Mi Guardaespaldas [Yesung y tú] (EN CURSO] (Primeros capítulos sin corregir)

Capítulo 29

-¡Tn!

-¿Si?

-Cuando termines de comer ¿Podemos hablar?

Preguntó con una ronca voz. Nos sentamos a comer, estaba curiosa por lo que iba a decir.

-Mamá ¿no se supone que ustedes estaban de viaje? -bebí un poco de jugo, mi madre comenzó a reír recordando algo-

-Es cierto, pero el día antes de tu cumple nos tuvimos que devolver, tu papá dejó unos papeles, aún lo recuerdo y muero de risa

-Amor, eso no da risa –dijo mi padre algo molesto y a la vez sonriendo-

-Estaba muy feliz porque estaría contigo en tu cumple pero olvidé llamarte a decirte, al otro día te iba a avisar que iría a tu casa, pero Yesung llamó a preguntar por ti ,nos asustamos y luego nos llegó a contar toda esa tragedia

Cubrió su cara con ambas manos, recordando con nostalgia.

-Mamá,ya pasó, ya estoy aquí –le consolé , coloqué mi mano sobre su hombre y le miré con una pequeña sonrisa-

-Por dicha y gracias al señor

-¿Y no tienen que regresar? –pregunté, cambiando de tema-

-Sí, en unos días –añadió mi padre-

-¿No les afecto en cuanto al trabajo?

-No te preocupes, pedí permiso

-Hablando de permisos, no he ido a trabajar

-Tranquila, yo avisé a Pausini, ¿Pausini es que se llama no? –dijo Yesung, uniéndose a la conversación-

-Sí

-Se preocupó mucho, me dijo que le avisara cuando te encontraran

-Mañana la llamaré

Yesung interrumpió, dirigiéndose a mi madre.

-Suegra, la comida quedó deliciosa

-Cierto

Apoyó mi padre junto a mí.

-Tantos halagos me molestan

-Por cierto, ya mandé a arreglar con todos los seguros del mundo, la herradura que rompieron

-¿Qué te dijeron en la delegación? –cambió de tema mi padre, curioso-

-Que mañana fuéramos a declarar

-¿Tendré que ir?

-Sí –me dedicó una mirada algo apenada- no te preocupes, estarás bien

-De acuerdo –cabizbaja, tomé su mano-

-Hoy dormirás aquí, me imagino, yo me iré a casa

-¿Por qué? Quédate tú también

-No señora, que pena -respondió este a mi mamá-

-Más pena debería darte llamarme señora –respondió con el ceño fruncido-

-Lo siento, suegra

-Así está mejor –dedicó una sonrisa, arrugando las comisuras de sus ojos-

Me levanté del asiento, tomé mi plato y vaso para lavarlo, Yesung me acompañó a la cocina.

-Tn

-¿Sí?

-Perdón por lo que te dije cuando peleaba contra aquel tipo

-¿Sobre que me callara?

-Sí