la casa, las típicas puertas cuadradas que se encuentran casi al nivel del suelo, esta se encontraba trabada por un candado, y una biga de madera, saque mi sable y golpee la madera con el filo usando toda mi fuerza, de un tirón retire mi sable y di otro gran golpe, habría sido mejor un hacha, aun no se rompía. Claudio puso su mano en mi hombro luego de que logre sacar la hoja del sable de la hendidura que estaba marcando me hizo dar un paso para atrás.

-te mostrare como lo hacemos los hombres de verdad. (De una sola patada con todo su peso rompió la madera)

-Claro yo hago todo el trabajo y te llevas el crédito

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