Capitulo Numero 2: LA AMISTAD RECIEN COMIENZA

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Había llegado la hora de ir a la casa de Peter, tome mi bici y me encamine, pero mientras tanto, no pude evitar observar todos los infinitos rincones de esa pequeña Ciudad o gran pueblo, era tan bella… Hasta que me detuve, donde quedaría la casa?, no tenía ni idea, era la primera vez que daba una vuelta en bici y pretendí conocer la ciudad? Piensa Lali, piensa!, me dije a mi misma.
Unas mujeres salieron de un edificio, con ropa “sport”, y bastantes transpiradas, supuse que podrían venir de algún estilo gimnasio, pero no importaba eso, me detuve, pero otra problema se presentó, como les digo, un disculpen que las moleste, fue lo único que se me ocurrió así que intente con eso.
--- Discúlpenme que las moleste, pero podrían indicarme donde se encuentra la casa de los Lanzani?--- les pregunte en el tono más amable que pude hacer en ese momento.
--- Si, no hay ningún problema, mira de acá seguí derecho y dobla en la calle Lisandro de la Torre, es una casa blanca de dos pisos--- me indico con señas una mujer vestida de rojo.
--- Ah bueno muchas gracias--- le respondí y seguí camino.
No tuv2e ningún problema desde llegar a la calle de Lisandro de la Torre hasta llegar a la casa. Me sacudí un poco, y me peine un poco los pelos, pues la primera impresión con la familia de mi amigo era de mucha importancia.
Toque timbre, por suerte, Peter me abrió, porque no me hubiese gustado que me abra la puerta la madre o el padre quien ni siquiera me conocía.
Me invito a pasar a su habitación, la cual junto con toda la casa en general eran preciosas… Al entrar, vi una guitarra, al toque recordé lo mucho que me gustaba cantar, entonces le pregunte si cantaba, me respondió que sí, entre mi misma pensé, “genial tengo algo en común”. Al rato me pregunto si me gustaba algo así parecido a la música, entonces le respondí que sí, y ya teniéndole mucha confianza, le conté que escribía canciones, y que siempre de aquí para allá llevaba un cuadernito con todas las canciones, le dije, sacando de mi mochila el famoso cuadernito. El tomo entre sus manos y lo apoyo sobre su cama abierto, y mientras tanto tomo su guitarra, y leyendo la letra comenzó a tocar una melodía súper linda y suave, bien acorde con la canción, hasta re tranquila escuchándolo hasta que me dijo “vamos canta”, lo mire con disentimiento, me daba cosa si entraba la madre o algo, pero al verlo al hacerme la famosa cara de pucherito, comencé a cantar.
Me sentí otra persona en ese momento, nunca había cantado con otra persona mis canciones personales, pero ningún momento por más lindo que sea es infinito, y en un momento la canción termino, entonces para tratar de zafar del momento incomodo que se venía, le propuse empezar con la tarea, Peter no tuve ningún problema, entonces tomamos las mochilas y nos dirigimos al comedor para hacer la tarea.
En un abrir ycerrar de ojos la habíamos terminado, no era tan complicada. Una vez terminado todo llevamos las mochilas a la habitación de Peter, pero en el trayecto, nos encontramos a Euge, que nos felicitó de lo bien que nos había escuchado cantar, ambos le agradecimos, y seguimos con nuestro camino.
Al entrar a su habitación, me pidió mi número, el cual no dude en dárselo en ningún momento, pues comenzábamos a ser grandes amigos, seriade locos si no se lo quería dar. Al dárselo, me acompaño hasta la puerta, ya estaba oscureciendo y debía irme, pero antes de despedirnos, nos sacamos una foto, la cual fue a parar a instagram, ya que yo era bastante fotogénica…
Un hasta mañana nos despidió a ambos. Una vez en mi bici, me concentre en retroceder sobre mis pasos para poder encontrar mi casa, pues era nueva, no conocía muy bien todo.
Al llegar a mi casa, me encerré en mi habitación, quería estar un rato tranquila sin pensar en nada, hasta que mi celu me distrajo, eran mensajes de mis ex amigas, preguntándome como locas quien era ese chico, después de que me habían hecho hacer el ridículo en mi anterior escuela (por eso y otras peleas, me había mudado) me preguntaban quién era, como si realmente les importara, se hacían las buenas porque luego de un tiempo comenzaron a mandarme mensajes de que estaban arrepentidas y un montón de cosas, pero ya era tarde, yo ya me había mudado. Mejor olvidarse.
Me eche en mi cama, para esta vez si poder estar tranquila, cuando note que el celular seguía sonando sin parar, entonces, un poco malhumorada, me levante y lo tome, y mire todos los mensajes, en realidad no los mire, los elimine, pero un me llamo la atención, era peter, que me habría mandado?... Pero antes de abrirlo, el grito de mi madre llamando a mí y a mi hermano me obligo a dejar el celular, y a ir al comedor para comer, porque a mi padre y a mi madre, no les gustaba mucho esperarnos.
Comí lo más rápido que pude, me intrigaba saber que me había mandado Peter. Al entrar a mi habitación, tome mi celular, me senté en mi cama, y abrí el mensaje, en ese momento todo mi “malhumor” de antes desapareció, al ver que Peter me había mandado “me encanto pasar la tarde con vos”.
En ese momento, no sabía más que poner, hasta que le mande; “gracias, a mí también me encanto pasar la tarde con vos amigo. Mientras esperaba que me conteste, tome mi piyama y me cambie, me acosté, y en ese mismísimo momento, otro mensaje entro, era de él, decía:
---“Gracias, sabes no eres como las otras chicas”--- me respondió, lo cual me dejo un poco confusa entonces le mande;
--- “Jaja, eso es bueno o malo?”---
---Bueno, sabes, cantas hermoso!---
---Bueno, gracias! Y tú también sabes tocar muy bien la guitarra---…
Y así seguimos charlando de los temas más insólitos, hasta que comencé a tener sueño, entonces me despedí de él, deje mi celular en la mesa de luz, y me dispuse a dormir, pero esta vez con una sonrisa de oreja a oreja de saber que toda mi vida estaba comenzando a cambiar, y que esta linda amistad recién comenzaba.

Novela Laliter Miedo A PerdeteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora