Capitulo 9

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Ya han pasado 2 meses y es hora de ir a Jeju, la otra semana será la pasarela así que hoy abordamos para organizar un poco mejor, como lógica Yesung me acompaña, llegamos al aeropuerto y llamaron por los altavoces nuestro vuelo, así que fuimos abordando despacio.

-Yesung vamos

-tengo miedo

-¿por qué?

-nunca he viajado en avión, me da miedo

-este…. bueno no es nada, no pasará nada, confía en mí, vamos, se nos hace tarde

-¿y si se estrella? –dijo con los ojos abiertos-

-calla no digas eso, no pasará nada, vamos

-OK OK!!  –subió asustado al avión y traté de buscar los asientos que nos correspondía, por dicha nos tocó en 2 asientos juntos-

-aquí es, en este asiento, rápido ven

-VOY!!!  -se sentó fulminante, su rostro aún expresaba preocupación- enserio tengo miedo –lo miré tiernamente, me parecía tan lindo lo que decía, parecía un niño de 5 años-

-No pasará nada

-Eso espero

El avión comenzó a partir y Yesung se asustó aún más de lo que estaba ,le dije que mantuviera la calma y cerrara sus ojos, cuando se empezó a elevar el avión Yesung tomó mi mano y la apretó, ese fue el primer día que sentí una sensación rara en mis manos y me estremecí gracias a él, sólo lo miré pero él continuaba asustado y con sus ojos cerrados, no pude soltarme de él, así que esperé un rato mirándolo y tratando de que se calmara, pasó mucho tiempo y me quedé dormida, cuando me desperté aún seguía con su mano entrelazada a la mía, lo miré y estaba dormido, hace poco había aterrizado el avión, así que lo comencé a despertar

-Yesung!! –moví su hombro mientras lo llamaba – Hey despierta –el chico abrió sus ojos asustado-

-Oh ¿qué pasa?

-Ya llegamos

-¿En serio? –Yesung se trató de levantar pero no pudo- ufff

-¿qué pasa?

-Me mareé

-Seguro es hambre

-pues si, no he comido nada

-Bueno vamos –me levanté con las maletas y esperamos que la gente saliera para seguir nosotros-

-¿A dónde nos quedaremos?

-En el hotel, comamos allí, tengo mucho sueño y cansancio no tengo ánimos de comer en algún restaurante

-Bueno vamos, mira un taxi –el pelinegro hizo una señal de parada al taxista y este cedió, me subí junto a él  y rápidamente llegamos al hotel, llegamos a la habitación, realmente estaba cansada no quería hablar con nadie, pero me tuve que aguantar el berrinche de un Yesung enfadado- no puedo creer que no me hayas dado dinero para otra habitación

-y ¿por qué no la pagas tú?

-porque según yo, yo al venir contigo traía todos mis gastos

-¿en que sueño? ¿Quién te dijo que te pagaría todo? -dijo carcajeada-

-si lo que sea, mandaré a traer comida

-Si, mientras me iré a duchar

-Ok, ve

Me metí a duchar, mientras las gotas de agua tibia caían en mi cara no, dejaba de pensar en aquel apretón de manos, era ridículo pero enserio no podía, tal vez era porque su mano era extremadamente pequeña, ¿cómo es posible que un hombre tenga la mano así? ¿es eso normal? No lo sé, sólo sé que no puedo sacarme ese momento de la cabeza, cuando salí de la ducha me vestí y salí a la habitación, Yesung  estaba sentado en el piso comiendo

Mi Guardaespaldas [Yesung y tú] (EN CURSO] (Primeros capítulos sin corregir)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora